Deseos imparables

Capitulo 21

Buenos Tratos

Marc

Me toco la cara, ¿Qué hora es?, mierda me quede dormido. Ya era el día siguiente. Me levanto de la cama y tomo un vaso de agua.

Voy para el baño, me veo en el espejo «Necesito sol» estoy mas pálido que un vampiro.

Tomo mi celular, hay varios mensajes, pero entro rápido al chat de Ronald.

Ronald es el jefe de seguridad del hotel, y sobre todo un hombre de confianza, así que decidí otorgarle la misión de vigilar a Génesis, mientras estemos aquí.

Entro al chat. Miro sus mensajes, en todo el día de ayer salió de su cuarto, pero ahora está en una de las albercas.

Le doy la indicación que no permita que nadie mas pueda entrar ahí. «Al fin»

Me pongo un short negro y unos lentes de sol. Me miro al espejo «¿Quien puede resistirse a mi?» y contesto mi pregunta; definitivamente nadie.

Me siento como un puto adolescente que va follar por primera vez, bajó hasta el 5 piso donde se encuentra esa alberca, en mi trayecto no puedo evitar las miradas de mujeres.

Entro por fin a la alberca, la miro está sentanda mojando sus pies en la piscina. Trae un pequeño por no decir diminuto bikini rojo.

—Necesita algo mi General— me dice clavándome el azul celeste de sus ojos.

«Ser tuyo»

—No— me quedo parado observando la gran vista que tengo.

—¿Entonces a qué vienes?

Ya empezó a escupir odio— Es mi hotel puedo a ir a donde quiera.

—Arrogante— dice.

—Odiosa— contraatacó.

—Cállate y mejor ayúdame— señala su espalda— ¿puedes ponerme bloqueador?

—Nadamas porque soy un caballero — me pongo atrás de su espalda.

—Ajá— susurra creyendo que no la alcancé a oír.

Me siento en camastro, tomó bloqueador colocándoselo en la espalda. Desenredó la parte de atrás de su bikini— Así no quedaron marcas.

—Puedo hacer tooples, si eso quieres — dice entre risas.

«Me encantaría» de la sola idea siento que la polla se me está endureciendo. Los recuerdos de las pocas veces que disfrute de ellos no han sido suficiente.

Le quito la parte de arriba dejándola caer, teniendo su espalda desnuda delante de mi; Es hermosa pero quiero ver sus pechos, me muero por ver a chuparlos.

Se levanta, dejándome de espaldas ahora viendo su gran trasero. Me muero de ganas de tirarla al piso y penetrarla ahora mismo.

Voltea clavando la vista en mi— No es problema si me quito la parte de abajo ¿o si?— me dice riéndose.

«Maldita» — Tu sabes lo qué haces— le digo intentado de mostrar que no me afecta, pero a quien engaño; odio sentirme así, indignado y caliente.

—Entonces lo haré— se voltea bajando las bragas dejándome la vista el perfecto trasero.

«Hija de puta» Intentó lucir como si no me importara tenerla desnuda enfrente pero me supera; como la detesto, pero detesto mas que no esté a mis pies.

Esta de espalda recargada en el barandal de la piscina. La polla se me llena de sangre con la vista que tengo.

Soy un soldado «El mejor» tengo un gran autocontrol «En este momento no» puedo con esto y mil mujeres desnudas «para que me miento»