No me gusta tu noviecita

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Narra Becky.

-Ya, ya, ya me levanté-Dije mientras apagaba la maldita alarma.

Me estire tanto como pude y bostece, me levanté de mi cama y me dirigí a darme un baño, abrí el grifo de la bañera y me di un relajante baño.

Me terminé de alistar, tomé las llaves de mi coche y mi celular.

Miro mi celular revisando que no tenga ningún mensaje y tiene mensajes de dos personas.

Heidi: Hola preciosa, ¿Cómo despertó mi novia?

Di una sonrisa de lado y suspiré para luego empezar a escribirle.

Becky: Muy bien cariño. Te veo en la empresa, besos.

Después de mandarle el mensaje a Heidi me dirigí a el contacto que me había mandado un mensaje.

Número desconocido: Hola nena, espero que no llegues tarde a la empresa, con cariño: Desconocida.

Fruncí el ceño, ¿Quién demonios era?

Así que me atreví a preguntarle.

Becky: Disculpa, tengo novia ¿Sabías? Además, ¿Quién eres?

Número desconocido: Nena fui la primera en enterarme que tenías novia, pero tu sólo eres mía cariño. Con cariño y deseo: Soy Freen.

Sonreí inconscientemente para luego morderme el labio.

Becky :Sólo suya señorita Sarocha. Espera, ¿Cómo conseguiste mi número?

Freen: Sólo mía nena. Bueno, soy tu jefa, se supone que por obligación tengo tu número de teléfono querida. Bueno basta de mensajes, estas llegando tarde al trabajo.

Rodé los ojos y apagué mi celular me dirigí a mi coche encaminándome a la empresa.

Entro y me dirijo a mi puesto, empiezo a teclear en el computador y de repente siento a alguien parándose enfrente de mí. Alzó un poco la mirada y me encuentro con una gran sonrisa.

-Hola-Sonríe.

-Hola-Le devuelvo la sonrisa.

-Tenía ganas de verte Becky -Le sonrió y bajo mi cabeza un poco.

-Basta Heidi, no quiero sonrojarme-Mi comentario la hace reír al igual que a mí.

De repente se abre la puerta del despacho de Freen, quien fija su mirada en Heidi. Se acerca a nosotras totalmente seria.

-¿Por qué tan feliz Heidi?-Le dice Freen, Heidi mira a Freen y sonríe.

-Porque tengo a la novia más hermosa señorita Sarocha-Sonríe Heidi de oreja a oreja, Freen aprieta la mandíbula y después da una sonrisa de lado.

-¿Quién es tu novia?-Le pregunta Freen.

-Esta chica de aquí señorita-Heidi me apunta y Freen me voltea a ver con una cara demasiado seria.

-Oh, bien por ustedes-Es lo único que dice Freen.

-¿Sabe qué es lo mejor señorita Sarocha?-Le pregunta Heidi a Freen.

-No lo sé.... ¿Qué es?-Freen frunce el ceño.

Heidi me tiende la mano para levantarme y ponerme a su lado, la miro muy confundida, al igual que Freen.

-Que Becky es sólo mía, y de nadie más...¿Verdad mi amor?-Abro los ojos como platos, dirijo mi mirada a Freen, esta echa una furia, Freen me mira fijamente esperando mi respuesta.

-B-bueno......A si es mi vida-Le sonrío y ella me da un beso en los labios.

Miro a Freen y sé que no me la voy a acabar en cualquier instante.

-Miro que estás muy confiada con la señorita Armstrong-Le dice Freen.

-Claro señorita, ella jamás me engañaría ¿Verdad?-Heidi me mira con una sonrisa.

-Claro que no, jamás te engañaría cariño-Le sonrío.

Freen da una pequeña risita y luego entra a su oficina.

Estoy más que muerta.

Narra Freen.

Entre a mi oficina echo una puta furia.

''Ella es mía y de nadie más ¿Verdad?''

''A si es mi vida''

Paso mis manos por todo mi cabello despeinándome completamente. Esto me estaba matando.

Becky sólo es mía, ella es mía. Apenas llevan un maldito día de novias y ya no aguanto más.

De repente tocan a mi puerta y desesperado grito.

-¿Qué demonios quieren?-Digo enojada.

-S-soy...soy Becky. ¿Me permite pasar?

Rápidamente me acomodo en mi asiento.

-Pasa.

Becky abre la puerta y al verme trata saliva, definitivamente estaba nerviosa.

Se dirige hasta mi escritorio dejando unos papeles.

-Es el escrito que dejo el señor Quincey, dueño de la empresa Candy's.

-Gracias-Es lo único que logró decir.

Becky da media vuelta y se dirige a la salida, rápidamente me paro de mi asiento y logro cerrar la puerta para acorralar a Becky.

-¿Q-qué demonios?-Dice Becky algo nerviosa.

-Creo que se te olvidó de quién eres nena-Le doy un feroz beso, le muerdo el labio inferior y ella da un gemido de dolor.

Me voy hasta su cuello y empiezo a chupar hasta dejarle un gran chupetón.

-Freen demonios, tengo que tapar esto-Se tapa el chupetón.

-¿Por qué demonios dijiste que eres suya?-Dije bastante enojada tomando la de la cintura.

-¿Qué querías que dijera?-Dijo con el ceño fruncido.

-No lo sé, pero no eso, tú eres mía-La pegué más a mí.

-Freen, es mi novia-Me dijo.

-Pues no me gusta tu noviecita, joder Becky me pone más celosa de lo que pensé-Pasó una de mis manos por toda mi cara.

Becky da una pequeña risita y yo la miro confundida.

-¿De qué te ríes?

-Es que no sé cómo puedes estar c

elosa, me encantas Freen-Me sonríe.

Doy una gran sonrisa inconscientemente y la tomo de las mejillas.

-Tú me encantas más-Le doy un beso.-Pero joder, Heidi es tan odiosa....

-Oh, vamos, no es mala chica. Pero ¿Te digo un secreto?-Se acerca a mi oído mientras yo pongo atención a cada movimiento que hace.

-Tú le ganas en todo-Susurra en mi oído para luego morder mi oreja y darme un beso en el cuello.

La tomo de la cintura acercándola a mí.

-Necesito urgentemente que vayas a mi casa nena-Le digo con la voz ronca.-Necesito darte a entender de quién eres.

Me sonríe.-En un 20 minutos te veo en tu casa-Doy una sonrisa, mientras ella se dirige a la salida, pero se da vuelta y me mira.

-¿Qué pasa?-Le pregunto.

-Suerte tapando ese chupetón señorita Sarocha-Da una risita.

Abro mis ojos como platos y rápidamente me tapo el cuello.

Da otra risa y abre la puerta de mi oficina.

-Soy sólo tuya mi vida-Y sin más sale de mi oficina dejándome excitada y con una estúpida sonrisa.

Está chica me va a matar.

La amante de  Freen SarochaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora