Una noche más con Chanyeol y todo cobraría sentido, las imágenes en su cabeza comenzaban a encajar una a una con un poco de esfuerzo, solo no tenía idea o no sentía la seguridad de cómo acercarse a su prometido, tenía que esperar a correr con suerte y que el mismo Chanyeol fuera quien diera paso al encuentro, como siempre lo hacía, ya que últimamente el ambiente entre ambos venía tornándose incómodo, incluso más de lo que ya era desde su última visita al médico.
Chanyeol gracias a sus celos prefirió distanciarse más de lo que ya estaba de Baekhyun, sabía a la perfección que un disgusto a su prometido no le vendría nada bien, lo tenía muy en cuenta, pues de algo le servía el seguir visitando al médico de Baekhyun luego de que este saliera de su consulta, de cierta forma sentía la preocupación de saber sobre los avances de su embarazo, ya que últimamente lo miraba un poco más decaído de lo normal, pensó que tal vez sería parte del embarazo, hasta que el médico despejó su duda y se dio cuenta que seguramente era el culpable.
Baekhyun continuaba experimentando los cambios en su cuerpo, aunque sus actividades diarias comenzaban a cansar lo más de la cuenta, seguía siendo maravilloso ir descubriendo y disfrutando cada detalle de su embarazo. Su pedacito era un poquito más grande, sus movimientos eran con mayor frecuencia y más pronunciados, lo que más amaba, sentir a su pequeño dentro.
– Sé que amo sentir tus movimientos pedacito pero…– sonrió mientras acariciaba con ambas manos su vientre– ¿Podrías ser más considerado con tu papi? – se acomodo en el sofá– Te mueves demasiado eh.
Esa tarde fue tranquila, solo él y su pedacito en ese solitario departamento, entre películas, un poco de comida y un momento de siesta, el tiempo pasó desapercibido, Sehun y Minseok le invitaron a salir un rato, pero Baekhyun simplemente necesitaba un descanso, necesitaba despejar su mente y así fue.
La noche llegó pronto y Chanyeol continuaba sin poner un solo pie en el departamento, Baekhyun comenzaba a preocuparse, las únicas ocasiones en las que su prometido se excedía en su hora habitual de llegada era cuando a este se le ocurría ir a beber en exceso con Yixing, quien lo terminaba cargando hasta su departamento perdido en el alcohol o al menos era lo que hacían pensar a Baekhyun.
– ¿Dónde se habrá metido? – se preguntó– ¿Estará bien?
El sonido de la puerta abriéndose en ese instante le devolvió un poquito de su tranquilidad y justo como lo imaginó, Yixing venía cargando a Chanyeol ahogado en el alcohol.
– ¿Otra vez está ebrio? – cuestionó dirigiéndose a su prometido – ¿Por qué lo dejas beber así?
– Pero yo… – camino al sofá dejando a Chanyeol recostado – No es que lo deje ¿Cómo podría yo prohibirle? Ya es un adulto.
– ¿Adulto? – llevó sus manos a su cintura y frunció el ceño – es un Irresponsable e imprudente diría yo.
Yixin prefirió callar y simplemente dejar a la pareja a solas, total el pequeño rubio se tragaba todo el cuento de que su prometido estaba pasado de copas, pues Chanyeol le pidió mentir sobre su estado y así fácilmente lograr un acercamiento con Baekhyun y al día siguiente tomar la excusa de que estaba ebrio y no sabía lo que hacía, quién mejor que Baekhyun para saberlo a la perfección. Tal vez era la manera más vil de obtener un poco de placer de su prometido, pero fue lo más ideal que se le ocurrió dada la situación de ambos y no negaría que a pesar de ser una forma no tan grata lo disfrutaba, disfrutaba cada instante de su intimidad con Baekhyun.
– Anda, ayúdame a ponerte de pie, Chanyeol – lo tomó por el brazo – No podré hacer esto yo solo, podría lastimar a mi pedacito.
Era curioso como Chanyeol entendía y obedecía a la perfección cada palabra de Baekhyun, cualquier otra persona en ese estado, se pierde, no sabe de sí, no obstante, en ese momento no pasó por la cabeza de Baekhyun cuestionar esa acción, simplemente quería que su prometido fuera a la cama y descansará, aunque estaba consciente que posiblemente Chanyeol pediría algo más y así fue.
ESTÁS LEYENDO
PEDACITO DE VERANO (ChanBaek)
RomanceBaekhyun era el chico más inteligente de la universidad, tenía las mejores notas, la mejor reputación que nadie pudiera tener, con un historial académico y personal intachable. Sin imaginar que el verano que tanto ansiaba y anhelaba tener desde hac...