"Y además tú también le gustas a él, así que seremos la familia perfecta" recuerdo lo que Eliezer me había comentado por onceava ocasión y no puedo estar más noqueada, pero joder no sé porque me emociono tanto, bueno tal vez sí, es que nunca antes me había fijado en un hombre por decisión y gusto propio, y desde que vi a Edward eso cambio por completo, intenté hacerme la valiente el día de ayer y preguntarle sobre lo que el niño había comentado, y cuando creí que me atrevería terminé diciéndole "oh, que bien, pues que espera para llevárselo", soy una idiota, lo sé. Se retiraron de la mini fiesta en la guardería y yo solo me quede de pie como una estúpida observándolos a ambos salir por la puerta.Y no todo se quedó limpio, pues tuve que aguantar a la tarada de Cinthia diciéndome que no me luzca porque ellos tienen una relación en secreto, en ese momento no le creí nada, porque aún pensaba en la "familia perfecta", y no es que sea ilusa, pero carajo, ¡les obsequió cadenas de oro personalizadas al clan!, no obstante, ahora que lo pienso mejor, Cinthia es guapa, víbora y siempre se sale con la suya.
Son las nueve de la noche y nos encontramos en mi recámara comiendo palomitas y disfrutando de la nueva serie de Netflix "Merlina", y por ello a todas nos ha quedado más que claro que Astrid le teme a la mano, dice que está cortada y fea; y que si la observa la suya se pondrá igual.
—Mami, ¡se están terminando las palomitas!
—Mami de seguro fue esa horrenda mano cortada, ¡dile algo!
—No seas boba Astrid, no pareces mi hermana, ¿desde cuándo lo que vemos en la tele sale al mundo real?, ¡Nunca! Porque es FICTICIO, además si fuera cierto, ¿no crees que ya mi mami se hubiera casado con el novio chino de la Mulan esa? – Anika y yo nos doblamos del dolor que nos ha causado reír a carcajadas por las ocurrencias de mis otras dos hijas, mientras que ellas se retan con la mirada, estas niñas no tienen remedio.
Carraspeo un poco e intento permanecer en completa seriedad para comportarme como la adulta de veintidós años que soy.
—A ver niñas, son hermanas, tienen un hermoso vínculo que no puede ser opacado por discusiones tontas, ¿de acuerdo?, deben respetarse, protegerse y amarse entre ustedes. ¡Todas para una!
—¡Y una para todas! – exclaman al mismo tiempo.
Después de unos minutos, decido ir a la cocina para preparar un poco más de palomitas de maíz, en el preciso instante en el que mis pies tocan el suelo mi móvil suena en la mesita de noche; y a su vez el timbre del departamento resuena una y otra vez de manera continua.
Me pongo nerviosa y para qué negarlo, asustada también, pues sólo pienso en que puede ser el padre de las niñas, ignoro la llamada telefónica en su totalidad y me dirijo con cuidado a la sala de estar, me acerco a la puerta lentamente y maldigo al recordar que esta no me ofrece mirar hacia afuera, a menos de que la abra de par en par.
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MI INESPERADA OPORTUNIDAD ✔️
RomanceHay una frase que dice "No juzgues a un libro por su portada; porque te puede sorprender el contenido". También dicen que aquello solo pasa en la ficción y los bajos mundos, pero no es así. Porque a mí me han juzgado, criticado y mancillado sin dar...