[OMEGAVERSE] [My only love #1]
« Jung Hoseok, líder del ejército de la manada Jeon.
Kim Taehyung, joven heredero de la familia Kim.
Ambos se conocieron en la manada Kim por obra del destino.
Ambos eran destinados. Sus lobos...
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La celebración duró hasta altas horas de la madrugada. Taehyung se había retirado temprano a sus aposentos, pese a la negación de su padre. Lo que menos quería, en ese momento, tras conocer al guapo alfa que comandaba la guardia real de la manada Jeon, era presentarse a las familias extranjeras que buscaban unirlo a sus herederos. Estaba tan indispuesto de tolerar más planes de casamiento que, en un momento oportuno, le pidió el permiso necesario para ausentarse el resto de la noche. Namjoon no tuvo más alternativa que despedirlo de la fiesta y ordenar a los sirvientes que preparasen más bebidas para los invitados, en un afán de desviar su atención en algo más placentero.
Seokjin se quedó a su lado por un momento, hasta que el omega se encontró lo suficientemente solo para fantasear en el encuentro que había tenido horas atrás. El rostro del alfa lo persiguió hasta en sus sueños, apareciendo con su sonrisa particular y la mirada profunda que le había regalado en toda su conversación.
A sus diecisiete años, el omega no había conocido nada referente al enamoramiento o la atracción hacia otro alfa. Conocía el concepto, por supuesto, pero no lo había sentido como tal en ningún momento de su vida, ni siquiera cuando conoció al joven apuesto de la manada vecina, con quien tuvo cierto acercamiento que pudo haberse confundido con amor si alguno de los dos hubiese dado pasos más seguros.
Era la primera vez que el omega había sentido interés por un alfa en particular, y, también, era la primera vez que su lobo había gritado eufórico en su pecho, pidiendo que se le acercase al extraño y lo marcase con su aroma. No había sentido tales sensaciones en ningún momento, por lo que se encontraba completamente curioso y asustado por igual, completamente ignorante ante un conflicto que era mucho más intenso que los asuntos políticos de su manada y el bienestar de su pueblo.
Cuando despertó, lo primero que encontró fue el horario de actividades que Seokjin dejó sobre la mesita de noche, escrito con letra apenas entendible, pues el omega había estado tan apresurado de desayunar con el líder que apenas si pudo escribir las horas en que se desarrollarían sus tareas.
Lo primero que debía hacer era asearse, desayunar, saludar a su padre –quien se encontraría en su oficina como todas las mañanas, seguramente–, tomar clases de historia con el nuevo profesor beta que habían contratado para él, y acompañar a su padre a lo que parecía ser un paseo por el pueblo con la familia Jeon. En otras circunstancias, el menor hubiese rechazado todo vínculo con aquella familia, pero, tras conocer el trabajo del apuesto alfa que había conocido el día anterior, estaba tan encantado con la idea que se apresuró en todas sus labores para llegar sin problema a dicho paseo.
Namjoon lo esperaba con una sonrisa en sus labios, pues había descubierto cierto entusiasmo en sus acciones al llegar a la entrada del palacio, donde se hallaba la familia Jeon y los alfas que cuidaban de ellos. Taehyung abrazó a su padre y saludó con una reverencia a los invitados, quienes parecían demasiado encantados con la vista, a pesar de que el paseo no era del total agrado del más joven.
