Capítulo 28

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Laura amaneció al día siguiente, cuando miro el despertador se dió cuenta de que todavía faltaba un rato para levantarse, así que por no poder disfrutar de todo su rato de descanso soltó un gruñido de enfado y hundió su cabeza en la almohada de nuevo. Al cabo de unos minutos, en los que intentó volver a conciliar el sueño, se rindió y optó por revisar un poco su teléfono. Entró en Instagram y comenzó a ver con una sonrisa, unas cuantas historias que habían subido a la cuenta de Morat, en la cuales se podían ver a los chicos de su ensayo del día anterior. Cuando terminó fue a revisar Whatsapp y contestó un par de mensajes de Villa, en los cuales este le decía que les habían dado el día libre y que esperaría su llamada para hacer la prueba los dos juntos.

Cuando levantó la cabeza para volver a ver la hora, se dio cuenta de que ya era hora de comenzar el día y se levantó de la cama, se quedó unos segundos de pie esperando que algún tipo de náusea matutina le invadiera pero al cabo de unos segundo decidió continuar. Se metió directamente a la ducha con el pensamiento de lo que tenía que hacer hoy, y un sentimiento de nerviosismo la invadió, a la vez que la duda y la emoción se unían, creando una sensación en su estómago. Cuando salió, tomó un conjunto cómodo pero bonito y bajó directamente a desayunar, cuando terminó, revisó de nuevo la hora y con rapidez tomó su bolso, las llaves y se dirigió a la librería directamente. De camino intentaba simplemente pensar en llegar cuanto antes a su trabajo, pero el inevitable tráfico madrileño de hora punta, le daba un pequeño margen para imaginar la cantidad de cosas que podían pasar basándose en el resultado de ese test. Un pitido la sacó de sus pensamientos, pero cuando llegó a la tienda intentó mantener alejado esos pensamientos hasta esa tarde.

Alicia: ¡Buenos días! -Exclamó con alegría Ali entrando a la librería al mediodía-.

Laura le miró y se dió cuenta de que esta llevaba consigo una bolsa de un restaurante al cual solían ir.

Laura: ¿Qué haces aquí? ¿Tú no trabajas? -Preguntó mirándole con la ceja levantada-.

Alicia: También me alimento y claro, pensé "Me apuesto lo que quieras a que nuestra librera favorita se olvida de comer" y lo siento, pero no lo iba a permitir -DIjo mirando a Laura sonriendo-.

Laura: Iba a comer, no tendrías que haberte molestado.

Alicia: Laura, son casi las tres de la tarde y la librería sigue abierta, tienes la cabeza en otro sitio y no estás pensando en comer -Dijo abrazando a su amiga mientras dejaba las bolsas encima del mostrador-.

Laura suspiro cuando se dió cuenta que se había pasado las últimas horas en otro lugar, salió de detrás del mostrador, revisó que no quedaba nadie y giró el cartel de "Abierto". Ambas se dirigieron a la trastienda para comer tranquilas cuando Ali miró de forma extraña al darse cuenta que su amiga no había levantado la cabeza de su plato.

Alicia: ¿Qué pasó? -Dijo sacando a Laura de sus pensamientos-.

Laura: Nada -Dijo intentando disimular su ensimismamiento, pero al darse cuenta de que Ali no iba a dejarla, soltó un suspiro- Ayer le dije a Villa que creo que estoy embarazada. -Al escucharlo Ali se acercó un poco más a su amiga y le comenzó a frotar la espalda con cariño-.

Alicia: ¿Y fue todo bien? -Dijo con un tono de voz suavizado-.

Laura: Si, le explique de que raíz de lo que me explicaste creo que se podría dar la posibilidad, me preguntó si lo quería tener y terminamos diciendo que esta tarde haremos un test de embarazo por videollamada para ver si si o si no -Dijo volviendo a sentir ese nerviosismo-.

Alicia: Entonces, todo bien, simplemente es ver que pasa y tomar la decisión en base a lo que salga. -Dijo intentando conseguir que su amiga se relajará un poco-.

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⏰ Última actualización: Feb 24, 2023 ⏰

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El chico del corazón de cristal: A donde vamos ahoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora