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━━ ❝Jugando a ser fuerte, para convencerme que ya me olvide de ti

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Buenos Aires, Argentina

La semana para Macarena había pasado como una ráfaga de viento, tan solo faltaban cuatro días para su compromiso y seguía siendo un manojo de nervios insostenible. Los parientes cercanos del futuro matrimonio que venían del interior del país comenzaron a llegar de a poco a capital y de igual forma había arribado Nicolás hace apenas un par de horas pero desde Francia. Para aquella noche justamente estaba prevista una cena familiar con los padres de Tomás y Macarena, sus hermanos y las parejas de los susodichos, para celebrar en algo íntimo la próxima unión.

Pero en primer lugar, la menor junto a Carolina iban de camino a la última prueba de vestido y poder retirarlo finalmente. Contando con éste encuentro, fueron tres citas la que la Novia tuvo para probarse y manifestar alguna modificación que deseará hacerle. Ahora bien, a diferencia de las otras veces, Macarena asistía con su cuñada solamente. Las demás acompañantes no pudieron ir por diversos temas personales o de trabajo.

Al llegar, Amanda las recibió gustosa junto a dos tazas de café, las guió hasta la habitación para poder comenzar y escuchar el veredicto final de la novia. Así pues, acercó un portatraje que contenía el vestido en su interior y se lo entregó a Macarena. Ésta lo tomó con delicadeza e ingreso al probador, mientras se colocaba primero los zapatos y luego el vestido, las mujeres del otro lado le preguntaban si precisaba ayuda en algo. Sin embargo, sola pudo con todo y al estar lista salió para que la vieran.

- Les doy su espacio juntas, cualquier cosa me avisan - exclama Amanda sonriente desde la puerta

- Está bien, muchas gracias - agradece Macarena de la misma forma y ve como la dueña abandona el lugar

- A ver Pipi, subí a la tarima - ordena Caro a sus espaldas, la menor le obedece y sube a la pequeña tarima que estaba en frente al espejo

- ¿Cómo se me ve? - consulta tímida mirándose en el reflejo del objeto

- Esta bellísimo - elogia su cuñada desde lejos - ¿lo sentís propio al vestido?

- Sabes que siempre te soy sincera Pipi, pero es como que...

- Espera corazón - la interrumpe bruscamente, Macarena se voltea y la observa con la vista en su teléfono - que pesado que es tu hermano, dame un segundo que lo atiendo - le pide Caro, pero antes de poder responder ya había salido de la habitación

De este modo, al quedar sola en el lugar volvió una vez más a mirarse a través del espejo. Busco su teléfono para poder sacarse algunas fotos y enviarlas al grupo que tenía con sus damas de honor, pero también para tenerlas y poder verlas hasta el día de su compromiso. Se observaba y examinaba a sí misma vestida de esa forma, intentaba encontrarse dentro de aquel vestido pero era difícil y dentro de ella renacía ese vacío otra vez de inconformidad. En efecto no sabía si era el vestido, la situación de puro estrés que estaba viviendo, la desición que tomó meses atrás o su corazón que le intentaba decir algo que ella estaba negada a escuchar y volver a creer. Pero la guerra de pensamientos fue interrumpida por una voz a sus espaldas que la trajo a tierra una vez más, voz que claramente no era de su acompañante.

- Tendría que ser yo quién te reciba en el altar así vestida

Tagliafico giró sobre su propio eje en dirección a la puerta y ahí se encontraba él, descansando sobre el marco de la puerta y mirándola de la cabeza a los pies. La muchacha tragó en seco y sin poder entender la presencia del cordobés allí se bajo de la tarima. Cristian ingresa a la habitación lentamente e intenta acortar la distancia que los dividía, que esta vez ya no eran de miles de kilómetros.

𝐄𝐍 𝐋𝐀 𝐈𝐍𝐓𝐈𝐌𝐈𝐃𝐀𝐃 | Cuti Romero ⓒDonde viven las historias. Descúbrelo ahora