Capítulo 24

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No estoy muy seguro de por qué, pero a eso de las dos de la madrugada me desperté tras sentir que Chris no estaba, al principio busqué tocarlo con los ojos cerrados, tras no hallarlo abrí mis ojos dándome cuenta de que estaba solo en la habitación.

Pensé que estaría en el baño, miré la hora en el reloj digital de la mesita de noche, eran exactamente las 02:01, por lo mismo, creía que era imposible que estuviese en otro lado que no fuera el baño.

Lo curioso es que pasaron 20 minutos y no había señal de Chris, pensé en levantarme para ver si estaba en la cocina o en otro sitio dentro de su casa, pero escuché pasos acercándose y automáticamente fingí estar dormido.

Él abrió la puerta de la habitación, lo sé por el aroma de su perfume, además justo cuando entró en la habitación, alguien lo llamó y él contestó.

—Todo bien— respondió en un tono más bajito, para no despertarme— el pago fue completado...—añadió quedándose de pie cerca de la orilla de la cama— no, o sea, sí, pero no fue nada grave, al menos no se ensució mi camisa— dijo soltando una risita— sí, no te preocupes, estoy bien— comentó, mientras que yo sentía curiosidad por escuchar a la persona que le hablaba— es que no estoy solo...—murmuró— está dormido, así que por eso hablo más bajito...

No se necesita ser un genio para saber que estaban hablando de mí, Chris se quedó en silencio un instante y soltaba en ocasiones risitas, supongo que estaba hablando con su padre, ya que mencionó un "Cuando tu agenda se libere, lo conocerás"

La llamada no duró mucho más, Chris se despidió con un "Nos vemos mañana" y luego dejó escapar un suspiro cansado, antes de dirigirse al cuarto de baño.

Yo esperé pacientemente, pensando en aquel comentario de la camisa ¿Qué le habrá pasado? ¿qué podía ensuciarla? Lo curioso es que, luego cuando salió del baño, ya bañado, salió de la habitación con su vestuario anterior en la mano, supuse que era para lavarlo.

Una vez que regresó, se acomodó bajo las cobijas y se acercó a mí, con tal de abrazarme por la espalda mientras yo no sabía si era adecuado hacerle ver que estaba despierto.

Él se acomodaba con lentitud, casi buscando no despertarme, por ello opté por girarme para hacerle ver que estaba despierto.

—Lo siento, ¿te desperté? —me preguntó envolviendo sus brazos alrededor de mi cintura, buscando apegarme contra su pecho desnudo.

—Me desperté antes...—dije acomodando mi cabeza contra su pecho— ¿dónde estabas?

—Salí por trabajo, tenía que recibir un cobro de la empresa familiar— me respondió sin darme mayor detalle.

—¿Y qué era eso que no ensució tu camisa? —continué preguntando.

—Vino— respondió de forma rápida—se le cayó al inversionista mientras hablábamos— añadió.

No tenía razones para desconfiar de su palabra, por lo mismo, creí en su respuesta y disfruté de su calor, creyendo que ahora podría dormir mucho mejor, aunque comenzamos a besarnos y Chris terminó entre mis piernas, rozándose dentro de mí de una forma suave.

Era extraño, era visiblemente algo malicioso, pero sus caricias eran tan gentiles que me resultaba algo casi inocente, como si fuese algo inclusive romántico.

Hasta ahora nosotros lo hemos hecho de un modo más desesperado, follando como dos animales en celo, sin embargo, ahora era muy tierno, incluso nos besábamos de esa forma y no lo sé, es tonto, pero me gustaba...

En fin, esto no es algo que deberíamos hacer, pero quiero ver hasta qué punto somos capaces de llegar si dejo de pensar en las consecuencias que podrían traer nuestras acciones.

Un final feliz [Bl]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora