Epílogo: El Primer Recuerdo.
Mientras la cascada corría a través de las rocas con un suave susurro y reflejaba al sol formando un pequeño arcoíris, podía escuchar el rumor de las risas de Anastasia y Lucy, aunque no estaba muy segura de dónde estaba Travis, pero saber dónde él se escabullía era, la mayoría de las veces, una gran hazaña. Con cada año que pasaba, sus formas de volverme loca iban aumentando, y a la edad de siete años ya sabía perfectamente qué escondites usar para hacer que perdiera la cabeza buscándolo.
No podía decir que regañarlo sirviera, porque cada vez que lo hacía, Justin estaba riéndose detrás de mí y eso solo hacía que Travis adquiriera un poco más de ganas de ser un revoltoso de primera. Al fin y al cabo, terminaba alentándolo.
—Mira mami —Anastasia alzó una de sus muñecas, mostrándomela. Le había cortado el cabello con las tijeras de plástico y ahora el cabello de la muñeca solo era una maraña de algo que parecía de todo menos pelo. Aun así sonreí.
—Te ha quedado guapa —le guiñé un ojo y Anastasia chilló de felicidad.
—¡Te dije que le gustaría a mamá! —ella le sacó la lengua a Lucy, que frunció el ceño. Lucy solo tenía cinco años, un año menos que Ana y cinco menos que Travis, pero podía presentir que ella sería la más madura de mis hijos en poco tiempo, si es que no lo era ya.
—Ella solo intenta ser amable —repuso Lucy, firme—. Eso no merece llamarse cabello, es más un enredo raro de algo.
—No es cierto —chilló Anastasia.
—Claro que lo es, ¿necesitas algún otro argumento? —Lucy frunció el ceño levemente.
Me reí. Estaba segura de que ella sería una futura abogada, igual que su padre, porque siempre defendía sus opiniones con palabras enredadas (cortesía del vocabulario de Justin) y mareaba fácilmente a Travis y a Ana, hasta que al final estos terminaban por rendirse y ceder ante Lucy por falta de entendimiento o porque simplemente se aburrían muy fácil, en cambio Lucy se centraba en cualquier cosa que hiciera y jamás lo dejaba hasta que probara que tenía razón. A veces me preguntaba si existía la posibilidad de que fuera mayor de lo que en realidad era.
—¡Mamá! —Travis gritó a lo lejos. Me giré a verlo y me encontré con un feliz niño que venía soltando una enorme carcajada mientras apuntaba a su padre. ¿Qué demonios...? ¿Otra vez?
—Pensé que habíamos hablado sobre las apuestas —fruncí el ceño a ellos cuando estuvieron más cerca.
—Prometo que fue su culpa —murmuró Justin, sonriendo con esa sonrisa que lograba derretir a cualquiera.
A veces parecía que tenía cuatro hijos y no tres.
—¿Qué fue esta vez? —rodé los ojos.
—Papá dijo que no me atrevería a saltar de la roca al lago —dijo Travis, como si estuviera orgulloso de eso.
—Santo Dios, Justin Bieber, ¿¡Lo hiciste saltar de una roca!?
—¡Solo fue de un metro, lo juro! —levantó sus manos como si lo estuviera apuntando con una pistola—. Sabes que no habría hecho para que se lastimara. Por Dios ________(TN), seguro es más pequeño que la rampla que tienen en su piscina.
ESTÁS LEYENDO
Olvidando Recuerdos |Justin Bieber|
Teen FictionSegunda temporada de Recuerdos Olvidados Te das cuenta de que en serio amas a alguien cuando no lo has visto en tres años y no has conseguido olvidarlo. ________(TN) Smith ha pasado por muchas cosas en su vida, desde secuestros, accidentes y enamora...