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"¿Somos los mejores amigos de siempre?".

Para cuando estacionó frente a la casa de la pelinegra, ya había cortado la llamada y se sentía más tranquilo al pensar que las cosas con su prima habían quedado claras.

Le avisó a Taylor que estaba afuera y ella segundos después salió de su casa.

-Ni loco me arriesgaba a que tu padre me golpeara esta vez.

Bill comentó en cuanto ella entró.

-Hola, ¿Cómo estás?.

-Es mejor no arriesgarse con uno de la milicia.

Taylor le sonrió y se acercó a él.

Esperó ansioso que ella le diera un beso en la boca, pero no recibió más que el suave roce de sus labios con su mejilla.

-Muy bien, ¿Y tú?.

Le contestó al separarse.

-Ah. -la miró. -Bien, si bien. -aseguró mejor. -¿Te molestaría que invitara a Tom y Jade?.

-Claro que no. -acarició las puntas de su cabello. -Sólo espero puedan venir.

-Tendrías que llamarlos tú.

Bill le sonrió para convencerla.

-Tom está enojado conmigo, no me habla.

Él murmuró en tono seco al recordarlo.

-También espero que vengan.

Ella lo miró fijamente y Bill sintió aquella mirada.

Le devolvió el gesto y se quedaron así unos segundos sin saber que hacer, o por lo menos ella.

Ya que Bill sabía muy claro que quería hacer, pero lastimosamente ya no podía.

Ella llamó a Jade que por coincidencia estaba con Tom, la idea les resultó bastante buena sólo por el hecho de que Bill no había sido mencionado en la conversación, no por Taylor.

El camino hacia el cine fué bastante armonioso si así podía llamársele.

Conversó con Taylor sobre el internado y lo contenta que ella había estado por recibir buenas notas, él la había felicitado y luego habían conversado sobre su trabajo, habían tocado todos los temas donde ellos no estaban involucrados sentimentalmente y en cierta parte el pelinegro le agradecía.

Llegaron al cine y Bill notó por un momento la sorpresa de Tom al verlo, luego vino la seriedad.

-Hola.

Y saludó él amable.

Jade le sonrió y besó su mejilla en cambio Tom a penas lo miró y asintió con la cabeza.

-¿Entramos?.

Las chicas decidieron asentir, luego de comprar las entradas y palomitas, disfrutaron de la película.

𝗽𝗮𝗶𝗻 𝗼𝗳 𝗹𝗼𝘃𝗲 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora