Alonso's Castle (ALONSO VILLALPANDO Y TU)

Estoy harta de ti

Narra America:

Hoy decidí no ir a la escuela, ya que no tengo muchas ganas de verle la cara al odioso, ¡joder como lo odio! De solo recordar que vendrá aquí, mejor no salgo.

Pero invite a Lupita a venir aquí, desgraciadamente tengo que comer y me obliga a bajar.

Iba bajando para esperar a Lupita, hasta que Alan me gritó desde su habitación que abriera.

-¡America abre por favor!

-¡Ya voy! -Me paré unos segundos en las escaleras y continue bajando para abrir.

-¡Lu... -Me quede a medias.

-No, no soy Lupita, soy Alonso.

Me hice aun lado para que pasara.

-Alan ya viene, esta terminando de arreglarse.

-¿A donde vas? -Me miro de arriba abajo.

-Eso no te importa, vienes con Alan, no conmigo, a mí dejame en paz.

-También vengo contigo, ¿Quién dijo que no?.

-¡Deja de acortejarme! No somos nada. Estoy harta de ti, lamentablemente no puedo correrte.

-Claro que puedes, pero no lo haces porque te gusto y no puedes estar sin mí.

-Lo que digas... -rode los ojos- Ahora quitate, estoy esperando a mi amiga.

-Quitame... -Sonrió-

Lo quité como pude y por fin pude ver a Lupita, y note que casi se le salen los ojos, la tome de la mano y subimos corriendo a mi habitación y Alan me detuvo.

-Ame, ya no suban, vamos a la mesa, después de comer pueden volver a subir.

-De acuerdo -Me giré y baje de nuevo.

Alonso me veía con una expresión divertida, joder, no sé que tiene de divertido, pasamos a la mesa y nos sentamos todos en este orden: De izquierda Alan, Lupita, Alonso y yo. Iba a decirle a Alan que cambiara de lugar conmigo, pero Lupita me agarro la mano, en señal de que no me fuera.

-¿Ame, me acompañas al baño, por favor?

-Claro, vamos, compermiso, ya vuelvo -Me levante.

El chico me veía desde que me levante hasta que me metí al baño, es muy incomodo, porque no deja de verme.

-Lupita, ¿Estás bien?, estas muy rara.

-No, no tengo nada, solo no hay mucho que decir, pero estoy.

-¿Te quedarás? -Suplique-

-Sí, si me qudare.

La cena paso algo rara e incómoda para Lupita y para mí. Ya nos habíamos preparado para acostarnos y baje por algo de beber, me dirigí a la cocina y note una sombra

-Booh! -Alonso rió-

-¡Joder! Me asustaste-Solté el vaso y este se quebro-

-Pero no puedo asustarte, soy hermoso.

-¿Que haces aquí? Deberías irte.

-Alan me invito a quedarme y acepte, así que aquí estoy. -Me acorraló pegandome a la pared.

Yo me puse algo tensa y el chico se rió y me dejó libre.

-Anda, sube que tu amiga te espera.

Subí rumbo a la habitación y me acosté sin decir nada, y me dispuse a dormir.