Capitulo 4

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Algo está mal.

No puede poner un dedo en lo que es, pero está segura.

Algo está mal.

Mira el periódico que su compañera de cuarto entregó esta mañana y frunce el ceño.

—Lo sé, Thing—murmura. —Yo también puedo sentirlo

La mano sobre su escritorio golpea con insistencia y Wednesday tararea.

—Sí. Lo sé.—Ella gira en su silla y mira hacia el otro lado de la habitación. Los colores todavía le pican en los ojos, pero no puede evitar mirarlos. —Algo esta mal

Wednesday ha estado en Nevermore durante casi un mes y en su tiempo aquí ha aprendido bastantes cosas sobre su compañera de cuarto.

Al principio, cuando Weems la llevó a su habitación, Wednesday estaba segura de que la burbujeante adolescente con la que iba a vivir sería una pesadilla. Los colores, la jovialidad, la música del infierno... Todo estaba allí cuando llegó y Wednesday se había ofendido de que pensaran que podría convivir con semejante fastidio.

Pero, poco después de ser presentados, después de que fueron enviados a buscar su uniforme, mientras Enid le estaba dando la gran gira, se demostró que Wednesday estaba equivocada

Enid era burbujeante, sí, pero también apagada. En el momento en que Wednesday no mostró interés en saber quiénes son las grandes camarillas, Enid bajó su entusiasmo y mantuvo el ritmo constante hasta que los dirigió a la oficina de vestuario. Entonces le sonrió a Wednesday y la dejó sola.

En el camino, vieron un puñado de personas y Enid suavemente le informó quién era quién, pero no agregó nada más que nombres y qué tipo de paria eran. Un chico que supo que era un gorgona había intentado hablar con ella, aparentemente para contarle algo sobre Wednesday, pero Enid no le había ahorrado más que una sonrisa y un movimiento de cabeza.

Enid tampoco hablaba maravillas de la escuela, ni intentaba hacer esa espantosa charla que Wednesday odia. Tampoco hizo sus preguntas, de por qué llegaba a Nevermore tan tarde en el trimestre o qué tipo de paria era. Simplemente le informó a Wednesday de personas y lugares, dónde estaban algunas aulas, dónde estaba la cafetería y sus horarios...

Wednesday había disfrutado mucho del recorrido por la escuela, sin tener que escuchar nada molesto, pero estaba un poco molesta porque su compañera de cuarto leyera tan mal.

Todo lo que ha visto de Enid en esos pocos minutos en que fueron presentados apuntaba a una chica demasiado emocionada, demasiado entusiasta.

Y Enid... Enid no había sido así.

En ese momento, a Wednesday no le había importado. ¿Por qué lo haría si se iba de la escuela a la primera oportunidad? Pero, ahora que ha pasado el tiempo, ahora que ha llegado a saber quién es quién y cómo actúan, le molesta que todavía pueda entender quién es Enid.

Bianca fue fácil de entender. Ella es la autoproclamada Abeja Reina y el resto de la escuela simplemente le permite serlo. Tiene derecho y es egocéntrica, y también es orgullosa hasta el extremo.

Xavier también es egocéntrico. Está demasiado metido en su propio dolor y espera que el resto de ellos le permitan meditar y mostrar su dolor en todo momento. Quiere que la gente lo mire y lo mime y lo deje salirse con la suya siendo un "artista atormentado".

Yoko es quien Wednesday asume que es la líder de los vampiros, si es que a los vampiros les importaba tal cosa. Es atrevida e indiferente, pero llama la atención y el resto de los vampiros la respetan en la mayoría de los asuntos dentro de su pequeño aquelarre. Si Wednesday estaría interesada en tener algo tan aburrido como un amigo, piensa que tal vez Yoko podría ser la candidata menos horrible.

Hyde The PainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora