They shine for you, my love 곷 Chaelisa

Happy Birthday, Lisa

-Estaba por cumplir los nueve cuando murieron.-Susurró Lisa, siguiendo el contorno del enorme tatuaje en el pecho de su novia con el dedo, distraídamente.-Se llamaban Marco y Chitthip. Eran los mejores padres del Universo entero.-La castaña esbozó una sonrisita nostálgica.

FlashBack.

-¡Mamá, quiero esa paleta!-Chilló la pequeña de siete años, saltando en su lugar mientras se aferraba con sus manitas al pantalón de su madre, que sonrió graciosamente y negó con la cabeza.

-Cenaremos al llegar a casa, y a esos dientes no les hace falta más azúcar, señorita. El dentista va a querer matarnos.-Susurró, tomando la mano de su hija y caminando entre el gentío con ella.-Y ahora, a ver donde está tu padre.

La pequeña castaña sollozó sin lágrimas, mientras seguía explicándole por el camino las razones por las cuales le tendría que comprar esa paleta a su madre, y ella las iba descartando a todas.

Cuando llegaron a una esquina, Chitthip se giró para mirar al camino recorrido y localizó a su esposo, que venía caminando unos pasos por detrás de ellas.

-Cariño, iré al banco por un minuto.

Su esposo asintió y Chitthip entró en el edificio, dejando afuera a su hija, que se cruzó de brazos, enfadada, mientras esbozaba un exagerado mohín.

La pequeña castaña se giró cuando sintió que alguien abría la pequeña mochila de Barbie que colgaba sobre sus hombros, y sonrió al ver a su padre allí, guardando la tan preciada paleta en el pequeño bolsillo.

Sin dudarlo, la niña se arrojó a los brazos de su padre.

Seguramente, su madre se enteraría en cuanto llegarán a casa, y ambos terminarían castigados, pero eso ahora no importaba.

Ella tenía el mejor papá del mundo.

Fin de FlashBack.

Lisa sorbió por la nariz, secándose las lágrimas con la playera de su novia que se había puesto, y suspiró.

-Todos pensaban que no recordaría mucho, era muy pequeña. Pero lo recuerdo todo, Rosie, todo.-La rubia acaricio su espalda de arriba abajo, apretándola más fuerte entre sus brazos.-Se amaban tanto, ¿Sabes? Creo que nunca he visto a dos personas amarase tanto como ellos dos. Ella estaba loca.-Lisa soltó una risita.-Más de una vez nos intoxico con sus inventos gastronómicos. Y mientras yo escupía la comida debajo de la mesa, papá le decía que estaba delicioso y se lo comía todo. Sólo para no hacerla sentir mal.

Roseanne sonrió, levantado su mano derecha para secar las mejillas de la castaña antes de besar su frente suavemente.

-¿Qué sucedió?

Lisa inspiró entrecortadamente, sin separarse de ella.

-Íbamos en el coche a la madrugada, yendo de vacaciones. Estábamos no muy lejos de casa cuando me di cuenta de que me había olvidado de Nana.-Lisa suspiró, volviendo a deslizar la punta de sus dedos por el tatuaje de su novia.-Nana era una vieja muñeca de trapo. No podía vivir sin ella. Los molesté tanto que finalmente papá decidió volver. Estábamos a punto de llegar cuando algo impactó contra nosotros y volcamos.-Lisa cerró los ojos con fuerza, intentando mantener a raya el dolor que se había apoderado de ella.-Era un conductor ebrio. No recuerdo nada de los días siguientes, salvo que no paraba de preguntar en dónde estaban mami y papi y nadie me respondía.

-Nena...

-Y luego me llevaron con mis tíos. Ellos estaban molestos. No estaban tristes, sólo... Enfadados porque yo estaba allí.-Lisa suspiró.-Y eso es todo. He vivido con ellos desde entonces y escapé en cuanto pude.