CAPÍTULO 9: Onda

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Me siento donde me dice el estilista.

-Es la primera vez que la veo tan nerviosa antes de una actuación.

Parecía estar preocupado por mí.

-¿Quiere que llame a alguna de sus compañeras para que le haga compañía?

-Sí, por favor. Me gustaría que viniese Onda.

En agosto de 2019 me encontraba en mi momento de máximo esplendor. Ya no lloraba por las noches y prácticamente ni pensaba en mi ex pareja. Lo había superado. Lamentablemente, sí que me quedó un sentimiento de rechazo cada vez que oía su nombre o veía su cara sin quererlo, en algún rincón de internet. Nunca me había amado tanto y eso se notaba en nuestro comeback. Durante la grabación de nuestro segundo videoclip sentí que saldría mil veces mejor que en el anterior, donde aún estaba en aquella relación que resultó ser tan perjudicial para mí. Al grabar la canción en el estudio, cantaba con el alma, sin apenas esfuerzo y con grandes resultados, recibiendo halagos del equipo de producción. Los nuevos bailes me encantaron, me sentía realmente cómoda con ellos y los aprendí rápidamente. Todo salía sobre ruedas en el trabajo, lo que generó una gran esfera de positivismo que me rodeaba siendo inquebrantable. Gracias a todo ello, al fin logré avanzar con mi canción. En tan solo un par de noches más de trabajo ya la habría terminado. La primera persona en dejarle echar un vistazo fue Onda, quien siempre lograba mantenerme en calma gracias al aura tan bonita que tenía.

-Aisha... no tenía ni idea de que fueras capaz de escribir tan bien. Esto es asombroso. ¡Tienes que mostrárselo a nuestro productor ya!

Sus palabras parecían exageradas, pero el brillo en sus ojos me decía que su emoción era sincera.

-Gracias unnie, pero cuando la presente quiero estar segura de que es la canción perfecta. Aun tengo que darle algunas vueltas y hacerle algunos arreglos a la letra. También tengo que componer la melodía. Solo tengo una pequeña base, no sé ni qué instrumentos usar, si es que los uso.

Estábamos en la agencia. Habíamos madrugado para tener tiempo de ir al estudio y que leyese con tranquilidad lo que había compuesto. Ya iba siendo hora de ir a la sala de ensayo.

-Tú decides. ¿Vamos?

El sonido de mi tono de llamada hizo que la que iba ser mi respuesta cambiara.

-Ves yendo, yo ahora voy.

Era un número que no tenía agregado a mi lista de contactos. Lo atendí nada más Onda salió por la puerta.

-¿Sí?

-Hola, Aisha. ¿Cómo estás? Soy Ten. ¿Te acuerdas de mí?

Me quedé de pierda.

-S-sí. Claro que me acuerdo -me aclaré la garganta y actué con la mayor naturalidad que pude -Estoy bien, un poco ocupada con nuestro nuevo comeback, pero feliz. ¿Y tú?

-Bien, gracias. Siento haberte llamado así de repente después de cinco meses.

-Descuida. Ni sabía que habían pasado tantos -bromeé.

-Bien. El caso es que el día trece mi compañero Jaemin cumple 19 años y le estamos organizando una gran fiesta. Nos preguntábamos si tú y las chicas os apetecería venir.

-¿Nosotras? ¿Y eso por qué?

-Porque Jaemin tiene una pequeña obsesión con vosotras desde que vio vuestro debut, aunque no quiera admitirlo. Sería una especie de sorpresa de cumpleaños.

El sueño de AishaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora