La Venganza (AyA)

Capítulo 23

Anahí se despertó con el sonido de su celular. Alguien la llamaba, pero no encontraba el aparato, la noche anterior se había quedado dormida sin querer y no tenía idea de dónde estaba. Con los ojos aún medio cerrados, intentó buscar el celular con las manos hasta que lo encontró.

-¿Bueno?

-No puedo creer que estuvieras dormida, enana. Son las 10 de la mañana.

-Sí, Ucker, pero es sábado - contestó mientras bostezaba.

-Mjm, supongo que anoche te dormiste muy tarde. Tú casi nunca duermes hasta estas horas - Anahí no quería acordarse de que anoche se había quedado despierta viendo las nuevas fotos que había recibido de Alfonso, obviamente no pensaba ni siquiera mencionarle eso a su hermano.

-Más o menos. Me quedé distraída... Eh... Leyendo.

-¿Leyendo?

-Sí, sí, leyendo. Ya sabes que me gusta mucho.

-Sí, claro, ha sido tu pasatiempo favorito desde hace, aproximadamente, dos segundos.

-¡Ja, ja, ja! Hermanito, muy gracioso.

-No te hagas que bien que me extrañas - Anahí no pudo evitar sonreír.

-Claro que te extraño, bebé. A ti, a papá, a Mai... A todos, me hacen muchísima falta.

-Pues por eso te llamo, ya sabes que en unas semanas es mi cumpleaños y pues quería planear una fiesta para celebrar y obvio tú tienes que estar. Ya te lo había mencionado has unos días, pero sigues sin confirmar.

-Bueno, es que no pensé que fuera difinitivo, solo dijiste que te gustaría hacer una fiesta, no pensé que hablaras en serio, digo, casi no te gustan las fiestas.

-Sí, lo sé, pero creo que es una buena oportunidad para que vengas y pases un tiempo con nosotros, te extrañamos mucho Any. Y también, pensé que sería bueno poder presentar públicamente a Dul como mi novia.

-¡Ayyyyyy! Eso suena a que les está yendo muy bien.

-Pues sí, enana. ¿Qué te digo? Dul es otra cosa, de verdad que me alegra haberla esuchado y que hayamos podido reconciliarnos - Anahí no pudo evitar sentir una punzada en el corazón, estaba feliz por su hermano, pero envidiaba un poco lo fácil que había sido para él y Dulce arreglar las cosas y retomar su relación, en cambio ella y... «¡No empieces, Anahí!».

-Me alegra mucho por ustedes, Ucker, de verdad. Se merecen ser felices y ya sabes que Dul me parece una chava increíble.

-Gracias, Any. De hecho ella también tiene muchas ganas de verte, por eso de verdad quiero que ya me confirmes que me vas a venir ¿sí? Es el único regalo que quiero y sería un excelente regalo para papá también.

-Lo sé, a mí me encantaría ir...

-¿Pero?

-Pues tengo que ver cómo está el trabajo en la empresa, sería ir al menos una semana y pues todo tiene que quedar organizado.

-Esas son solo excusas. ¿Por qué no quieres venir? - Anahí guardó silencio, no quería preguntar lo obvio, claramente él también iba a estar en esa fiesta, después de todo era el hermano de Dulce, el cuñado de Christopher, era lo lógico, pero lo que el simple hecho de volverlo a ver la hacía sentir, le cortaba la respiración - ¿Enana?

-¿Quiénes...? ¿A cuánta gente piensas invitar, Ucker? - esta vez fue Christopher el que guardó silencio.

-No te voy a mentir, él va a estar - y esa confirmación se sintió como un balde de agua fría. Por supuesto que él iba a estar, no podía ser de otra manera, si algún día Christopher y Dulce se casaban, iban a ser familia - Pero... Any tu eres más importante que nada, si tu no quieres que él esté, yo puedo hablar con Dul y con él. Enana...