ʟᴏᴠᴇ ʏᴏᴜ, ɴᴏ ᴍᴀᴛᴛᴇʀ ᴡʜᴀᴛ

veintisiete

Restregó sus manos contra su rostro y suspiró levantándose de la cama para ir a la cuna, donde la pequeña Chaeryeong demandaba ser cargada en un lastimero lloriqueo. Gruesas lágrimas caían por sus mejillas, las cuales su padre no dudó en secar con sus pulgares y besó su frente con cariño, susurrándole cosas lindas para calmarla.

No tenía nada en el pañal, así que asumió que se trataba de querer formula. Emprendió un viaje tranquilo a la cocina cuando la bebé se calmó y preparó su biberon como ya era costumbre, ella tenía la cabeza en su hombro mientras mordía el cuello de la camisa de su padre.

Este estaba tan cansado que ni siquiera se había percatado de que el cuello de su camisa era víctima de las encías de la pequeña Bang-Park Chaeryeong. Cuando la formula ya estaba hecha, acomodó a la niña en su brazo y ofreció el biberón, pero la niña se negó. Intentó persuadirla para que succionara el chupete, pero no funcionó, sintió sus ojos picar por la frustración, sin embargo, no la forzó a beber su alimento y dejó el biberón a un lado para luego meterlo en la nevera.

ㅡ Chaer... ya es la quinta vez en la madrugada... no sé qué hacer... por favor... házmelo fácil... aunque... aunque sea un poco...

La niña lo miró en silencio y picó su mejilla con el dedo índice, como si tratara de verse más tierna de lo que ya era, pero Chan no pudo halagarla, su cabeza sólo pensaba en lo agotado que estaba y en lo mucho que quería dormir.

Era un mal padre.

Uno terrible.

¿Por qué se preocupaba por él, cuando tenía a una bebé en sus brazos que no le decía qué era lo que quería?

No sabe hablar, idiota, pensó molesto.

Negó saliendo de la cocina y volviendo a su cuarto, al tratar de dejar a Chaer en la cuna, esta se aferró a su camisa y soltó algo similar a un gruñido. Se rindió y se sentó con ella en la cama, mirándola con los ojos cristalizados, sin embargo, le sonrió para que ella no se diera cuenta de su pena.

ㅡ Bebita... vamos... ¡Hay que dormir! ㅡsusurró/gritó meciéndola en sus brazos, lastimosamente, la niña no soltaba su camisa y se estaba exasperando.ㅡ Chaeryeong... ㅡella rió suavemente sin comprender la desesperación de papi.ㅡ Por favor... ㅡsu voz se resquebrajó, aquello asustó a la menor, quien lentamente comenzó a llorar.ㅡ Oh... no... ㅡsusurró agobiado.ㅡ Fuck.

Trató de tranquilizarla: besó sus mejillas, le tarareó, volvió a mecerla, trató de hacerle caras graciosas para que riera, imitó voces a medida que tomaba sus peluches y se los enseñaba y trató de cambiar la posición en la que la sostenía hasta que terminó dejándola en la cuna porque ya no sabía qué hacer.

Se estaba desesperando y el llanto de su hija aumentaba con el pasar de los segundos.

Unos pasos ligeros se escucharon por el pasillo y por su puerta se asomó Min-Jae, quien le sonrió tristemente y se acercó a la niña, por más decepcionante que pudo haber sido para Bang, ella se calmó apenas estuvo en los brazos de la adulta. Pegó unos pasos para atrás para recargarse en la pared y se deslizó por esta hasta acabar en el suelo, sus manos temblaban al igual que su labio inferior y sus ojos no dejaban de lagrimear.

Min-Jae no le dijo nada, sólo palmeó la espalda de la bebé en silencio hasta que pudo dormirse en sus brazos.

¿Por qué se veía tan fácil? ¿Por qué para él era tan complicado? Ni siquiera requería de ciencia.

Desvió la mirada de su hija hasta sus pies, no se sintió capaz de mirarla y supo que algo horrible le estaba pasando. Flectó las piernas y las apoyó en su torso, su respiración se estaba sintiendo tan pesada que era como si el elefante se hubiese sentado de nuevo en su pecho.

ㅡ Chan, cariño ㅡllamó Min cuando dejó nuevamente a la bebé en su cunita. Se agachó a su altura y trató de agarrarle las manos, pero Chan las alejó por instinto. No quería que le tocaran.ㅡ Mírame, por favor ㅡno hubo respuesta.ㅡ Mírame.

ㅡ No puedo cuidarla ㅡsusurró apenas alzó la mirada.ㅡ Creí que podría... pero... yo... no puedo ㅡy de la nada comenzó a reír. Estaba al borde de la locura, o eso juraba él.ㅡ Ni siquiera puedo calmarla ㅡcarcajeó dolido, sus pies golpeteaban el suelo.ㅡ Ni hacer que coma...

ㅡ Has estado haciendo esto solo, no te exijas tant-

ㅡ No he hecho nada ㅡle interrumpió.ㅡ Es con Minho con quien come, eres tú quien puede calmar su llanto y sólo deja que Hyeon Hyung la bañe o cambie su pañal... ¿Qué es lo que está mal conmigo?... Apenas... apenas me deja cargarla... shit, I'm loosing it ㅡtapó su rostro con sus manos.ㅡ ¿Qué estoy haciendo mal?.

Tenía miedo de que esto le hiciese recaer-.

¡¿Realmente eso es importante?! Sólo no sabes cuidar de ella. Apenas puedes contigo mismo. ¿Por qué quisiste hacerte cargo?.

De la nada, la idea de tener una hija dejó de ser tan emocionante como lo era antes.

ㅡ Por favor, no seas tan duro contigo mismo ㅡrogó tratando de abrazarle. Fue rechazada nuevamente.ㅡ Te estás acostumbrando, esto nunca es fácil.

ㅡ Ustedes hacen verlo como si lo fuera... cuando... cuando yo lo intento no puedo... no puedo...

ㅡ Cariño...

ㅡ Quiero estar solo... ㅡpidió alejando a la adulta de su cuerpo.

ㅡ ... ¿Quieres que me la lleve?

Y con todo el dolor en su corazón, asintió con la cabeza, sintiendo que se estaba convirtiendo en su padre cuando en realidad no estaba ni cerca de hacerlo. Min-Jae, con el corazón partido, asintió y cargó nuevamente a Chaeryeong, con cuidado de no despertarla, para marcharse de la habitación luego de darle una última mirada al padre de la niña en sus brazos.

Porque ese no era un padre, era un joven que no podía seguir en pie, era un niño cuidando de otro.

Cuando estuvo completamente solo, se levantó como pudo, cerró su puerta en silencio y agarró una almohada, la cual no dudó en pegarla a su rostro y pegó un gritó en ella. Dejó la cara ahí durante una hora, lidiando con el dolor en su pecho.

¿Por qué no podía cuidar de alguien que era su sangre? ¿Es acaso algo de familia el hecho de que los hijos repudiaran a sus padres? Él no quería que su hija le odiase, no quería sufrir eso luego de luchar para no terminar como sus progenitores.

Es como si Dios le estuviese castigando por sus horribles pecados.

Unos golpecitos se oyeron en la puerta, sabía que se trataba de Minho, fue un toque que ambos tenían para entrar al cuarto del otro, no le respondió ㅡaunque no pudo, en realidad, su voz se fue a la mierdaㅡ. De todos modos el castaño entró a la habitación y se paró en medio de las piernas del mayor, sostuvo su rostro con sus manos y secó sus lágrimas con las mangas de su pijama.

ㅡ Channie ㅡllamó por lo bajo sin dejar de acariciar sus mejillas.ㅡ Puedes llorar.

El aludido negó tratando de alejarse del cálido tacto de su novio, pero este no se lo permitió, hizo que Bang apoyara su cabeza en su pecho y acarició sus hebras teñidas.

ㅡ Ya no puedo seguir haciendo esto... ya no quiero... ya no quiero... ㅡsusurró apretando sus ojos para que las lágrimas no cayesen, su voz sonaba demasiado rasposa.ㅡ Estoy cansado... quiero dormir... dormir y no volver a despertar... ya no... le estoy fallando a Jamie... ya le fallé...

Lee no dijo nada, sólo dejó que el mayor lamentase todo lo que debía lamentar.

Sin embargo, no pudo evitar sentirse preocupado por sus comentarios tan oscuros y rotos que querían apoderarse de la mente y corazón de su pareja.

subo capítulo x el comeback, quiero tanto a estos weones, ojalá fueran eternos los kids <3