Un año después...
Actualidad Italia.Kistal se miraba en el espejo de su nueva habitación y este le devolvía la imagen de una mujer nueva, su pelo había pasado a castaño con reflejos, su rostro había sufrido ciertos cambios, sus labios más gruesos y las facciones de antes que eran más gruesas las había afinado, se había puesto pechos y su cuerpo había cambiado drásticamente, dándole un aspecto estético aún más perfecto, lo único que no cambiaba eran sus ojos de un azul característico que estaban vacíos. Los cuales cubriría con unas lentillas grises. Su nombre ahora sería Greta Maccini. Hija adoptiva de Katekechi un japonés muy reconocido en el mundo empresarial el cual la esperaba en el primer piso junto a su hijo, su único salvador. Este año le había servido a la muchacha para reflexionar y aprender muchas cosas entre ellas a fortalecerse tanto física como mentalmente. Había estudiado en el área empresarial pasando cursos y hoy sería el día que al fin empezaría todo.
Se colocó la última pieza del traje empresarial que consistía en una salla entubada una blusa con escote con una chaquetica. Su cabello perfectamente peinado en ondas. Y su maquillaje leve . Y mientras estaba en el espejo suspiro con ansiedad mientras susurraba más para ella misma.
________Que empiece el juego.
Bajo las escaleras lentamente. Y el japonés abajo la recibió tan cortes como siempre. Kayakechi era un hombre enigmático que la había tratado como un padre y le había dado en el poco tiempo que lo conocía todo lo que necesitaba que era espacio. Tenía actualmente la edad de Dante, aunque el hombre no hablará mucho de edad y compartía con la muchacha el deseo de venganza contra Bianchi. Su hijo simembargo era un incordio, siempre la estaba picando y buscando para sacarla de sus casillas, pero nunca olvidaría que el fue él que la salvó aquel día. Aunque ella considerará que nunca tendría arreglo.
_______¿Lista?_____ el hombre mayor frente a ella la observaba serio.
_______Mas que nunca.
Caminaron uno junto al otro hasta la puerta de la mansión y en ello su hijo Ohtani se atravesó luciendo su cara de pocos amigos mientras repasaba a la muchacha de arriba abajo con un ojo clínico.
_____Parece que vas a putear____ se burló con una ceja alzada.
_____No creo que te importe_____ respondió la muchacha mordazmente.
_____ Vamonos_____ corto el hombre mayor sabiendo las peleas de las dos personas junto a él______ Hijo encárgate de lo que te pedí.
______No se preocupe padre______ Ohtani bajo la cabeza en señal de respeto y ellos salieron de allí tomando sus abrigos.
La limosina los llevo por las calles de Italia, dónde reflejaba las calles abarrotadas llena de personas inocentes que hiban a su trabajo, estudiaban, amantes que soñaban, niños que jugaban, y Kristal no pudo evitar pensar mientras miraba por la ventanilla que un día ella fue una muchacha con sueños y metas. Ahora sólo era un cascarón duro. Lo único que le daba vértigo era pensar en encontrarse con alguno de los hermanos Bianchi.
Aunque había aprendido a odiarles por nunca buscarla, sobre todo a Guilio. Por creerse el cuento de Dante de que estaba muerta.
Todo este tiempo había recibido informes de su padre sobre el enemigo. Lo que más le sorprendió fue el casamiento de Guilio tres meses después de su supuesta muerte con una princesa de la mafia estadounidense. Sebastián actualmente había tomado el área de las peleas. Y todo era dirigido por Guilio que se la pasaba alcoholizandose y saliendo con mujeres distintas cada fin de semana sin importar que tuviera esposa.
Dante aún movía las piezas de todo aunque supuestamente estaba retirado. Su hermana Victoria estaba perfectamente casada con el Ruso. Actualmente estaba embarazada de seis meses. Y los hermanos Carruzos y los Abramob se mantenían como corderitos siguiendo a la familia líder.
Los tenía a cada uno estudiado.
El frenaso del auto en el lugar que estuvo esperando todo este tiempo la hizo sonreír.
______Hora de actuar hija mía_____ la muchacha asintió.
Agradeciendo cuando su padre la ayudo a bajar teniendo frente a frente el edificio de cristalería más famoso de Italia, sus ocho plantas destacaban completamente con cristales negros polarizados y un letrero gigante que anunciaba el nombre del lugar.
"Empresas Bianchi Constructores"
La muchacha abrazo su maletín y comenzó a caminar de la mano de su padre adentrándose en la boca del lobo. Movía sus caderas ágilmente llamando la atención de todos en el lugar que pagaban lo que estaban haciendo para verla desfilar. Ella era conciente al final del poder que transmitía como mujer y estaba dispuesto a usarlo. Por fin sabía realmente a qué se refería su hermana. Era gracioso detectar la lujuria y la envidia en las personas con tan solo miradas. Se subieron en el ascensor llegando a la planta alta y presentándose con la secretaria del director la cual los llevo hasta la sala de juntas brindándoles café o algo de beber. La muchacha acepto un café cargado mientras se paseaba por el área de reuniones mirando hacia las ventanas. Katajechi en cambio había tomado asiento observándola.
______¿Segura que estás preparada?
______Nunca me he sentido preparada más para algo como en este día____ la joven lo tranquilizó tomando asiento junto a él y sacando las carpetas de trabajo para situarlos encima de la mesa.
Pasado cinco minutos la mujer de antes entro con él café y seguido de ella una persona que Kristal conocía demasiado bien. Ojos azules, barba de hace más de seis meses que lo hacían ver cómo un hombre maduro, traje azul pegado a su musculatura, metro 90 y el rolex de siempre aunque ya no sabía si algo era igual que siempre. Quizás se equivocó siempre con esa persona. No pudo evitar que su corazón se dispara a toda velocidad pero ahora ella era la que controlaba todo.
_______Lamento llegar tarde____ la voz de Guilio le hizo cerrar los ojos involuntariamente viniendo a su mente todas las veces que le decía "cara".
Los recuerdos ya no dolían como las pesadillas.
______No se preocupe señor Bianchi a penas fueron unos minutos. Mi nombre es Katakechi y esta es mi hija Greta Maccini_____ su padre se adelantó en las presentaciones y ella se levantó imitandolo.
Ambos hombres se dieron la mano cortésmente y luego ella le extendió la suya derecha a Guilio el cual se quedó por un momento en blanco dejándola con la mano extendida.
_______Perdon, pero te conozco?______ las palabras del oji azul la dejaron en blanco por un momento sin saber que decir.
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La criada del mafioso
RomanceKristal es la hija de la sirvienta de una de las familias más peligrosas de Italia, los Bianchi compuesta por el Capo y sus dos hijos varones Guilio y Sebastián, los cuales siempre fueron inseparables con la muchacha, sobre todo el menor que era de...