Cargando con el pasado

Capítulo 3. Conocerte

Cuando finalmente Sam habla siento que estoy a punto de desmayarme ya que estaba reteniendo el aire y mi cerebro dejó de oxigenar correctamente. Por lo cual no entendí lo que me decía mientras se separaba de mis brazos, Sam estaba muy sería y pensé que lo había arruinado, pensé que me odiaría o sentiría asco como mis padres. -¿Qué?- dije de forma automática y solo provocó que Sam me viera aún más sería, creí que me soltaría a llorar en cualquier momento.

-Dije, ¿Eres team sangre o team carne?- Al escuchar eso me puse muy roja, pero el alivio invadió todo mi cuerpo inmediatamente, Sam al terminar de hablar y ver cómo me avergoncé se empezó a reír a carcajadas mientras se agarraba el estómago. -Sam, eres una idiota, ¿cómo mierdas preguntas eso? Ahora por idiota no te diré nada más.- Dije con una voz chillona, mis ojos estaban rojos intentando no soltar las lágrimas que se acumularon por el alivio que sentí. Sam es una de las pocas personas que no me crítica o juzga por ser como soy, ella no sintió asco o lastima cosa que agradezco desde el fondo de mí corazón ya que no soportaría perderla también.

Después de intentar recuperarse, Sam intentó hablar. -jajajajajaja tuviste que ver tú cara, mi bebé es tan inocente jajajaja, aunque creo que eres team sangre o tal vez ¿lo tienes chiquito?- Dijo alzando su dedo meñique, pero rápidamente negó con la cabeza. -Me inclino más a la primera, ya que eso explicaría el porque Lucy a veces llegaba caminando raro.- Dijo Sam mientras me lanzaba una mirada divertida, yo solo rodé los ojos recordando a Lucy, estoy segura que ella también hubiera seguido la broma de Sam, ojalá estuviera aquí ya que ella fue la primera persona que no me juzgo y me hizo amarme como soy. Sacudí la cabeza intentando sacar esos recuerdos de mi mente y empecé a caminar hacia la cafetería, nuestra plática iba a demorar y ya íbamos tarde a la clase de cálculo, así que no tenía sentido correr a clases y una falta más en esa materia no nos perjudica.

Cuando llegamos a la cafetería estaba prácticamente vacía, pero tomamos lugar en la esquina contraria de la puerta para evitar que alguien escuchará nuestra plática, yo pedí un café negro, mientras que Sam pedía panqueques con fresa y un batido de chocolate con chispas de colores, nunca entenderé como come tanta basura sin engordar, estoy segura que en otra vida fue un extraterrestre. -Su nombre es Alex, es la capitana del equipo de baloncesto, además trabaja de voluntaria en la biblioteca junto a su hermana, Kara y dicen que es igual de hermosa que su hermana Alex. Conocí a Alex el día que la profesora Cat nos dijo sobre el proyecto final, ya que fui a la biblioteca por un libro para realizar la parte teórica del proyecto, pero no encontraba los libros que necesitaba y me acerque a la recepción y ahí estaba ella moviendo unas cajas con libros, ví como sus brazos se tensaban al mover las cajas, parecía una diosa griega.- Sam me contaba tan emocionada sobre esa chica que no podía evitar sonreír. -Lo malo es que he ido todos los días que no tenemos ensayo durante las últimas dos semanas y ni siquiera me nota.- Dice Sam de forma cansada mientras agacha la cabeza, normalmente Sam no tiene dificultad para llamar la atención de las personas, por lo cual es comprensible que ahora se sienta estresada por la situación. -Oye está bien, yo te voy a ayudar, dime ¿cuál es el plan?, porque estoy segura que no pasamos por la plática de que somos bisexuales por nada. De seguro ya estabas tramando algo, ¿O no?- Digo de forma segura, siempre apoyaré y ayudaré a Sam, hay pocas cosas que no haría por ella.

-Inteligente como siempre Lenita y yo pensaba amenazarte para que me ayudarás, pero ya que te ofreciste te diré mi plan.- Sam aparenta ser solo una linda cara y nada más, pero como dije es muy inteligente, si te descuidas ella barrería el piso contigo, mientras Sam fórmula su plan yo llevo mi café a mi boca para tomarlo. -El plan es este: seduce a su hermana Kara para que yo sea su madrina de bodas y pueda hablar con Alex.- Dice Sam de forma brusca, haciendo que me ahogue con mi café, provocando que la mitad terminé en su cara. ¿En verdad dijo esa mierda? A veces olvidó que Sam es inteligente solo cuando no está enamorada.