Para merecerte

Capítulo 13

Habla, sé valiente

-Midoriya shonen, ¿cómo te sientes hoy?

-Me siento mejor, lo suficiente como para volver a la escuela.

-Mi muchacho, sabes que debes descansar bien, lo que pasaste no fue cualquier cosa. Nadie te culpará por quedarte en cama unos cuantos días más, por mí deberías tomarte toda la semana. 

-Sabes que no puedo, mientras estoy aquí los demás avanzan y no quiero quedarme atrás.

Y aunque era cierto no era el principal motivo por el que quería salir pronto de allí, sabía que toda esa angustia era producto de seguir pensando en Kaccha. Izuku no pudo evitar sentirse un poco estúpido al seguir preocupandose por él luego de todo lo que había pasado entre ellos, pero también sabía que era algo que no podía controlar. Aún si las cosas que le había dicho Kacchan lo herían, sabía que luchar contra sus sentimientos era una batalla perdida, para él siempre sería su preciado amigo de la infancia. No importa cuantas cosas odiara de él, no podía simplemente ignorarlo, llevaba mucho tiempo anhelando que reconstruyeran su amistad.

Quería ser el número uno, quería ser un héroe tan fuerte que nadie nunca más tuviera que preocuparse por él, quería salvar a todos, pero también quería superar a Kacchan eso no había cambiado. Aunque tras su última pelea Izuku se había cuestionado porqué lo anhelaba con tanta fuerza, porqué a pesar de todas las cosas terribles que Kacchan le había hecho él quería seguir siendo su amigo, o porqué no lo odiaba incluso si lo intentó. Lo admira, es cierto, y sin duda cree que Kacchan es genial, ¿pero eso es suficiente para aguantar años de abuso? Al principio se decía que a pesar de todos sus defectos en el fondo era un buen chico y estaba seguro de que sería un gran héroe, ¿pero qué tenía que ver eso con él? Nunca había sido amable y a la mínima lo trataba como basura, aunque un tiempo quizo ignorar todo eso y estar a su lado del modo que fuera se dio cuenta de que eso ya no le era suficiente, anhelaba más y no sabía porqué. Quería que Katsuki lo reconociera, y en el fondo sabía que su deseo intenso de superarlo era porque creía que de esa manera lo notaría, guardaba la esperanza de que si le demostraba que ya no era un tonto nerd débil sin peculiaridad entonces podría volver a estar a su lado. Se sentía frustrado y patético, ya habían pasado muchos años desde que su amistad se rompió y no veía muy probable que pudieran reconstruirla, no solo al menos. En poco tiempo terminarían la escuela y entonces ya no tendrían nada, no volverían a verse. Sintió una opresión en su pecho ante la idea y frunció el ceño, gesto que no pasó desapercibido por su mentor.  

-No te preocupes por eso.-Contestó All Might viendo su semblante.-Estoy seguro de que Aizawa te preparará algunas clases extra y en cuanto a tu entrenamiento, recuerda lo que hablamos hace un tiempo, sobreesforzarte puede hacerte más mal que bien, deja a tu cuerpo recuperarse adecuadamente y sé que volverás más fuerte que nunca. 

Izuku no quedó muy convencido con las palabras de All Might, pero no se atrevía a cuestionarlo, sabía que tenía razón pero quería salir de allí de todas formas, después de todo Kacchan no era el único motivo por el que quería ser el número uno, era cierto que debía esforzarse el doble que los demás si quería llegar a la cima. Todos sus compañeros ya eran lo suficientemente competentes cuando entraron a UA, y ahora eran más fuertes que antes. Él también había crecido mucho, y ya dominaba la mayoría de sus dones, pero no estaba al nivel de All Might, de ser así ni él ni Kacchan hubieran resultado heridos. 

-¿Como está Kacchan?-se atrevió a preguntar al fin. 

-El joven Bakugo fue dado de alta hace un par de días, sé que se reincorporó a las clases pero está excluido de las actividades físicas hasta que su herida cierre por completo.