Fuego [Omegaverse][Finalizado][Corregido]

- Inteligente -

Haruta sospechaba que Ace era inteligente, pero no esperaba este nivel. ¡El chico era un jodido genio! Los había burlado a todos. Haruta vio desde el nido de cuervo cómo Ace entró en la enfermería y robó algunos suministros.

Era un jodido genio. Tenía que decírselo ahora mismo a Marco. Si Ace usaba mal esos insumos y sabía que él había estado de turno en el nido de cuervo, le iban a dar el regaño de su vida. Bajó rápidamente hacia Marco.

¡Marco, Ace tiene algunos insumos médicos que sacó de la enfermería! - Haruta vio cómo Marco asentía y dejaba su papeleo de lado un momento para encaminarse hacia la habitación donde estaba Ace. Solo esperaba que el chico no estuviera armando un desastre.

¿Ace, yoi? - Marco entró tranquilamente a la habitación del chico. No quería asustarlo porque si estaba haciendo algo, podía sufrir algún accidente.

Ace se dio la vuelta, y Marco pudo ver que el chico estaba cosiendo una herida que se había hecho justo hoy por la mañana.

Mierda, Ace, déjame ver eso, yoi - Marco corrió para revisar bien la herida. ¡Los malditos puntos eran jodidamente perfectos! ¿Cómo los había hecho tan bien?

¡Está bien! - Ace quitó su brazo y cortó el hilo. Después de todo, ya había terminado y comenzó a vendar la herida.

¿Dónde aprendiste a hacer eso, yoi? - Marco, como el médico que era, estaba realmente curioso.

Experiencia - Ace terminó, ahora estaba mucho mejor. En realidad, se sentía realmente mucho mejor al ser capaz de demostrarse que aún podía cuidarse a sí mismo.

¿Cómo te sientes, yoi? - Marco se paró y caminó cerca de Ace cuando el chico se salió del cuarto y se dirigió a la cubierta solo para mantenerse lejos de él. Este Omega sí que era testarudo.

Estoy bien, déjame en paz... - Ace miró el cielo. Podía ver algo extraño. Se acercó más a la barandilla, bajo la vista de los demás. Ace nunca salía si no era para pelear. Alzó su mano, midiendo el cielo con ella. Cuando su cara cambió a algo como "estoy muerto".

Todos sabían que eso era un problema, porque Ace era un navegante. Si había algo de lo que un navegante se asustaba, era malo para ellos.

¿Qué sucede, yoi? - Ace no sabía si decirlo. Por una parte, estos malnacidos lo atacaron, y por otra parte, él estaba en el barco y no podía nadar. Pero esto era algo que se podía arreglar haciendo maniobras básicas.

No... nada - Una risa malvada apareció en la cara de Ace, dulce, dulce venganza.

¡Ace, no bromees con eso! - Chillaron todos los comandantes, pero Ace ya no estaba, y Barba Blanca se sobaba los párpados. Este mocoso era complicado. Era como si lo retara cada día de su vida.

Yo me encargo, hermanos - Thatch entró al Moby directo al cuarto de Ace. Sabía que estaba ahí porque no ocultó su Haki a propósito. Cuando entró, vio a Ace con una sonrisa diabólica.

¿Viste sus caras? Estaban tan asustados - Ace no pudo evitar reír frente a Thatch.

¡Ace no bromea con eso! - Thatch pensaba que Ace solo estaba bromeando.

¡Yo no bromeo así! - Ace miró seriamente a Thatch, que tragó duro. ¿Esto no era una mentira?

¡Entonces, qué diablos, Ace! - Thatch estaba asustado. Eso hizo que Ace se sintiera un poco mal. El olor de Omega asustado de Thatch lo hace sentir como si estuviera asustando de muerte a Luffy.

¡Está bien! Solo necesitan que sus navegantes vayan y tracen un mapa rápido hasta la siguiente corriente. No es tan complicado - Ace se dio la vuelta molesto. Solo tenía que esquivar una tormenta de nieve marina. Eso no es nada complicado. Pero el silencio de Thatch lo hizo darse la vuelta para ver al cocinero casi muriendo en vida.

¡Nosotros no tenemos navegantes! Flotamos solo con la ayuda de la división de Namur, pero aún así demoramos horas en dar una vuelta - Ace lo pensó un poco.

No me molesta ayudarte, solo si.... - Thatch lo miró - Haces que dejen de perseguirme por todo el barco - Thatch lo pensó un poco y asintió.

Puedo darte 3 días - Ace lo tomó. Eso era un trato.

Salió de su habitación con Thatch detrás de él. El Omega de fuego pasó rápido a donde estaba la sala de navegación. Cuando abrió la puerta, miró a los comandantes fuera de la sala con cara de "qué asco".

¡Ahora no, Ace! Luego me dices lo sucio que está. Ahora el mapa, por el amor de Oda - Thatch cerró la puerta detrás de ellos.

¿Y Ace, yoi? - Marco no podía evitar estar un poco preocupado.

Está bien, hijo. Thatch sabe lo que hace - Shirohige calmó a sus hijos. Ya veían la tormenta sin necesidad de Ace.

Thatch no tenía ni puta idea de lo que Ace estaba haciendo, pero ya veía los trazos y cómo el barco se estaba comenzando a mover, cambiando el rumbo. Lo que Ace estaba haciendo, ellos demoraban 3 horas. Habían mantenido el Moby a base de esfuerzo y buena suerte de no caer en ninguna ruta loca.

Ace terminó de hacer un último cálculo, tomó una herramienta, sacó medio torso por una ventana midiendo algo en el cielo y regresó para terminar de apretar la última palanca. Ya todo estaba bien.

Fuera de peli... - Ace iba a terminar cuando vieron por una ventana a otro barco siendo devorado por la tormenta. - gro... Sep.

¡Por el amor de todos los mares, por eso eres nuestro navegante! - Thatch abrazó a su hermano.

No soy nada tuyo - Antes de que los comandantes entraran por la puerta, Ace escapó de los brazos de Thatch y se metió en un conducto de ventilación.

¿Y Ace, yoi? - Marco miró a su hermano en el piso.

En un tubo... - Todos en la sala suspiraron, por lo menos estaba a salvo.