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El peli-negro se encontraba en su casa. A unas horas de ir al preescolar.

-¿Puedo llevar mi gorro?- pregunto viendo a sus padres quienes estaban en la cocina preparando el desayuno.

-Si tu quieres llevarlo por su puesto- contesto su madre sonriendo.

-Pero primero tienes que desayunar para que tengas energías- dijo su padre para después acercarse a él y cargarlo.

-¿También puedo llevar a mi patito?- hablo Alex refiriéndose a su peluche.

-Tu patito no puede ir contigo- dijo su madre.

-Pero el igual tiene que estudiar, mamá.

-Después veremos eso, ahora debemos comer para que puedas ir al preescolar.

-Esta bien papá- dijo sonriendo para después comenzar a comer lo que le habían preparado sus padres.

Después de acabar su desayuno y hablar con sus padres se levantaron de la mesa y comenzaron a preparar sus cosas para irse.

-Papá mira los stikers que me compro mamá- hablo el pequeño sonriendo.

-Son muy lindas, patito- dijo su padre- ahora ve por tus cosas para poder llevarte a la escuela.

-¡SI!

El peli-negro salio corriendo hacia su habitación donde se encontraba su mochila que tenía las cosas que necesitaría en su primer día.

-¿Todo listo?- pregunto su mamá.

-Sip.

-Bien, vamonos.

⊹ ₊ ࣪𓏲

Por el camino estuvieron hablando.

El pequeño se encontraba muy feliz de conocer su escuela.

-Llegamos- escucho y comenzó a tomar sus cosas.

-No te portes mal- recordó su padre.

-Si papá, seré bueno con todos.

-Bien, nos vemos depues- dijo su madre quien veía como el más chico entraba a su salon de clases.

Al entrar vio a muchos niños y su nueva maestra.
Le emocionaba demasiado.

-Hola- saludo una chica quien debía ser su maestra- yo soy su maestra Hanna. Haremos una actividad para conocernos todos, ¿si?

Todos los niños gritaron un si.

Después de la actividad la maestra los puso a colorear algunas imágenes que les había dado.

-¿Me puedes prestar ese color?- pregunto un niño castaño.

-Sip- dijo dándole el color.

-Gracias.

Aprovechando la oportunidad Alex le pregunto:

-¿Quieres ser mi amigo?- el niño lo pensó y asintió.

-Claro, ¿cual es tu nombre?

-Alex, ¿el tuyo?

-Wilbur- dijo sonriendo tímidamente.

El castaño volteo a ver a su nuevo amigo y miró unas pegatinas que tenía aún lado de él.

-¿Son tuyas?- pregunto.

-Si, ¿quieres una?- el niño asintió y Alex tomo sus pegatinas.

Se acercó a la cara del castaño y le pego una pegatina en su mejilla.

-Gracias.

-¿Puedo ponerte más?- dijo y su amigo le contesto un "si".

El peli-negro comenzó a colocar más stikers en todo el rostro de su amigo.

A su parecer eso hacía ver más lindo al castaño.

-Listo- dijo luego de terminar de colocar stikers en toda la cara del otro.

-¿Me veo bien?

-¡Si!

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Les subo otro porque si.

Tenía muchas ganas de publicar esta historia 😭

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𝗦𝘁𝗶𝗸𝗲𝗿𝘀! - Quackbur Donde viven las historias. Descúbrelo ahora