—Enid, un momento por favor.
Enid cierra los ojos y respira hondo antes de volverse hacia Wednesday.
—Adelante—, dice con una pequeña sonrisa. Le pasa su mochila a su amiga. —Los veré a ti y a Eugene en un momento.
Wednesday frunce el ceño y murmura
—Eugene y tú— en voz baja mientras toma las cosas de Enid.
Enid resopla pero su sonrisa se ensancha un poco ante la calidez que escucha en la voz de Wends y ve en el fondo de sus ojos.
—Sí, vosotros. Te alcanzare.
Wednesday parpadea lentamente y Thing asoma desde el interior de la bolsa de Enid.
—Te alcanzare,— repite Enid antes de que Wednesday pueda ordenar a la mano que se quede atrás. —Prometo que estaré bien—murmura.
—Wednesday,— Marilyn llama desde el frente de la clase. —Su presencia no es requerida.
Los labios de Wednesday se contraen, sus ojos nunca abandonan a Enid.
—Wends,— murmura Enid. —Lo prometo.
Un segundo pasa.
Wednesday asiente.
—Esperaré afuera—, declara lo suficientemente fuerte como para que Marilyn la escuche.
Enid se estremece internamente y observa impotente cómo Wednesday sale del aula.
Una pequeña parte de ella está contenta de que su amiga no dé una gran pelea, pero la parte más grande está tan feliz de que Wednesday no esté muy lejos.
Ella sabe que no es una buena idea tener a Marilyn cerca de Wends, pero después de días de estar unida a la cadera, no puede fingir estar separada de ella por más tiempo del estrictamente necesario.
Enid se gira y salta hacia Marilyn haciendo todo lo posible para ocultar cualquier cosa y todo lo que está pasando por su mente.
No es como si Enid pudiera admitir que ha estado evitando a Marilyn, después de todo.
—¿Sí, mami? — pregunta en voz baja, sabiendo que está en una situación delicada con la mujer mayor.
Enid podría o no haber ignorado sus mensajes de texto durante días.
Marilyn le sonríe cálidamente y Enid sabe que eligió el bien.
—Hola, muñeca. Te he estado buscando.
Enid sonríe y siente que su pecho se aprieta.
Hay una razón por la que ha estado evitando a Marilyn, después de todo.
—¿Oh?
Marilyn la mira fijamente y Enid sabe que lo puso demasiado grueso.
Ella hace una mueca.
Maldita sea.
Marilyn suspira y se quita las gafas.
Enid cambia en su lugar. Ver a Marilyn sin gafas es extraño y de repente la pone nerviosa.
Ver a Marilyn sin gafas debe reservarse para sus pijamadas o la hora del baño, no en medio del día en el invernadero y con Wednesday justo después de la puerta cerrada.
—Enid,— dice Marilyn y Enid se estremece. —¿Por qué no me has contestado? — pregunta sin preámbulo, pero afortunadamente Enid no puede escuchar ninguna ira detrás de las palabras.
—No he estado usando mucho mi teléfono,— murmura Enid. —Lo siento.
Las cejas de Marilyn se levantan.
ESTÁS LEYENDO
Hyde The Pain
FanfictionResumen: ¿Y si, en lugar de elegir a Tyler como su Hyde, Marilyn Thornhill elige a Enid? O, Una historia tenebrosa en la que Enid ansía amor y quien se lo da no es una buena persona. Notas: No sé si esto es para todo el mundo, porque toca temas como...