Un final feliz [Bl]

Capítulo 38

Luego de esperar varias horas y recibir varios daños físicos, el líder de todo este grupo hizo aparición, queriendo ver el resultado del trabajo que sus hombres han hecho sobre mi cuerpo.

Debo reconocer que esperaba mucho más, aunque fue interesante recibir latigazos en la espalda hasta el punto de que produjera heridas que ahora mismo sangran. No me voy a desangrar, pero seguramente si salgo con vida, aquellos latigazos dejarán marca.

Yo sé que mi padre seguramente ya viene en camino, así que no me preocupo de lo que pueda ocurrir conmigo, sinceramente una parte de mí sólo deseaba sentir un dolor diferente al que siento en el pecho cada que pienso en Matthias.

Quería por un momento dejar de pensar en lo arrepentido que estoy de mi decisión, aunque al mismo tiempo, deseaba acabar con aquellos que intentan lastimarlo.

Esta puede no ser la mejor opción, tarde o temprano habríamos dado con el líder de igual modo, sólo que eso es algo que se atrasaría un poco más y, por consiguiente, les hubiese dado chance de llegar a Matthias.

Yo no deseo involucrarlo en nada que tenga que ver con la mafia, a su lado yo siempre me comportaba, no hablaba de armas, drogas o lavado de dinero, se podría decir que a su lado era "un niño bueno"

Realmente me gustaba estar con él...

Sé que una vez salga de aquí, todo acabará, ni siquiera podré acosarlo mientras duerme. Tendré que mantener distancia y renunciar a él de una vez por todas...

Es lo mejor, supongo...

—Esto es divertido, ¿qué diría tu padre si te viera? —preguntó el líder de aquel grupo de sujetos que me miraban casi con burla.

—Seguramente, "siéntate bien"— respondí levantando mi cabeza del suelo para mirarlo.

—Aún no te han herido lo suficiente— comentó con una sonrisa.

—No, tus hombres golpean como niñas— le aseguré.

En términos de golpes, la mayor parte de mi cuerpo esconde un moretón, mi rostro seguramente está hinchado, mi espalda totalmente roja producto de la sangre y mis muñecas seguramente mantendrán una bonita marca de las cuerdas que me atan a la silla, pero todo se borrará con el tiempo y eso es lo que me mantiene despreocupado.

—A la próxima me aseguraré de que tu padre esté en tu lugar— me aseguraba.

—Sí...—murmuré tratando de no reír— morirás antes de conseguirlo.

—No, tu padre no sabría cómo llegar aquí para rescatarte, le tomaría días— me aseguraba.

—Cuando era niño, mis padres como modo de protección, implantaron un localizador en mi cuerpo— le anuncié riendo— te aseguro que mi padre ha sabido donde estoy desde que lo llamé esta mañana.

Pude ver como su rostro palidecía por mis palabras, de hecho, les ordenó a sus hombres que vigilarán la entrada y hasta planeaba marcharse luego de dispararme, sin embargo, segundos después de haber cargado su arma, una bala atravesó su cabeza y, por consiguiente, cayó al suelo.

Yo estaba en medio de la zona de ataque, podía ver como todos disparaban en diferentes direcciones, incluso podía ver como uno a uno iban cayendo hasta que, por fin, luego de un rato, todo acabó y mi papá entró corriendo al sitio donde me encontraba.

Yo no entendía qué hacía aquí, papá no debería de arriesgar su vida en algo como esto, pero no comenté nada, parecía tan preocupado que simplemente me mantuve en silencio.

—¿Estás bien? ¿Puedes caminar? Te llevaremos de inmediato a la clínica— me decía sin darme tiempo a responder.

Pude ver a mi padre en la distancia, él les daba órdenes a sus hombres de limpiar el lugar minutos antes de acercarse.

—Te ves como la mierda— me aseguró casi despreocupado.

—¡Jack! —chilló mi papá.

—¿Ahora si estás vivo? —preguntó, mientras que yo encogía mis brazos con indiferencia.

—Golpeaban como niñas— le respondí.

—Si querías una paliza, sólo debías pedirla— me aseguraba— yo no habría dejado marcas, pero te habría dejado peor.

—Espera ¿hiciste todo esto por diversión? —preguntó mi papá mirándome desconcertado.

—No, por diversión no— respondí.

—¿Y tú lo sabías? —le preguntó con enfado a mi padre— ¡mira como lo dejaron! Lo sabías desde mucho antes, ¡¿por qué esperaste tanto?! —le continuaba gritando mientras que yo, fingí desmayarme para no recibir un regaño de papá.

Claro que, poco después me llevaron al auto y podía oír como papá regañaba a mi padre todo el camino. Eso sí fue divertido, ya que mi padre la mayor parte del tiempo no sabía cómo responder.

Mi papá estaba furioso, nunca lo había visto tan enojado, así que opté por dormirme y desperté al día siguiente en la habitación de una clínica con papá a mi lado derecho, Lilith en el izquierdo y mi padre en una esquina de la habitación, mirando por la ventana.

—Ups...—dije llamando su atención, cuidando de no despertar a mi hermana ni mucho menos a papá.

—¿Estas bien? —preguntó acercándose, posicionándose justo frente a mi cama.

—Sí...—respondí bajando la cabeza.

—Ahora no hay nadie que lo lastime, ¿no intentarás recuperarlo? —me preguntó, pero yo negué con la cabeza.

—Mantendré mi distancia— añadí.

—El mundo no es tan grande, tarde o temprano se encontrarán de nuevo— me aseguraba.

—Ya me lo habías dicho antes...—murmuré.

—Sí y no me equivoqué— me recordó— ahora bien, cuando te recuperes, te daré una paliza que jamás olvidarás.

—Papá, mi padre me está amenazando— dije despertándolo rápidamente.

Pude ver a través de los ojos de mi padre un "me las pagarás" mientras mi papá nuevamente lo regañaba.

Bueno... supongo que, si nosotros llegásemos a reencontrarnos, me apoderaré de aquella frase de "Si amas algo, dejalo ir, si regresa es tuyo y si no, nunca lo fue" hasta entonces, continuaré con mi vida como hacía en aquella época donde no nos conocíamos.

Sé que será difícil, ya lo perdí antes en el pasado y sé perfectamente cuanto dolió, sin embargo, si mi padre tiene razón nuevamente, quizás algún día entre los dos puede que haya un "nosotros..."

[...Elizabeth Carter...]

Ustedes no lo saben, pero Jack le sacará la verga (y no será la que le gusta a Noah)