Because I'm Stupid (Reituki)

Cuatro.

En cuanto llegamos a mi piso tengo que obligarme a volver a la realidad. Coloco con manos torpes el folder sobre una de las cajas y tomo dos sin pensarlo. Estoy por dejarlas sobre el suelo, pero Tanabe se me adelanta, tomando la tercera sin avisar y saliendo un paso delante de mí, así que simplemente le sigo. Caminamos hasta el final del pasillo y dejo las cajas un momento al lado de la puerta para sacar mis llaves de la bolsa.
Abro la puerta y tras meter las cajas dentro y lo hago pasar, quien sin decirme nada deja la otra caja junto a las demás, se quita los zapatos y toma asiento en la sala. Tomo el folder de nuevo y casi tengo que obligarme a respirar. Joder...es que no me lo creo. Ya no tendré que matarme más de sueño, tal cual había predicho Takanori, pero...no sé si quiero esto de verdad. Tomo una bocanada de aire. Él está mirándome desde la sala con una sonrisa espectacular. Estoy dentro. Es una locura.

—Creo que aún no terminas de creértelo. –Se burla– No es para menos. Nosotros tampoco pensábamos que tendríamos a alguien tan absurdamente pronto. Llevamos con audiciones cerca de dos meses y medio, y aún no teníamos a nadie que nos convenciera. Bueno...¿Cómo decirlo? Si que lo teníamos, pero todos fueron desinteresándose tarde o temprano por culpa de Aldair.

—Y realmente no los culpo. Es un poco...grosero.

—¿Grosero? –Parece reírse; Se echa atrás en el asiento– Es un hijo de puta, y se hizo aún más hijo de puta cuando Rei salió de la banda.

—¿Rei? –Asiente, sonriendo casi amargamente.

—Rei, Reiji, Minai... –Se encoje de hombros y suspira– En fin. Te explicaré como llenar esa cosa. –dice señalando el folder– Parece cosa fácil pero es casi un testamento. Tienes que leerlo detenidamente y de firmar. Te llevará un buen tiempo...¿De casualidad tienes una copia de tu currículo? Será de mucha ayuda.

—Ah...si. Creo que tengo una copia de la última vez. Voy por él.

¿Me hará llenarlo ahora? Trago fuerte y camino hasta él para dejar el folder sobre la mesa de centro. Voy de prisa hasta mi habitación. ¿Hace cuento que no actualizo mi currículo? ¿Cinco años? Mierda. Busco directamente en la pila de pales del trabajo que tengo sobre el escritorio y tras un par de minutos encuentro una copia dentro de un viejo folder comido por los bichos. Toso esto está lleno de polvo...creo que necesito hacer una limpieza urgente.
Camino de vuelta a la sala y tomo asiento al lado de Tanabe, quien ya ha colocado las hojas del contrato sobre la mesa. Esta será una noche muy larga. Demasiado larga y cansada.

Yo que pedía clemencia para dormir hace diez minutos y ahora ni siquiera tengo sueño.

. . .

—Última hoja. Hm...dale. Tres firmas más y todo está listo. Mañana veremos las cláusulas que marcaste en la compañía para llegar a un acuerdo, y tendrás que firmar un acuerdo de confidencialidad, ¿De acuerdo?

Suspiro por enésima vez.

Son cerca de las doce y mis ojos están cerrándose por sí solos. El café me ayudó en la primera hora pero...ahora sólo quiero entrar en coma. Él por su parte parece de lo más relajado y despierto. Se ha encargado de preparar el café más cargado de la vida, y se ha bebido apenas un par de tazas, mientras yo ya me he tomado cerca de cuatro.
Sinceramente...pensé que todo esto seria más fácil, pero no. Son tantas cláusulas que ya he perdido la cuenta, y algunas son ridículas. ¿Qué es eso de no poder tener pareja mientras estés en la banda? Joder...casi pueden controlar el momento en que respires. Pura mierda. Si quiero tener pareja o no solamente yo lo decidiré, nadie me lo va a prohibir por un sueldo alto...aunque bueno, ¿Con estas cifras de sueldo quien realmente se niega? Creo que vale la pena un poco de abstinencia. Pongo de nueva cuenta mi mano sobre el papel y hago con mucho esfuerzo las últimas firmas. Mi mano duele de tanto escribir y tengo que hacer esfuerzos sobrehumanos para que mi pulso de maraquero no afecte mis firmas. Tanabe vuelve a acomodar las hojas del contrato y luego simplemente asiente mientras yo mando la pluma a la mierda.