Yo los declaró...

XIII

Kai abrazo a Gyu y se retiró a su aula, Beomgyu le agradeció por la comida a Taehyun y también se dirigió a su salón, tendría la siguiente hora libre pero quería preparar algunas cosas para su último grupo, al igual que aprovecharía para hablar con Yeonjun.

Mientras ordenaba su salón y anotaba algunas cosas en el pizarrón, alguien llamó a la puerta, se acercó y era Tae, eso se le hizo curioso, sabía que tenía que atender a un grupo en ese momento así que no entendía porqué estaba ahí.

— Gyu, ¿Estás ocupado?

— No, ¿Necesitas algo? — contestó Beomgyu.

Tae afirmó y tomó de la mano a Beomgyu, ambos se dirigieron al aula de Taehyun y al principio Beomgyu no comprendía nada, antes de entrar Taehyun le dijo que se cubriera los ojos.

— Que no se te ocurra mirar, ¿Entendiste?

Gyu asintió mientras se reía nervioso, ¿Qué era lo que tenía planeado Taehyun?, Cada segundo que pasaba le hacía estar más nervioso.

— Cuando yo te diga vas a abrir tus ojos, ¿Está bien?

— De acuerdo...

Se escuchaban murmullos y un poco de ruido en el salón, incluso llegó a distinguir la voz de Huening Kai, eso se le hizo aún más curioso, Taehyun dirigió a Beomgyu dentro del salón y pronto le dijo que ya podía abrir los ojos, una vez se descubrió el rostro quedó atónito por la sorpresa.

— ¡Feliz cumpleaños, profesor Beomgyu! — entonaron los presentes.

Beomgyu se empezó a reír y un sonrojo de pena salió en sus mejillas, Taehyun notó eso y soltó un par de risas también, le dió un abrazo a Gyu y todos en el aula sintieron ternura por ello.

— Beomgyu, sabemos que era tu cumpleaños y decidimos prepararte una sorpresa, — decía Kai mientras se acercaba. — Taehyun y yo, todos aquí pusimos de nuestro esfuerzo.

— Así es, — dijo Tae separando su cuerpo del de Beomgyu. — además que queríamos darte algo...

Uno de los alumnos se acercó con un paquete para Beomgyu, pero todos los demás le dijeron que no lo abriera hasta llegar a casa.
Eso le generaba más intriga a Beom, les volvió a agradecer a todos, y con una enorme sonrisa se despidió de ellos, al regresar a su aula dejó el paquete en el escritorio y antes pudieea hacer algo diferente se sentó y respiró profundamente.

— Este día no puede ser mejor...

Pensó en voz alta, fue entonces que una llamada entró a su celular, era su esposo, llamaba para felicitarlo e invitarlo a una cena romántica en la noche, Gyu aceptó entusiasmado, saldría directo del trabajo a arreglarse e irse a la cena, pero Yeonjun le dijo que así como iba estaba perfecto, específicamente le dijo "Tú siempre te ves hermoso querido, nunca lo olvides.", Gyu se puso aún más feliz al escucharlo.

Hablaron de otras cosas y se despidieron rápido, Yeonjun tenía que regresar al trabajo.

Beomgyu por su parte espero a que llegara su siguiente y última clase, cuando fue así todos llegaron muy ansiosos, querían saber cuál era la sorpresa que le habían preparado.

Gyu les contó rápido y todos hicieron la misma expresión que el grupo anterior, la clase comenzó y la dinámica fue similar a la de la primera clase, en esta ocasión con los filósofos Karl Marx, Pitágoras y Tales de Mileto.

La actividad resultó muy bien, les entregó sus premios y trabajaron con otras cosas, todos sus alumnos le ponían atención a lo que decía, parecía que todos amaban su clase, y es que en sí era una de las clases sencillas, o al menos para la mayoría, había ocasiones donde tenía que darles clases particulares a alguno que otro alumno, pero él siempre estaba dispuesto a darlas.