Amor de Verano +18 ©JJK

03

No entendía a Jungkook. Hacía bien el trabajo si se aplicaba a ello, pero no le daba sonrisas a esas personas, a penas hablaba o gesticulaba y siempre tenía ojos fríos. Yo intentaba que cambiara su expresión haciendo bromas, pero ni siquiera me miraba cuando acababa el chiste.

Estaba segura de que conseguiría que sonriera de forma natural y con alegría, pero costaría mucho.

Hoy de nuevo volvíamos a esa plaza abandonada del pueblo, y de nuevo había vuelto a agarrar el mismo papel que él. Necesitaba a alguien que no pareciera un mueble.

— Usted era... —miro la lista— La señora Moon —aquella anciana asiente— Eran dos sacos de carbón.

Jungkook deja el segundo sin problemas en el suelo. Ella lo mira. Sí, señora, yo también opinaba lo mismo. Aunque fuera una mierda de compañero, estaba bien verle en mangas cortas cargando cosas pesadas. Con ese rostro cualquiera podría desmayarse. ¿Y si lo fingía? Tal vez podría cargarme a mí también.

— Muchas gracias —me inclino un poco— Eres muy apuesto, hijo —parpadeo un par de veces cuando me mira— Tienes suerte de tener un novio así.

— N-No, señora... —sonrío nerviosa— Solo somos compañeros...

— ¿Enserio? —asiento muchas veces a toda velocidad— Entonces espérame un momento —se gira. Miro a Jungkook mientras abrazaba la lista contra mí— ¡Hajoon, ven un segundo!

Mi boca se abre cuando una chica linda sale por la puerta. Sus ojos chocan con nosotros. Hace una reverencia frente nuestra antes de mirar a su abuela.

— ¿Sucede algo, abuela?

— ¡Mira este chico tan guapo! —ella lo mira e instantáneamente aparta la mirada con su rostro rojo— Vamos, preséntate.

— Abuela, ¿Por qué me haces esto? —susurra sacándome una sonrisa— Ah... —le costaba mantener la mirada en él— S-Soy Hajoon —sonrío mirando a Jungkook, pero él no hacía nada.

Me acerco a él y golpeo su espalda sin conseguir que se moviera. Jungkook me mira cuando me giro hacia ella.

— Él es Jungkook y...

— No estoy interesado, vamos —agarra mi brazo y comienza a tirar de mí.

— E-Espera... —la miro— ¡Somos voluntarios puedes encontrarnos en la zona de camping! —me obliga a subir al vehículo— Oye, eso ha sido muy grosero —cierra su puerta para comenzar a manejar.

— Le he dicho que no me interesa, ¿Qué tiene eso de grosero?

— Cierto... tal vez tengas novia y...

— No tengo —le miro. Vuelvo al frente pensativa— Pensaba que se notaba, todas siempre están buscándome para molestarme.

Eso era cierto, recibía muchas miradas de odio cada vez que yo tenía que ir a solas con él para el trabajo. Me estaba ganando demasiadas enemigas.

— ¿Tú tienes...? —visualizo la lista.

— ¡Espera, nos hemos pasado una casa! —frena en seco.

— ¿¡Por qué gritas mientras alguien más conduce!?

— Da marcha atrás, era aquella de ahí atrás.

Él suspira haciendo lo que le pido. Sonrío abriendo la puerta para bajarnos. Allí había una mujer joven, en verano al parecer venían algunas personas más.

— Hola —sonríe— ¿La señorita... —busco su nombre— ...Choi? —asiente— Solo había pedido uno.

— Sí, pero me gustaría quedarme con dos si no es molestia... dentro de unos días llegarán más personas y... —se queda viendo a Jungkook.