No sé cuánto tiempo ha pasado cuando por fin puedo calmarme y levantarme del suelo. Tengo las piernas entumidas y temblorosas, aunque no entiendo si es por enojo o sorpresa. Supongo que esto me afecta más de lo que logro procesar. A este paso Takanori debe de estar lejos. ¿Porqué coño no fui tras él? Debí ir, tranquilizarlo, darle un abrazo...pero mis piernas y mi cerebro parecían desconectados. Siento que he roto nuestra amistad y no tengo derecho ni de eso, pero por el contrario, ¿No la ha roto él al no decirme nada? Halo de mi cabello para concentrarme de nuevo. Dios...tengo que calmarme bien. Ahora no sé que coño pasó, y lo peor es que no tengo idea si Kouyou fue tras él, o lo vio siquiera. Me obligo a concentrarme y simplemente tomo mis cosas. Tengo que encontrarme con Reiji, en esta situación es el único que puede aconsejarme.
Salgo de la sala y comienzo a caminar por el pasillo. Las piernas me tiemblan mientras camino...mierda. Área de fumadores c...eso está a dos áreas de aquí, por donde estacioné el auto. Doy vuelta al final del pasillo y me cago en la madre al instante. Tanabe y Shiroyama se topan conmigo cara a cara, y por lo visto, como luzco no ayuda nada. Debo tener una cara digna de los dramas de la televisión. Carraspeo. Tanabe deja abajo el tom que cargaba, mientras Shiroyama le secunda. Ahora entiendo cuál fue su pretexto para dejarme a solas con Taka. Me rasco la nuca y ambos me miran con ojos abiertos, claramente sin saber que decirme.
—Akira... –comienza Tanabe en un tono bajo, haciéndome sentir como un niño recién perdido– ¿Qué diablos pasó? Hace unos minutos te dejamos con Takanori y ahora parece que has visto un maratón de sonata de invierno desde la mañana.
—No escuchaba ese título desde hace años. –Shiroyama parece a punto de reír, pero lo descarta tras una mirada de Tanabe– Simplemente peleamos.
—Oh bueno, eso es claro. ¿Dónde está Takanori?
—Se fue. –Shiroyama parece aún más perplejo que antes por mi respuesta– ¿Y Shima?
—Creo que lo acaparó el staff. –responde Shiroyama encogiéndose de hombros– Si llega a la sala de ensayos le diré que no te he visto ni a Takanori, ¿Bien?
No me sale el responder, así que sólo asiento. Siento nuevamente un nudo en la garganta, pero no quiero ponerme a llorar como una nena. Trago con fuerza.
—Yo...voy a fumar, y después me largo
—Vale, es buena idea. Será mejor que te tranquilices. –interviene Tanabe poniéndome una mano al hombro.
—¿Quieres que te llevemos a casa cuando termines? Tengo mi auto fuera. –ofrece Shiroyama pero niego– Está bien...llámanos si necesitas algo.
Me limito a pasar a su lado. Este pasillo conecta con el ala c...supongo que sólo me queda caminar. No conozco tanto esta área, se supone que aquí está lo referente al staff, pero son bodegas tan inmensas y llenas que ni siquiera puedes entrar o simplemente están cerradas. Esto está más cuidado que la caja de seguridad de un banco.
Busco el área de fumadores. Al ver través de la puerta de cristal puedo ver que es distinta es a las demás. Tiene una gran jardinera central, es más grande, muy vistosa. Supongo que es porque hay mucho más personal en esta zona.
Un chico está sentado en la jardinera fumando. ¿Quién será? Abro la puerta sin mucho ánimo y el chico voltea en mi dirección. Tiene el cabello corto, claramente húmedo y recién decolorado. Sus ojos se quedan clavados a los míos, ojos miel...es Reiji. Se toma un momento para apagar su cigarrillo y se levanta. Saluda levemente con la mano con una mueca y le correspondo el gesto débilmente. Tiene puestos unos pantalones con marcas deslavadas, una playera por fin de su talla y mi chaqueta puesta.—Tu cabello...–parece divertido al oírme, se echa el cabello atrás– ¿Te interrumpí?
—No realmente. –se encoje de hombros– Estaba terminando de cortar el flequillo cuando hablaste. Realmente te vez mal.
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Because I'm Stupid (Reituki)
FanfictionAkira y Takanori son amigos desde hace más de una década. Gustosos por la música soñaban con la fama algún día, sin imaginarse que sólo uno de ellos seguiría de lleno aquel camino. Mientras Takanori luchaba por un lugar en la industria, Akira seguía...