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NARRA JUNGKOOK.
Le doy una mirada triste mientras acomodaba su pelo. Ya estaba completamente dormida, pero todo su rostro estaba mojado por las lágrimas. Me había costado casi dos horas que pudiera cerrar los ojos.

Inclino mi cabeza para dejar un beso en su mejilla antes de salir de la cama. Echo las cortinas para que el sol no le diera directamente y camino hacia la puerta para salir a la sala.

Todos me miran. La mesa estaba repleta de comida y todos parecían almorzar. Sino hubieran traído el almuerzo se hubiera pasado la hora y no hubiéramos podido comer nada.

— ¿Se ha dormido? —asiento caminando hacia la mesa.

— ¿Enserio su madre ha intentado suicidarse? —Dal y yo asentimos mientras tomaba asiento junto a Namjoon y Minjoon— Que fuerte.

— ¿Y tú cómo estás? —Minjoon coloca su mano en mi hombro— Puedes salir a que te de el aire si te encuentras mal, nosotros la cuidaremos.

— No... estoy bien —comienzo a comer.

Minjoon sabía que los temas de suicidio conseguían alterarme bastante. Había querido que _________ durmiera porque fue lo primero que hice yo al enterarme de lo de mi madre. Dormir me ayudó a no pensar y a poder tener la mente clara al despertar para poder procesar la información; además de que ella estaba al borde de un ataque de ansiedad.

— Me preocupa... —miramos a Dal, estaba comiendo poco— Es la única que se marchará lejos cuando acabe esto... ¿Y si se siente mal? —aprieta sus labios— Tal vez si me voy con ella...

— Yo me iré con ella —me miran— Voy a comprar un departamento en Busan y trabajaré desde allí —Minjoon sonríe dándome palmadas en la espalda— No la dejaré sola.

— Es un alivio —suspira pasando su mano por su pelo— No se como no ha colapsado ya por esta situación antes.

— ¿Entonces vamos a tener que viajar a Busan para poder verte? —asiento.

— Planeamos un viaje a la playa —sugiere Jin— Al mejor hotel de Busan, y también vamos al resort de...

— ¿Se te olvida que no cago dinero? —la mesa estalla en carcajadas por Dal— Es la primera vez en mi vida que comenzaré a trabajar, mi vida laboral es nula, igual que los dígitos de mi cuenta del banco.

— Yo te invito —le da una mirada cansada a Taehyung— Pero tenemos que compartir habitación.

— ¿No vas a parar nunca? —niega mi amigo con una sonrisa coqueta— ¿Qué quieres a cambio de que me dejes en paz? —abre su boca— Que no sea prostituirme.

— Le quitas toda la diversión —le golpea— Me basta con que me beses —le da una mueca de disgusto.

Estos dos siempre estaban igual. Al principio Taehyung solo la molestaba para que se olvidara de Minjoon, pero ahora se había encaprichado en conseguir al menos un beso.

— Creo que estáis bebiendo mucho vosotros dos —Minjoon señala las cervezas vacías que había junto a Taehyung y Dal.

Minjoon vuelve a mirar a su plato borrando su sonrisa por la mirada fría de Dal. Le podía mandar rayos láser que se clavaban en su cuello con facilidad.

— Un beso solo es un roce, ¿verdad? —Taehyung busca nuestra aprobación. Dal niega— Entonces no te dejaré en paz. Cuando esto acabe te buscaré y me presentaré en casa de tus padres con un camión de flores y un anillo de diamantes —agarra su pelo suavemente— A ver cómo me rechazas frente a tus padres.

— Con una patada en los... —suspira quitando su mano de su cabello.

— No miente —mira a Namjoon— Lo hará.

Amor de Verano +18 ©JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora