739 86 5
                                    

━━━━━━━━ ⇜ ━━━━━━━━

"Sintió una dura erección".

-A ver... -pensó. -Debo terminar con él, pero no puedo porqué... -suspiró Bill.

"Es el chico que cualquier chica popular como yo quisiera tener, amable, atento cariñoso, galán, guapo y terriblemente sexy".

Bill frunció el ceño no se merece que en cierta parte le termine.

"Entonces por eso no puedo, pero debería terminar porque me aburre lo cotidiano, me aburre lo normal, yo quiero otra cosa..."

Sonó su celular, lo miró mientras Bill trataba de analizar las palabras que le había dicho.

-Debo irme, adiós Kate.

Leah se despidió de él, y se perdió en el camino del campus completamente opuesto a la dirección de sus habitaciones.

La luna llena se asomaba no tan temprano como de costumbre en california, la luz de esta se escapaba por la ventana que había entre las camas de Taylor y Jade.

Trató de hacer el menor ruido posible, al entrar todas dormían, y eso era obvio ya que era bastante tarde.

Las palabras de Leah resonaron en su mente:

Me aburre lo cotidiano

Me aburre lo normal.

¡Su novia era una caja de sorpresas!.

¿Él no era cotidiano o sí?.

No claro que no.

Siempre trataba de ser diferente y no aburrir a Leah, pero al parecer lo había hecho bastante mal, ya que ella quería terminar con él.

No sé explicaba en que momento su relación estaba sufriendo una: "Crisis", o en que momento Leah empezó a aburrise de él, empezó a esquivarlo, o a mentirle.

¿Cuándo había sucedido aquello?.

No encontró una respuesta.

Agradecía haber entrado al internado a observar a Leah, porque si no fuera así, estaría afuera en un tonto trabajo, creyendo que su novia, era santa de su devoción.

Creyendo que ella lo extrañaría de la misma manera en que él lo haría o creyendo que ella lo querría de la misma manera en que la quería él.

Se sentía tan tonto, tan idiota.

Se miró al espejo del baño y deseó sacarse la molesta peluca, lo hizo.

Se colocó sus boxers y una camiseta sencilla negra, y un suspiró de alivio resonó solo en su mente.

Volvió a observar a la luna desde la ventana de las chicas.

La luna tan sencilla, y tan linda, no como las chicas, tan complicadas y hermosas.

La pelinegra Taylor estaba acostada de la misma manera tortuosa sobre su cama.

Con unas bragas negras y su tipíca blusa corta.

Tuvo el impulso de acercarcele y lo hizo, su piel clara, a la luz de la luna, se veía apetitosamente comestible, suave y dulce.

Su pelo caía armoniosamente sobre la almohada, esparciendose entre sí, su rostro tenía una expresión neutra.

La miró de arriba hacia abajo, las piernas de aquella chica lo atraían hacia cometer un montón de barbaridades que lo pondrían al descubierto.

Le daban ganas de enredarse entre esas torneadas piernas, de acariciar ese desordenado cabello y de besar aquel apetitoso tatuaje sobre su cuello.

¡La chica estaba condenadamente buena!.

Se hincó a un lado de ella, observando desde un angulo mejor, el color y forma de sus labios, rojos carnosos y con una forma hermosa.

Inconcientemente llevó sus manos hacía sus labios, acariciandolos suavemente por encima, sin hacer el menor movimiento en falso, porque podría despertarla.

Aquella mano exploradora fué bajando hasta su cuello, tocando su hermosa piel.

Descendió llegando hasta el valle de sus senos, aquella blusa era muy delgada, por lo que sus pechos se marcaban muy bien, los tocó por encima, aguantando el deseo de meter en su boca uno de ellos.

Llegó hasta su cintura y támbien la acarició lentamente para luego llegar a aquel trasero redondo y bronceado.

Sintió una dura erección...

Detuvo su paseo por aquel curvilineo cuerpo y volvió a mirar su rostro, sin saber muy bien la razón se acercó a ella, rozó sus narices y aspiró su hermoso olor a vainilla.

Acercó sus labios, a los de ella y formó un pequeño beso, uno tierno, sin movimiento un dulce roce de labios.

Se separó de ella al notar como se movía lentamente.

Asustado por lo que acababa de hacer se metió al baño a arreglar nuevamente el problema de su erección.

━━━━━━━━ ⇜ ━━━━━━━━

-¿Haz tenido relaciones con Leah?. -le preguntó Tom.

-No. -suspiró. -No me dice nada del tema. -No quiere nada de sexo, ningun polvo. -¡Mierda!. -bufó.

-Quizás es mala. -se burló.

-O quizás simplemente no quiere.

Trató de defenderla.

-Nisiquiera alguna erección me ha causado. -se rió amargamente.

-¿Nada?.

Bill negó con la cabeza.

-Sabes...

Él volvió a negar.

-Dejame terminar hombre. -rió. -Cuando tienes más de alguna erección al tan solo ver o tocar a alguna chica, significa que esa chica te tiene loco, te tiene soñando amigo, cuando ves a una chica y no reprimes las ganas de que te monte, significa que esa chica no sale de tus pensamientos.

Se dió cuenta que durante la semana, no se había fijado en la pelinegra por estar atento a su novia hasta ahora.

No podría ser... ¿O sí?.

━━━━━━━━ ⇜ ━━━━━━━━

𝗽𝗮𝗶𝗻 𝗼𝗳 𝗹𝗼𝘃𝗲 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora