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El pelinegro de mechas verdes soltó un bufido largo escuchando la música resonar por todo el patio de aquella casa.

Era una casa lujosa por lo que tenia una gran extensión de bosque a su alrededor.

Sentía mucha molestia de estar ahí junto con esas personas que apenas conocía sus nombre y sus rostros.

—Pedazo de amargado—escucho a lo lejos como se dirigían hacia el.

—Que quieres—respondió perdiendo un cigarro a la vez que tomaba de su vaso.

—Que sonrías un poco—rio un chico rubio acercándose al mayor.

Xiao sin prestarle mucha atención dio una calada larga a su cigarrillo antes de soltarle el humo en la cara.

—Mejor me largo—comento antes de arrojar a un lado el licor que llevaba en sus manos.

El pelinegro sentía que su vida no tenia sentido.

Casi siempre durante los fines de semana, su vida se basaba en estar de fiesta en fiesta y acostarse con uno que otro hombre para que le dejen dormir en sus asquerosas casas.

Se sentía tan sucio y miserable.

Soltó otra calada caminando en dirección hacia el gran bosque.

La noche llego muy rápido desde que llego hasta la casa que sepa Dios de quien sea, solo fue por insistencia de uno de sus compañeros de clases que apenas recordaba su apellido.

No tenia donde ir.

A decir verdad, si tenia un departamento en donde vivir. Pero aveces se sentía mas solo estando ahí.

Sus padres lo habían abandonado cuando era mas joven.

¿La razón?

Su homosexualidad.

El día que le encontraron besando a su pareja de ese entonces, lo votaron de su casa dejándolo a su suerte. Y desde ese entonces la vida de Xiao se convirtió en una miseria.

La cosa era simple, vendía drogas para sobrevivir.

El mundo era un lugar muy miserable y Xiao sabia eso. Por lo que decidió sacarle povecho.

El pelinegro sabia que los adolescentes necesitaban alguna forma de salir de las vidas miserables que tenían y la mejor forma de hacerlo era por medio de sustancias ilícitas.

Aunque claro, sabia muy bien que si en algún momento llega a ser descubierto estaría muerto, pero de tomas formas, esto ya le daba igual.

¿Por que?

Porque tenia un plan.

Sabia que su existencia, no era mas que una mancha mas en el mundo. Por lo que decidió acabar con ella.

Pero antes tenia que hacer un par de asuntos pendientes.

Si el moría, se llevaría con el muchas personas al infierno.

Soltó una pequeña risa sintiendo su pecho doler, pensando meticulosamente su plan mientras caminaba por los arboles a la vez que acariciaba a una que otras flores.

Y el método que pensaba utilizar, se encontraba en ese bosque.

En pocas palabras, se iba a suicidar en ese bosque.

Soltó otra calada a su cigarrillo hasta cuando se dio cuenta que había llegado a la pradera a las afuera de Liyue.

—Maldito lugar—musito mientras se acostaba en el hueco de un árbol.

Angel ||  Xiaoven Fanfic || Terminada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora