Mi último suspiro

Capítulo 5:Mis zanahorias.

Dia del funeral 20 de junio 2022

Veo a mi hermanos y no entiendo porque están aquí, este no es lugar para ellos; triste y frío, ellos son todo lo contrario.

Ellos están llorando en los brazos de Laila mientras ella intenta no llorar frente a ellos.

—Ya mis amores, no lloren —dice apunto de llorar mientras los abraza—. A ella no les gustaba que llorarán.

—Pero ella ya no esta para cantar nuestra canción—dice Eloise mientras llora— ¿Quien nos va a cantar la canción cuando lloremos ahora que ella se fue al cielo?

—Yo quiero que vuelva con nosotros—dijo Owen—.

—Yo también quiero que vuelva—susurró Laila—.

—¿Quieren que la cantemos nosotros? —hablo Camilo al agacharse su lado—.

No se porque mi madre no los estaba consolando en ese momento, puede que a ella no le duela pero yo si les importe a ellos y se supone que ella tendría que estar consolando a Eloise y Owen en vez de mis amigos.

—No—dijeron al mismo tiempo y Eloise fue a abrazar a Logan, el la alzo y la abrazo cuando ella se aferro a su cuello—.

Eloise siempre tuvo una fascinación por Logan y puedo entenderla, es imposible no quererlo a el. Al igual que Owen pero el siempre era más de estar cerca de Laila y Camilo.

—Logan, yo quiero que ella cante la canción, es nuestra canción—Logan solo le acaricio el pelo mientras trataba de no llorar pero se le estaba haciendo imposible—.

La canción de que ellos hablaban era su canción favorita y yo se las cantaba cuando lloraban para que dejaran de llorar.

Siempre que se sentían mal o estaban triste venían a que yo les cantara la canción. Una vez John se las quiso cantar y ellos no quisieron, el enfureció y tomo represalias conmigo cuando ellos se fueron a dormir por que sus propios hijos no lo querían por mi culpa, según el.

Amaba cuando ellos venían en las noches a que yo les cantara esa canción y no lo digo porque me gustará ver a mi hermanos tristes, si no por el hecho de que al menos esa noche me iba a librar de las garras de John.

Una noche estaba acostada en mi habitación sin poder dormir temiendo que John entrara, aunque había cerrado la puerta con llave pero sabia que el iba poder abrirla si se le daba la gana.

Estaba cansada pero no podía dormir desde la última vez que John intento hacerle daño a Eloise; hubo una vez en la que me anime a decir no por primera vez y el me amenazó con hacerle lo mismo a Eloise pero no le creí en ese momento, en la noche escuché los quejidos de Eloise y salí corriendo hacia su habitación, resulta que el la estaba destapando y como hacía frío ella se estaba quejando. Me rendí y me di cuenta de que era ella o yo, y no iba a dejar que el le hiciera eso a ella.

Escuche como querían abrir la puerta y me tense por completo.

—Mai, soy Owen —volví a respirar y tranquilizarme—, ¿Puedo dormir contigo? Tengo miedo, por favor.

Me levante a abrirle la puerta, cuando abrí lo primero que hizo fue abrazarme por la cintura, yo me agache a su altura y también lo abracé, lo hice pasar y cerré la puerta pero no la cerré con llave porque sabía que Eloise iba a entrar en cualquier momento.

—¿Owen, que paso?¿tuviste una pesadilla?.

—Si —dijo mientras lloraba— Y me dio mucho miedo porque...

Antes de que pudiera terminar de hablar Eloise entro llorando a la habitación.

—Owen, no me dejes sola que yo también tengo miedo—hablo entre llorosos hecha un mar de lagrimas—, puede agarrarme un monstruo y llevarme.

Eloise siempre fue la más dramática de los dos. Hice que pasara también y ahí si cerré la puerta con llave, los acosté conmigo en la cama, cuando se acostaron seguían llorando, odiaba que llorarán me partía el corazón verlos.

—Ya dejen de llorar, están a salvo, mientras yo esté con ustedes siempre lo van a estar.

—¿Lo prometes?—hablaron al mismo tiempo, daban miedo cuando hacían eso—

—Se los prometo.

—Mai, ¿puedes cantar nuestra canción para que ya no lloremos?—me pregunto Eloise con un puchero—.

—Cantó muy feo, si me llegan a escuchar no van a poder dormir en días.

—Eso es mentira, cantas hermosisisimo—exclamó indignada Eloise—.

—Eso—la apoyo el otro—.

—Bueno pero con la condición de que se queden a dormir conmigo porque yo también tengo miedo —hice un puchero también y ellos rieron—.

—Si—dijeron a la vez—.

—Dejen de hablar a la misma vez que dan miedo, zanahorias, dan miedo—dije con cara de susto—.

—La canción—exigieron riendo—, y luego vemos la película Tarzán.

—Bueno...

Estaba cansada de la película de Tarzán ya, la habíamos visto millones de veces y "nuestra canción", como ellos la llamaban, era precisamente de esa película.

《Cómo me apena el verte llorar

Toma mi mano, siéntela

Yo te protejo de cualquier cosa

No llores más, aquí estoy.

Frágil te vez, dulce y sensual

Quiero abrazarte y te protegeré

Esta fusión es irrompible, no llores más

Aquí estoy.

En mi corazón, tú vivirás

Desde hoy será y pasa siempre, amor

En mi corazón, no importa qué dirán

Dentro de mí estarás por siempre, siempre.

No pueden entender nuestro sentir

Ni confiarán en nuestro proceder

Sé que hay diferencias, más por dentro

Somos iguales tú y yo.

En mi corazón, tú vivirás

Desde hoy será y pasa siempre amor.》

Les cante la canción entera mientras acariciaba el cabello rojizo de cada uno con una mano en cada cabeza hasta que ellos se pudieran dormir, como siempre.

—¿Mai?—me llamo Owen adormilado—.

—¿Si?.

—Eres la mejor hermana del mundo.

—Ustedes también lo son.

—¿Mai?—dijo Eloise esta vez—.

—¿Si?.

—Te amo mucho y a ti también Owen.

—Yo también los amo a los dos, con toda mi alma.

Ahora lamento la última vez que rechace ver la película con ellos.

Daría lo que fuera para poder ver por última vez esa estúpida película con ellos.

Mi madre por fin reacciono y vino por ellos. Eloise bajo de los brazos de Logan y corrió hacia ella, Owen la siguió, al llegar a ella la abrazaron y ella los llevo al otro lado de lugar cuando se separaron de ella,  sin dedicarle ni una mirada a mi amigos. No se si no los mira porque le da pena que sepan todo lo que ella me hacía o porque en verdad no le importan.

Ruego por lo que más quiera que ella sea la mejor madre para ellos.

Y que a ellos nada ni nadie los lastime en la vida.