Capitulo 21

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Capítulo Veintiuno: Ahora o Nunca.


¡Basta, basta, basta!


Arrojé el celular con todas mis fuerzas contra mi bolso y salí corriendo, sin ningún rumbo fijo, simplemente un lugar a dónde escapar, el primero que encontrara serviría.


Y mientras corría debajo de la fuerte lluvia que azotaba New York y me empapaba junto con las lágrimas, me pregunté la razón por la que todo tenía que ser tan difícil. Todo lo que podía hacer era sentir ese vacío en el pecho. ¡Es todo lo que he sentido durante toda mi vida! Porque nunca nada en ella puede ser realmente bueno para ser verdad. Todo tiene su lado oscuro. Justin, mi familia... incluso yo misma. 


Toda mi vida he tenido que recibir las explosiones y simplemente aguantarlas y fingir que no me duelen. He tenido, todo el tiempo, que fingir una sonrisa irónica mientras me destrozaba por dentro. He tenido que mantener mi cabeza en alto cuando todo a mi alrededor se derrumbaba. 


¿Cuántas veces se puede romper un corazón antes que éste deje de latir?


Todos los días regresaba al pasado y repasaba cada detalle, preguntándome qué podría haber sido diferente para no haber caído en esto. Quizás si hubiera sido una chica buena, con buenas notas y buen comportamiento, no habría salido ese día llena de lágrimas y de furia a la calle y no me habrían secuestrado, entonces yo no hubiera perdido la memoria y no habría conocido a Justin, y entonces no estaría totalmente rota.


Porque simplemente no entendía la razón por la cual seguía amando a un hombre que lo único que lograba hacer era decantarme con una acción y romperme con una palabra. ¿Cómo era que mi corazón seguía resistiendo los golpes inesperados?


Quizás si hubiera sido una chica buena, mi familia no me habría odiado tanto, y entonces ahora estaría en una universidad de California. Tranquila con amigos normales y un novio que no tiene prometida y no es tan complicado de enamorar. Luego me casaría, tendría hijos y envejecería y moriría. Todo en su orden natural.


Ahora siento como si fuera imposible que me enamorara de nuevo.


Porque cada vez que me abro a alguien termino saliendo lastimada. No importa la forma, no importa el lugar o el momento. Siempre termino pagando mis errores.


El celular que había tirado contra el bolso y que ahora tenía la pantalla trizada porque había chocado con un estuche metálico, comenzó a sonar. La única razón por la que encontré un lugar para protegerme de la lluvia y contestar fue porque ése era el tono de Josh, y lo necesitaba más que nunca.


—¿Josh? —sollocé.

—Hola, nena. Sí, soy yo... ¿qué es lo que sucede? —preguntó, notando en seguida qué me sucedía algo. ¿Y si mejor me hubiera enamorado de él? Es solo tan hermoso, tan cariñoso y amable y me trata como si fuera de la realeza. E incluso él me olvidó ahora, lo que no es malo porque odiaba hacerlo sufrir.

—Todo, Josh. Simplemente siento que los últimos veinte años de mi vida no han sido mis años.

—Oye... ¿qué es lo que sucedió? ¿Él imbécil de Justin te hizo algo? Porque prometo que...

—¡él no tiene la maldita culpa! Y eso es lo que malditamente odio —chillé—. Porque yo puedo amarlo de aquí a la luna y eso nunca será suficiente porque él quiere a Larissa y yo no puedo hacer nada al respecto. Él jamás me elegiría.

—Él totalmente te elegiría, nena.

—Buen intento, Josh, pero es inútil a esta altura —suspiré entre sollozos—. Le dije que lo amaba, simplemente no lo pude evitar. Solo le dije que seguía amándolo y que no podía hacer nada con respecto a mis sentimientos, y salí corriendo. Tuve la estúpida leve esperanza de que él me seguiría o intentaría... tal vez... ¡No lo sé! ¿Estoy loca, no es así?

—Claro que estás loca, nena. El amor vuelve locos a todos.

—A mí me va a llevar directo a un manicomio.

—Oye... si hubiera un manicomio para enfermos de amor, entonces te vería allí. Escucha, _________(TN). Lo amas, y puedo asegurarte por los mil demonios del infierno que él te ama a ti también.

—Imaginemos que lo hace. ¿Por qué está con Larissa?

—No puedo responderte a eso, pero nunca lo he visto mirarla como te mira a ti cuando estás cerca de él.

—¿Y cómo es eso? 

—Como si fueras la única persona que existe en el universo.

—Él no hace tal cosa.

—Cree lo que quieras, solo creo que deberías poner las cartas en la mesa.

—¡Le dije que lo amaba! —volví a chillar.

—Estoy hablando de todas las cartas, dulzura. Estoy hablando de que vayas con él, y que le digas que lo amas, pero que no vas a esperar más por él y que si simplemente decide dejarte ir o retenerte que lo decida ahora pero que no eres un objeto ni algo que pueda ser desechado. Dile que vas a seguir tu vida con o sin él dentro de ella, y que luego de esto, él no va a tener ninguna otra oportunidad para tenerte. Es ahora o nunca, _________(TN), es el mensaje que le tienes que dejar claro a Justin. Si lo haces, entonces él jamás va a volver a alejarte de su lado.

—Demonios, eso es tan demente y tan... cierto —solté el aire contenido—. Sabes que él no va a retenerme a su lado, Josh... pero por otro lado creo que si simplemente me obligó a mí misma a cerrar ese capítulo de mi vida... todo va a estar mejor.

—Entonces no hay nada que te detenga. Ve, y dile, como sea.

—Estoy mojada y con el maquillaje corrido —sonreí tristemente.

—No preguntaré, solo ve a arreglarte primero, luego vas a ir a hablar con él y que sea lo que dios quiera.

—Entonces... eso es, simplemente —dije, más para mí misma que para Josh—. No sé si pueda soportar otro rechazo.

—No tendrás qué, créeme—dijo tan seguro, que casi hizo que me tranquilizara.


Casi.


—Bien, voy a hablar con él. Gracias Josh, te llamaré para contarte lo que sea que suceda.

—Suerte nena, te quiero.

—Y yo a ti.


Corté el celular y lo metí de vuelta en mi bolso. Había dejado de llover y era seguro salir de mi escondite, porque por primera vez iba a ir por el todo o por el nada. O cerraría el capítulo más importante de mi vida, o comenzaría la segunda parte. Una mejor y más colorida.


¿Cuál de las dos opciones era más probable?



Olvidando Recuerdos |Justin Bieber|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora