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Entonces la puerta se abre y YeonJun prácticamente corre.

—¡Esta casa es jodidamente asombrosa! —Dice. —Tiene cuatro baños, cuatro. Uno de ellos
tiene un maldito jacuzzi.

—Lo sé. —Dice Soobin divertido.

—¿¡Has visto la cocina!? —Hueningkai sisea mientras cierra la puerta. —Esa cocina es más
grande que mi apartamento en Daegu y... mierda, ¿Esas son sábanas de satín?

Soobin sonríe.

—Sí.

Hueningkai básicamente vuela hacia en el colchón, riendo felizmente, rodando por la cama. Acaricia las sábanas eufóricamente.

—Adoro este lugar. ¿Podemos mudarnos acá?

—Estoy de acuerdo. —Dice YeonJun. —Mierda, hay un baño privado aquí también.

Soobin mira a YeonJun mientras abre la puerta del baño y entra.

—Hyuka, mierda, este baño tiene la ducha más grande que he visto en mi vida.

—Adoro este lugar. —Repite Hueningkai, rodando en la cama emocionado. —Excepto por esas alfombras, tenemos que quemarlas.

YeonJun vuelve del baño y también se acuesta entre ellos.

—¿Taehyun es modelo?

—Es jodidamente hermoso. —Añade Hueningkai. —Mi orgullo duele.

—Tú eres más hermoso. —Dice Soobin, Kai le pega en el hombro. —Ouch, ¿Qué mierda?

—No digas esas mentiras. Él luce como si pudiera estar en las páginas de Vogue, por favor.

—Tú también, de qué habl... vuelves a golpearme y te azoto.

Hueningkai sonríe.

—Tal vez quiera eso. —Se recuesta en la cama. —Pero no aquí. Estas sábanas no pueden ser manchadas. Nunca.

YeonJun carcajea un poco, y Soobin le ve pasando sus dedos por el cabello de Kai.

—Así que, ¿Qué hacemos aquí? —Pregunta el mayor.

—Supongo que no es por las sábanas de satín.

—Beomgyu puede ayudarnos. —Dice Soobin. —Nos dará sus servicios.

—¿Qué son...

—Muertes virtuales.

YeonJun se sienta inmediatamente, mirando a Soobin con los ojos muy abiertos.

—¿Me estás jodiendo?

Soobin niega con la cabeza.

—Nos hará desaparecer del mapa y nos dará nuevas identidades. Será como si nunca hubiéramos existido.

Kai parpadea.

—Espera, ¿En serio?

—Sí.

—Mierda. —YeonJun se recuesta de nuevo. —La casa se explica ahora. ¿Cuánto dinero se necesita para hacer eso?

—Mucho. —Soobin se encoge de hombros. —Pero me debe un gran favor.

—¿Qué favor?

Antes de que Soobin pueda responder hay golpecitos en la puerta, los tres se sientan y la
misma se abre, la cara de Taehyun se asoma.

—Deben de estar hambrientos. —Dice. —Estoy haciendo la cena, ¿Quieren venir?

Hueningkai asiente, sonriendo felizmente. —Te ayudaré.

epoch | yeonbinkaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora