Capítulo 10

394 41 4
                                    

-Mariana sos Mariana Espósito, llevas tres días seguidos sin subir nada a las redes, tus seguidores están preocupados, ¡creen que estas enferma o algo! ¡Tenes que salir a desmentirlo!- mi mamá estaba preocupada por mi repentina desaparición de las redes.
-¿No recordas el hecho de que estoy estudiando?-la confronté y ella abrió ampliamente sus ojos, si había algo a lo que no estaba acostumbrada era a que le de "pelea", bueno, o algo más "light", a que le conteste.
-¡Podes hacer ambas cosas! ¡No descuides tu imagen! Mariana nosotros vivimos de nuestra imagen, ¡toda tu familia vive de la imagen! Y tenes que volver a maquillarte bien, ¡llevas un mes y medio en la universidad y crees que podes ser otra persona! ¡Te conozco, sos mi hija! Y sé que estás haciéndote la humilde para encajar, tenías otras instituciones privadas para elegir, ¡pero elegiste una de hippies!-sí, mi mamá realmente estaba enojada.
-María Laura, ahora tengo otras prioridades, voy a hacer un anuncio desmintiendo que estoy enferma, pero la verdad es que le estoy agarrando el gustito a no vivir pendiente del teléfono-elevé mis cejas.
La cara de horror de mi mamá nunca la vi antes.
-Sos una Espósito-me lo recordó cómo lo hizo siempre a lo largo de mi vida- de por si no deberías estar estudiando, ¡tu bisabuela te llenó la cabeza con fantasías color rosa! ¡La vida real es cruda! ¡Muy cruda, y seguramente nunca vas a estar lista para enfrentarla!
Y ella me dio un golpe donde más me dolía, en mi autoestima, terminé dudando de mi capacidad como siempre.
-Ok.. Ahora hago el comunicado-me intimidé-¿puedo irme? Tengo que estudiar-cambié de tema.
-Lali-me llamó de manera "amigable" para que el clima sea pacífico- no me gusta elevarte el tono de mi voz.. Realmente no se que haces estudiando, ¡vas a heredar una herencia! Sos la heredera de todo lo que tus parientes consiguieron por años-intentó darme un abrazo y me alejé- estas perdiendo tiempo de ocio estudiando, ¿acaso pensas trabajar de docente? ¿Ser escritora?-se rió y eso volvió a ponerme más mal.
Me sentí humillada, mi mamá, la persona que se supone que tiene que apoyarme estaba haciendo todo lo contrario, menospreció a mi carrera y menospreció a mi capacidad.
Abandoné mi casa de mi infancia y me subí a la camioneta que manejaba Alicia, mi chofer sabía que en este preciso instante lo que menos necesitaba era hablar.
La cabeza empezó a dolerme y al llegar a mi departamento me tome un calmante.
-Es una bruja-Eugenia me guardó en sus brazos para quedarse conmigo, sabía que con ella siempre podía contar- entonces.. Al final, ¿que vas a hacer?
-Lo "ideal" para ella sería que abandone mi carrera, pero no pienso darle el gusto, ¡toda mi vida le di el gusto! ¡Soy adulta Chinita! Finalmente encontré algo que me gusta, soy feliz leyendo, soy feliz entendiendo, conociendo.. soy feliz-esbocé una pequeña sonrisa- feliz estudiando
-Sos feliz de aprender y al mismo tiempo sos feliz de estar en otro ambiente, uno muy distinto al tuyo, ¿no?
Asentí con la cabeza.
-Poco a poco la gente que habló mal a mi espalda se está calmando, y algunos hasta se muestran amables-tomé aire y solté un suspiro- sé que el camino que estoy eligiendo es el difícil, pero siento la necesidad de demostrarme que puedo con todo.. y que puedo hacerlo sola
Mi amiga se emocionó y orgullosa me abrazó otra vos.
-¿Abrimos una botella de champagne?-Eugenia elevó sus cejas y asentí, terminamos brindando y comiendo, al rato nos despedimos.
Cuando estaba por irme a dormir recordé que no aclaré que no estaba enferma, entonces comencé un vivo después de maquillarme.
-¡Hola gente!-saludé a la cámara- salgo a desmentir cualquier tipo de enfermedad que me inventaron, por suerte estoy bien de salud, y si ahora tengo ojeras como los simples mortales es porque estoy con muchos estudios y cosas para leer-sonreí, rápidamente mis seguidores me llenaron de mensajes, los primeros eran de cariño, y después llegaron los malintencionados.
"Estas re fea", "¿Ya desaprobaste alguna materia?", "Seguro no te conectas seguido por estudiar para no desaprobar y ser una avergüenza", "sos buena para nada, seguí bailando en Tik tok", "Quién está mirando este vivo no hace nada de su vida".
Y se desató una "guerra" de mis seguidores buena onda contra los mala onda y crueles, algunos me defendían, otros me agredían.
Todas esas palabras provenientes de personas que no me conocían en cierta manera me hirieron.
Apagué mi teléfono celular y lentamente cerré mis ojos para dormirme, cuando estaba por conciliar el sueño escuché el sonido del timbre, me puse de pie, el portero me anunció que Peter estaba abajo, si lo dejaba subir o no.
Tomé aire y solté un suspiro después de acceder a su visita.
-Hola..-lo saludé desanimada-¿qué haces acá? Creo que es la una de la mañana..
-Son las dos de la mañana, pero te noté mal..
¿Podía estar hablándome del vivo? No.. No había ninguna chance de que alguien como Peter Lanzani hubiese gastado tiempo de planes intelectuales mirándome hacer nada.
-Peter.. ¿Porqué? ¿Porqué viniste?-seguí desconcertada.
-Te vi.. Hablando con tus "seguidores", estaban agrediéndote, y estas muy maquillada.. Y lo supe, algo andaba mal, ¿no?-me miró a los ojos y después de unos minutos asentí, no lo negué-¿qué pasó?
-Mi familia, la misma historia de siempre, tengo que mantener mi imagen impecable, no ganarme enemigos, y al parecer hoy me gané a varios enemigos, ¡y sin hacer nada!-respondí sarcástica.
Peter me pidió permiso para entrar del todo a mi departamento y lo dejé pasar, acto seguido me abrazó, y eso me dejó en shock, yo también lo abracé, la verdad era que sí necesitaba esa clase de contacto, esa clase de calidez.
-No llores..-Peter apartó las lágrimas que se me cayeron por las mejillas.
-¡Soy una estúpida! ¡Estoy llorando!
-No sos estúpida, ¡la verdad ya me estaba preocupando! Desde que te conocí nunca lloraste, y te noté en otras ocasiones rara, pero no quise indagar para no incomodarte, pero creo que después de tanto tenemos otra confianza.
-Sí-asentí y Peter me besó la frente, una pequeña sonrisa se me formó en mis labios.
-Los artistas lloran... Yo soy de llorar cuando escribo, soy una persona emocional aunque no lo creas
Elevé mis cejas porque estaba sorprendida, cada día que pasaba Peter Lanzani me sorprendía más.
-Creí que eras medio duro para las lágrimas y las cosas que impliquen sentimientos..
-Si no tuviera sentimientos no estaría acá ahora mismo-él se quedó pensativo y su carita cambió a una mala después de que fue consciente de lo que dijo- a lo que voy es que me importas, así cómo me importa mi mamá, mis amigos, toda mi familia-cambió de tema cómo si nada y esquivó lo que pasó... o tal vez no pasó nada y lo que interpreté sólo fue parte de mi imaginación.
Nerviosa me reí y le sonreí.
-Gracias por animarme, hoy fue un día duro.. Lo mejor es que me duerma
-Sí, pero antes tenes que hacer algo-Peter se puso de pie y fue hasta el baño, no sé cómo pero encontró mi desmaquillante, poco a poco me sacó capa y capa de base, para finalizar con esa rutina que tuve que haber hecho yo besó tiernamente mi mejilla- ahora sí, bien linda, vas a dormir tranquila
-Gracias Peter...-le sonreí y le hice lugar en mi cama-¿te quedas? Sólo a dormir-junté mis manos cómo si estuviese rezando.
Él se rió y se sacó su ropa, se quedó en boxers y se recostó a mi lado, sintiéndome cómoda volví a cerrar mis ojos, sentí una caricia en mi cara, pero ni me moví, la verdad era que estaba agotada.

Despertar siempre era lindo, porque uno de mis momentos favoritos era el desayuno, siempre solía ser una persona cambiante, huevos revueltos con palta y tostadas, medias lunas, cereales, todos días elegía algo distinto, pero esta mañana cambiaron mis planes.
-¿Peter?-me extrañé al verlo levantado, él estaba luchando contra la cafetera, no pude evitar reírme.
-Es muy tecnológica para mi gusto, ¡tiene mil funciones!-se quejó-¿me ayudas?
-Amaría ayudarte pero nunca la uso-me encogí de hombros-Ofelia me hace el desayuno, y la cena.. y cuando estoy acá el almuerzo..-mordí mis labios avergonzada.
-¿Y ahora donde esta Ofelia?-Peter elevó sus cejas.
-Seguro debe estar por venir, podemos esperar..
-No-Peter negó enfáticamente con la cabeza- puedo hacerlo, busco las instrucciones en internet
-¡Muy astuto!-lo felicité y él se hizo el canchero.
Me quedé observándolo, él hizo todo, me sirvió café en la taza e hizo tostadas para comer con quesos crema y frutas.
-¿Cómo venís con el próximo trabajo para entregar?-me miró de reojo y me limpié la boca con una servilleta, yo era algo tímida, sobretodo porque junto a él estaba demasiado expuesta a todo, y al mismo tiempo no sabía si estaba cruzando una linea que no tenía que cruzar, constantemente me agarraba un miedo a faltarle el respeto y que todo termine para el culo cómo me advirtió que podía terminar todo.
-¿Me lo pregunta Peter el que está ahora mismo conmigo o Juan Pedro?
-Peter el que disfruta de tu compañía y esta ahora mismo con vos.. ¡lo que extraño las épocas de investigaciones y exámenes!
-¡Por eso ahora los tomas vos!-lo molesté y le robé una sonrisa chiquita- hay algo que no te pregunté y me da cosita desubicarme, o escuchar la realidad-hice una pausa- sos joven.. ¿Cuanto tenes?
-¿Años?-se hizo el boludo y asentí-¿cuanto me das?
-¿Te puedo dar mi edad?-lo miré a los ojos coqueta y él soltó un suspiro, negó con la cabeza- ¿30?-lo jodí porque claramente no tenía treinta.
Él quiso hacerme cosquillas y lo evadí.
-No, teniendo en cuenta que tuve cinco años de carrera universitaria, que sería lo más corto posible y este es mi segundo año dando clases...
-¡No me anoté en matemáticas! ¡Me anoté en Filosofía y Letras! ¡¿Podes ser claro?!-lo fulminé con la mirada.
-Veinticinco
-¡Golpe duro!-me toqué el pecho en modo drama y él se quedó serio- ¡estoy jodiendo! No es tanto.. Por cierto, ¡¿dijiste cinco años de carrera?! Creí que eran tres..
Se le formó una sonrisa que me dio a entender que yo me había confundido, sí, eran cinco años de carrera, después volvió a ponerse serio.
-¡Por favor decime que no tenes dieciocho, o me mato!
-Diecinueve, ¿vas a matarte?-su dramatismo estaba divirtiéndome- pero voy a cumplir veinte tarado
-¿Porqué me gané esta ofensa de manera gratuita?-lo noté realmente preocupado.
-¿Qué te preocupa la "ofensa" o lo otro?
-Lo otro...-volvió a ponerse serio-¡hice todo mal Lali! Primero no pregunté desde el principio, después lo de que no sabía que iba a ser tu primera vez, pero antes que todo que no pensé en nada y me arriesgué, y me metí donde no tenía que meterme-suspiró y preocupado apoyó su mano sobre su frente.
-Romeo no era tímido ni a palos, se metió en el jardín de lo los Capuleto para visitar a Julieta
-¿Estas comparándonos con Romeo y Julieta?, ¿sabías que es una tragedia, no?-me miró firme y negué.
Acto seguido nos reímos, terminé asintiendo con la cabeza y lo abracé después de sentarme sobre sus piernas, ¿porqué me encantaba hacer eso? Me encantaba tenerlo cerca.

Nuestra maneraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora