La amante de Freen Sarocha

Cuatro días para la boda

Narra Becky.

Empiezo a contar los días cada vez con más nervios ¿por qué los días se pasan tan rápidamente? Nadie lo sabe, solamente se pasan volando.

Estos días han sido los más cansados, ya que, junto a Heidi y Billy he estado organizando los arreglos, el casino, los invitados y de más. No he tenido tiempo de checar mi celular, aunque no tiene caso, no recibiré un '' Te extraño'' de parte de aquella mujer, de Freen.

Billy me ha comentado que Freen no la ha estado pasando bien, no le he preguntado el porqué, no quiero que piensen que me sigo preocupando por ella, aunque en realidad es lo que más hago.

-No sé, sólo está muy estresada con eso de la boda, creo que es todo.-Billy levanto sus hombros para luego sentarse a lado de mi en mi sofá.

-Mmm ya veo...-Digo tratando de sonar con indiferencia.

-¿Todavía la quieres?-Me pregunta.

-A ti no te puedo engañar, claro que lo hago.-Lo volteo a ver directamente a los ojos.

-Ya veo.-Da un suspiro.-¿Qué me dirías si te digo que ella se muere por ti?-Me mira.

Trago saliva.-Debes estar bromeando.-Doy una risa nerviosa.

Billy me mira seriamente para luego dar una pequeña risita.-Si lo es, no he hablado con ella en varios días.

-No te creo, se hicieron tan amigos que quizás hablen todos los días.

-Estás en lo correcto.-Me da una media sonrisa.

Asiento lentamente.-¿Cómo está?

-Bastante bien a mi parecer, está feliz de casarse con la mujer que ama.-Me vuelve a mirar.

Siento un dolor en el pecho y antes de que empiece a llorar, cierro los ojos y doy un suspiro.-Ya veo.

-Es broma, tonta.-Se comienza a reír.

-No le veo la gracia, yo sé que si la ama.

-No lo hace, pero no te diré por qué se casarán.-Me da una media sonrisa.

Frunzo el ceño y lo miro.-¿Quieres decir que no se casan por amor?

-Freen si lo hace, se casa por amor a la persona que quiere y que no quiere que le hagan daño.

-Ya no te entendí.-Hago un gesto raro.

-No es necesario que lo hagas.-Se levanta del sofá y me revuelve el pelo para luego marcharse a la habitación.

Y ahí me quedo yo, más confundida que nunca.

¿Freen se casa por amor?

Narra Freen.

-¿Qué le parece esta señorita?

Me miro en el espejo y doy media vuelta para ver cómo me queda.-Si....éste será.

-Me parece excelente elección señorita.-Me sonríe Jayne, quién ha diseñado el vestido que llevaré en mi gran esperada boda.

-Lo sé, gracias Jayne-Le doy una palmada en el hombro y una sonrisa.

-No hay de que Sarocha.-Me devuelve la sonrisa.

Después de volverme a cambiar con mi outfit, salgo y me subo a mi coche y empieza a sonar mi teléfono.

-¿Ahora qué ocupas?-Digo con un poco de enojo.

-Sé más linda conmigo ¿quieres?-Se escucha desde la otra línea.

-¿Ahora qué ocupas cariño?-Le vuelvo a repetir.

-Así me gusta, necesito que pases a la pastelería, estoy aquí, necesito saber qué opinas sobre el pastel de bodas.

- Escoge el que quieras.

La verdad no quería ir, y mucho menos a estar escuchando las decisiones que toma Faye sobre un maldito pastel.

-No, Freen lo elegiremos juntas.-Se escucha algo molesta, pero la verdad, no me importa.

Soy un gran suspiro de resignación.-Voy para allá.

-Te amo.-Me responde.

-Ajá.-Respondo y cuelgo.

A los segundos mi teléfono vuelve a sonar, lo tomo algo molesto y respondo.

-¿Ya te dije que ya voy, ahora qué mierda quieres?

-Tranquilízate.-Me responde Billy .

Doy una pequeña risita.-Idiota. Pensé que eras la silicón.

Billy da una carcajada.-¿Quién mierda es silicón?

-Es Faye.-Le respondo.

-¿Qué mierda contigo?-No deja de reír.

-Si me voy a casar con ella al menos le tengo que poner un apodo divertido para divertirme.-Doy una risita.

-Estoy en la casa de Becky.-Me cambia rápidamente de tema.

-Ohh....ya veo.-Quiero aparentar que ya no me importa, aunque si lo hace.

-Ni tú ni ella lo hacen bien.-Me dice riendo.

-¿De qué hablas?-Le pregunto.

-Aparentar que no les importa, la una se preocupa por la otra.-Ríe.-Me dan ternura.

-Oh vamos, tengo que hacerlo. Aunque no quieras, es lo mejor para las dos.-Doy un suspiro.

-Lo que digas...¿la extrañas?-Me pregunta.

Y al instante se me vienen un montón de recuerdos que pasé junto a ella, todas las veces que sonreía y me hacía feliz, la primera vez que la escuché decirme que me amaba, aunque esa vez fue cuando la hice llorar y le partí el corazón, todos esos momentos que nunca se me olvidarán.

-¿Que si la extraño?-Doy un suspiro.-Cómo no tienes una idea, la necesidad de tenerla conmigo me está matando.

-Pero no puedes estar con ella.

-Ni me lo recuerdes...

Unos minutos después se escucha aquella voz que tanto conozco.

-¡Billy , te dije que no me gusta que dejes tus malditos zapatos en el pasillo!

Era Becky. Mi Becky.

-Creo que tu ex-amante está enojada.-Ríe.

-Vamos, eres un desorden.-Río también.

-¿¡Con quién mierda hablas que no me haces caso!?-Le grita Becky.

-Con Freen, mujer tienes que dejar de ser tan gritona.-Le dice Billy .

-¿Con Freen?-Al escuchar mi nombre salir de sus labios es lo que me alegra el día.

-Si.-Responde Billy .

-Oh...dile que se cuide mucho y que se la pase bien en su boda.-Dice algo nerviosa.

-¿Qué te preocupas por ella?-Billy da una risita.

-Idiota.-Responde Becky.

-Lo tomaré como un si.-Responde Billy y yo asiento.

Al escucharla simplemente me alegro el día.