Un final feliz [Bl]

Capítulo 17: Gran día

Hoy es sábado, nunca había odiado tanto un sábado como ahora, sintiéndome incluso agobiado por despertar con la insistente llamada de mi representante, quien me recordaba el trágico día que me esperaba, aunque él lo nombró como "El gran día"

La grabación comenzaría a las cuatro de la tarde, pero había ciertos preparativos a considerar, por lo mismo luego de alistarme me encaminé hasta el hotel donde el equipo de producción se encontraba finiquitando los últimos detalles que implicaban las cámaras.

Había una cámara frente a la cama, una justo en el techo y otra a la derecha de la cama, grabando un ángulo más centrado en el rostro, aunque igualmente como usamos antifaces, esto es algo que consideramos innecesario.

Cuando llegué al hotel, eran las tres de la tarde, la habitación estaba llena de gente acomodando todo, incluso nos tomaron una foto un tanto romántica con tal de ponerla en un marco en la mesita de noche cerca de la cama.

Sin duda, todo era innecesariamente tierno, algo que me mantenía un poco agobiado por las molestias que tendré que pasar, aunque me garantizaron que el pago se hará justo después de recibir las grabaciones.

El pelinegro llegó media hora antes de la grabación, vestía un traje que lo hacía ver como un chico de oficina, aunque al mismo tiempo parecía aquellos mafiosos de película...

Varias comentaron lo guapo que se veía con traje, algo que no desmentiré, pero me causa curiosidad saber en qué trabaja, ¿será un oficinista? Y si es así, ¿por qué se molesta en grabar esta clase de videos?

Como era de esperarse, una vez llegó se dio un baño con tal de cambiarse a un atuendo más normal, aunque el director mencionó que no descartaba la idea de hacer una escena de oficinistas, lo que me asegura que próximamente tendré que usar traje.

—Perfecto, todo ha quedado en orden, ¿tienen alguna duda? —nos preguntó el productor, luego de chequear que las cámaras estuvieran señalando los mejores ángulos.

—No— respondí, ya había leído el guion, por lo mismo, sabía qué debíamos hacer.

Obviamente esto es una actuación más espontánea, no tenemos diálogos específicos que debamos decir por obligación, aunque si hay cosas que debemos hacer.

—Chris, ¿leíste el guion? —le preguntó el productor.

—Puede— respondió, algo que les garantizaba a todos que no lo había hecho.

Obviamente le dijeron que lo hiciera, aún había tiempo, así que el hecho de no leerlo no implicaba un retraso para nadie, pero sin duda, llamó la atención de todos tras leer aquel comentario que alguien nos dejó "finjan amarse" leyó en voz alta.

—¿Qué? ¿Debo decir "mi amor" y esas cosas? —preguntó con diversión.

—Sí, no es mala idea— comentó el productor, mientras que yo fulminaba al pelinegro por darles ideas.

Cuando llegó el momento, todos se marcharon y quedamos a solas en un incómodo silencio que me obligaba a tomar aire profundamente antes de dejarlo salir, creyendo que con esto me volvería valiente.

Como la primera grabación debía ser en la puerta, movimos la cámara que estaba frente a la cama con tal de comenzar, aunque claramente ambos nos pusimos nuestros antifaces, algo que de cierta forma me daba la suficiente valentía como para ser el primero en ubicarse cerca de la puerta.

El pelinegro fue quien presionó el botón de grabar, por ello, después se acercó y salimos de la habitación queriendo simular que acabábamos de entrar.

En la puerta no debía haber malicia, sólo debíamos entrar con nuestras manos entrelazadas soltando ciertas risitas cómplices que se mezclan con nerviosismo, algo que suele ocurrir en ocasiones cuando lo haces por primera vez con la persona que te gusta.