Zemblania: Máscara de seda y secretos [LIBRO #1 - LGBT]

Capítulo 39: Masquerade

Capítulo 39

Masquerade

TAESUNG

No podía creerse que estuviese bailando con Jaehyeon. El Jaehyeon del pasado que odiaba a los Kwon, el kumiho que debía tener su katana escondida en algún lado y solo hacía a Taesung más nervioso.

—¿Hoy pasará una redada? —preguntó. Cierto, se suponía que solo viajaban para salvarles la vida.

—N-No —titubeó. ¿Qué tanto podría decirle sin consecuencias?—. Están a salvo hoy.

Jaehyeon asintió —¿Entonces qué haces aquí?

—Otros asuntos.

—Otros asuntos —repitió Jaehyeon, poco convencido.

Decir que estaba nervioso era subestimar cómo latía su corazón de rápido y la presión en sus oídos.

Jaehyeon era un excelente bailarín, se movía con gracia y sabía guiar a Taesung de forma que el otro se encontraba dando vueltas y moviéndose por la pista.

Aparte de que se veía... increíble.

Su cabello largo estaba amarrado en una coleta baja, la máscara le delineaba la forma de los ojos y el color crema hacía que su piel y el tono bicolor de sus ojos resaltaran aún más. Y luego estaba su sonrisa, esa sonrisita ladina que le mostraba a los demás que Jaehyeon sabía más que cualquiera. Que era mejor profesor que cualquiera.

También había una vibra distinta en este Jaehyeon del pasado, algo más salvaje e incontrolable. Sería estúpido pensar que el Jaehyeon de su presente no era peligroso, simplemente que el kumiho del pasado parecía llevarse una invitación a usar su katana contra cualquiera.

—Igual podría ser de esta época —aventuró, tentando su suerte—. No lo sabes, no todo lo que hago es sobre ustedes.

Jaehyeon le dio una vuelta rápida que lo dejó desorientado. Taesung sabía variedad de bailes, se lo enseña su familia para mezclarse al momento de hacer saltos, podía dominar esta danza. Eso que hizo Jaehyeon fue totalmente a propósito.

—Supongamos que eres de esta época, entonces —Jaehyeon tiró de su brazo y lo sostuvo de la cintura. El magoi tragó duro ante la repentina cercanía— ¿Entonces por qué tan asustado, pequeño Kwon?

No era la primera vez que le decía así, o más bien esta era la primera, pero se sentía raro recibir el nombre de este Jaehyeon. Eran como dos seres distintos.

—No estoy... —no finalizó su defensa, pues alguien de aspecto asiático cruzó cerca de él y Taesung se escondió rápidamente con el cuerpo de Jaehyeon. El kumiho se alejó, con una expresión de incomodidad.

—¿Qué haces?

El Jaehyeon de su tiempo probablemente le habría dado una caricia en la cabeza y le hubiera preguntado si estaba bien.

—Disculpa, creí que era... —alguien de mi familia, pero aquella persona no tenía ningún reloj colgante, ni anillo de poder.

Jaehyeon alzó una ceja —No se invitó a ningún Kwon a este baile, si es lo que te preocupa —inclinó la cabeza ligeramente hacia abajo, con las cejas alzadas—. Lo sabrías si fueras de esta época.

Jaehyeon era demasiado astuto, las consecuencias que podía traer si se enteraba de lo que hacían aquí. Él no tenía idea de que Klaus algún día morirá, y si se enterara ahora, sin duda sacaría su katana antes de que Taesung pueda invocar un portal.