El chico del corazón de cristal: A donde vamos ahora

Capítulo 1

2 años después

*Narra Villamil*

Dos años habían pasado desde aquel encuentro que había marcado un cambio en nuestra relación. Después de aquella tarde Laura y yo no nos separamos para nada, disfrutamos de la presencia del otro, aproveché como nunca aquellos días en Madrid para pasarlo con Laura y disfrutar intentando compensar la falta que me hizo en dos meses. Poco después de aquellos días continuamos girando por algunas ciudades de España para después poner rumbo a México por algunos meses de promoción y conciertos, era como nuestro pequeño círculo interminable.

En cuanto los chicos supieron de nuestro reencuentro fueron casi de inmediato a casa de Laura junto a Olivia y Alicia para esperarnos allá, sin duda aquel día fue único. Los chicos y yo seguimos igual a pesar de pasar tantos años juntos, ellos seguían siendo mis hermanos de otra madre y eso se notaba en cada pelea que acaba en un abrazo o en alguna que otra carcajada. Por otro lado, en estos dos años Alicia y Martín se habían unido muchísimo y estaban en una muy bonita y divertida relación, Olivia traía algunos días a Marcos y nos hicimos más unidos a él. Así con el paso del tiempo éramos una pequeña familia un tanto especial.

Yo pensaba que antes de conocer a Laura había descubierto el amor solo que, con personas erróneas, pero me equivocaba. Cuando miraba a Laura reír, dormir o simplemente sonreír sentía que con ella a mi lado podría conseguir todo aquello que me propusiera, que daría mi vida por saber que ella era feliz y fue en ese instante cuando me di cuenta que aquello sí que era amor, el sentirte seguro al estar con otra persona, el sonreír al verla, disfrutar sus logros y llorar sus derrotas, eso era el amor más puro y verdadero.

Me encontraba en la cama, a mi lado estaba durmiendo la persona que se convirtió en mi felicidad y en la razón de mi sonrisa. Miraba al techo pensando en todo lo que habíamos vivido, recordando aquel día y lo afortunado que era al tenerla cuando noté como Laura comenzaba a moverse un poco, dirigí mi mirada hacia ella mientras una sonrisa aparecía en mi rostro. Cuando abrió los ojos poco a poco me topé con su verde mirada y una pequeña sonrisa apareció en su rostro.

Villamil: Buenos días amor.

Laura: Buenos días –Dijo con la voz algo ronca mientras se desperezaba, yo sonreí tiernamente ante tal escena-.

Villamil: ¿Descansaste? –Dije girandome para quedar cara a cara ante ella-.

Laura: Si –Dijo sonriente para después darme un corto beso-.

Yo sonreí para segundos después levantarme siguiendo a Laura, después de unos minutos estábamos ya preparados y nos dirigimos a la cocina para desayunar. Comenzamos a preparar el desayuno entre risas y planes de futuro.

Villamil: ¿Alguna vez has pensado en mudarnos juntos? –Dije haciendo que Laura me mirara extrañada mientras yo mezclaba un par de huevos-.

Laura: ¿Y no lo estamos? –Me dijo mientras tomaba algo de la nevera-.

Villamil: Pero digo como algo más oficial, comprar una casa y tener nuestras cosas ahí –Dije mirándola y noté como ella me miraba con una sonrisa preciosa-.

Laura: Me parece una idea estupenda amor, pero si lo piensas es un poco absurdo. Tú siempre estás viajando y sería un gasto de dinero innecesario –Dijo mientras colocaba una de sus manos en mi mejilla mientras me miraba-.

Villamil: Bueno, también tienes razón.

Laura: Pero yo encantada de que te vengas aquí a vivir conmigo –Dijo mientras se acercaba a mí para abrazarme-.

En un rápido movimiento pude coger un poco de miel y en cuanto estuvo cerca de mi pude manchar toda su cara.

Laura: ¡¡¡¡¡JUAN PABLO!!!! –Dijo en un grito cuando yo solo reía, ella se limpió un poco para poder dirigirme una mirada enojada- Te vas a enterar.