Un lugar por descubrir.

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***
Más tarde, tuvieron hambre y el vampiro ordenó que les llevaran algo de comer al dormitorio.

Cuando la cena estuvo lista, se la llevaron y los dejaron solos en el dormitorio.

—¿Sabes, Kacchan? Hoy, durante la celebración de aniversario de mis padres, vino una antigua amiga pero... Digamos que nuestro encuentro no acabó bien.

—¿Por qué? ¿Qué pasó?

—Ella intentó ligar conmigo pero le dije que yo tenía a alguien y se enfadó mucho cuando se enteró.

—Así que ella está enamorada de ti, ¿cierto?—Cuestionó celoso.

—Eso creo, pero a mí me da igual.—Yo  te tengo a ti y no necesito a nadie más.—Aseguró acercándose a él para abrazarlo.

—Hump. Más te vale.

Empezaron a comer y Katsuki pudo probar la comida de aquel extraño mundo repleto de criaturas mágicas.

—¿Te está gustando, Kacchan?

—Sí, no está mal.—¿Qué carne es esta?

—Carne de faisán.

—¿Faisán? ¿Qué animal clase de animal es ese?

—Un ave, ¿acaso en el mundo humano no existen?

—Sí, sólo que jamás la había probado.—Respondió para continuar comiendo.

—Pues en este mundo es bastante popular entre las familias de la nobleza.—Dijo degustando la carne.

Después comieron un poco de puré de patatas, además de una salsa para acompañar la carne.

Cuando acabaron el plato, pasaron al postre que era un trozo de tarta de vainilla con nata y frutos rojos por encima.

—Todo estaba delicioso.—Dijo Bakugou al final.

—Me alegra, Kacchan.—Voy a pedir que se lleven todo.

Agitó una campanilla y un par de sirvientas aparecieron de repente para llevarse todo.

—Izuku, no tengo sueño ni estoy cansado; ¿podríamos salir a dar un paseo nocturno?

—Mmm... Es peligroso para un humano como tú, sin embargo, podría disfrazarte.

—De acuerdo. Préstame ropa y accesorios para poder pasar desapercibido.

—¡Hecho!

Midoriya chasqueó los dedos y aparecieron varios roperos para poder elegir un conjunto con su novio.

—Yo creo que te quedará bien esta capa negra, la camisa blanca, el chaleco gris y los pantalones negros. Los zapatos no es necesario que te los cambies, te quedan bien con esta ropa.

Katsuki, tras revisar la ropa, llegó a la misma conclusión y procedió a arreglarse.

—Kacchan, esta noche te llevaré a un lugar muy especial.

—¿Ah, sí? ¿Adónde?

—Te llevaré al bosque de los duendes, te encantará.

A Bakugou realmente le emocionaba pensar que podría ver a duendes de verdad, así que se vistió enseguida.

***

Más tarde, una vez ya listos; aparecieron en la calle gracias a la magia de Deku.

—¿Te importa que vayamos a pie, Kacchan?

—No, de hecho, lo prefiero. Así podremos movernos libremente, sin que nadie nos espere.

—Pienso lo mismo, vamos.—Dijo sonriéndole a la vez que le extendía una de sus manos.

Katsuki aceptó aquel caballeroso y agarró la mano del pecoso para iniciar el camino juntos hacia el bosque de los duendes.

—¿Los duendes suelen ser territoriales o son amigables?—Preguntó el rubio cenizo de repente.

—En general son bastante amigables, aunque también los hay que se muestran hostiles.

—Ya veo. Llevaré cuidado con ellos.

—Sí, es lo mejor.—También te recomiendo que no digas tu verdadero nombre si te preguntan.

—¿Por qué razón?

—Hay algunos simpatizantes de los Todoroki entre ellos y podrían contarles que nos vieron aquí.

—De acuerdo, diré un nombre falso.

—¿Y cuál dirás?

—Keitaro.

—Ese nombre significa bendecido, ¿por que has elegido ese?

Bakugou le sonrió y le respondió:

—Porque me siento bendecido por tenerte a mi lado.

Al escuchar la razón, el corazón de Izuku se aceleró y su rostro se ruborizó.

"¡Kacchan es tan lindo!"

El humano, al ver la reacción del contrario, sintió mucha ternura y le preguntó:

—¿Qué te parece, Izuku? ¿Te gusta?

—Sí...—Me encanta. Te amo, Kacchan.—Contestó sonriéndole de manera dulce.

—Yo también te amo, Izuku.

Se dieron un breve y tierno beso para luego seguir avanzando hasta el bosque.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!


¡Espero que os haya gustado!


Contrato con un vampiro. (Dekukatsu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora