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17

La oficina permaneció en un silencio que poco a poco le rompía más el corazón a Katherine, ella es de las personas que decían que el silencio también contaba como respuesta. Siguió arrodillada en el suelo, desnuda, con frío, el corazón roto y con ganas de correr a los brazos de su hermano o padres, quería pensar que SeokJin no la había oído bien porque habló bajo o algún tonto motivo para excusarlo, como siempre, pero la realidad era que Kim estaba en su silla observando la espalda desnuda de su amiga, ver como se le marcaban las costillas y un poco la columna vertebral le daba algo de impresión; se perdía en esos pequeños lunares casi desapercibidos y empezó a contarlos con tal de no responder la pregunta de la menor, ¿Cómo le diría que aquel acto frente a todos sólo fue una advertencia para que Young Sun vea que lo puede perder en cualquier momento?

Habían pasado una noche fantástica, vieron películas de terror en la cama de la mayor mientras compartían mimos que no tenían intenciones más allá de darse amor y un tiempo para ellos. Se podía decir que era una de las pocas veces en las que estuvieron solos y no llevaron las cosas más allá, pero un tema de conversación surgió y se trataba de una posible separación, de verdad era la primera vez que Young Sun estaba lúcida y pensaba con claridad tanto para ella como para el hombre que dice amar, que lo mejor para ellos quizá era separarse y si la vida los quería mucho podían volver a juntarse en un futuro, estando mejor mentalmente los dos, sin necesidad de sustancias de por medio ni rivalidad a la mejor amiga de Kim.

Pero obvio que él no lo tomó así.

SeokJin pensó que con eso quería terminarle para poder engañarlo sin remordimiento alguno, así que quería hacerle saber que si lo dejaba se perdía de un gran hombre el cual nunca volvería a encontrar. Lamentablemente la que salió lastimada en todo esto era Katherine, a quien la habían incluido en una estúpida venganza y hasta Young Sun comenzaba a sentir lástima por ella al tener como mejor amigo a SeokJin. Lo peor era que Kim amaba a Kate, siempre estuvo para él y lo hacía reír la mayoría del tiempo, pero nunca se puso a pensar que él nunca había hecho de mejor amigo, jamás se sentó a escuchar algún problema de ella o simplemente pasear sin necesidad de hablar de sus problemas con Young Sun.

⎯ Entiendo.⎯ terminó diciendo una avergonzada Katherine mientras se levantaba del suelo. Tomó su ropa y empezó a vestirse dándole la espalda a SeokJin. Las lágrimas querían salir de sus ojos pero no se permitiría mostrarse débil ante él.⎯ No me busques.

⎯ ¿Qué?⎯ contestó al instante, sintiendo una horrible sensación en su pecho al haber escuchado esas palabras. No podía quedarse sin su mejor amiga, no.⎯ Kate, creo que estás confundiendo las cosas.

La pelirroja se dio media vuelta y contuvo las ganas de decir un comentario irónico porque ahora SeokJin sí le contestaba, ahí entendió que el verdadero miedo del mayor era quedarse solo, no que ella lo abandonara. Si se iba Katherine no pasaba nada porque tenía 30.000 amigos más que estaban en las mismas circunstancias que él, el problema era que de todos esos amigos solo Kate estaba de verdad con él y lo quería en serio, para su buena o mala suerte.

⎯ En dos días viajaré a Nueva York para mi pasarela con Vogue, no puedes dejarme ahora.⎯ dijo con un tono lastimero, la menor evitó el gesto de rodar los ojos y solo suspiró.

⎯ Bueno, pues que te vaya bien en el viaje y la pasarela.

Después de sus palabras salió de la oficina, dejando atrás el ramo de rosas precioso y un SeokJin que la llamaba desde su lugar ya que al estar sin ropa no podía correr detrás de la chica. Las ganas de llorar la estaban consumiendo pero al ver la hora en su teléfono hizo un pequeño puchero con sus labios al notar que no faltaba mucho para que sea la hora de entrada en su pésimo trabajo, así que con las pocas ganas que tenia se dirigió a aquel lugar donde apenas le daban dinero pero aunque sea podía distraerse.