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–¿Qué es lo qué te sucedió con Brianna?–Rachel fijó la mirada en sus pulgares, los cuales jugaban entre sí.

Las puertas del elevador recién se habían cerrado, lo cual significaba que se encontraban en un momento privado donde finalmente ella podía cuestionarle sobre lo último que había logrado oír.

En el instante en el que Peter escuchó la pregunta proveniente de la castaña, exhaló una gran bocana de aire antes de armarse de valor para dirigirle la mirada. De todas las preguntas que ella pudo haber hecho; escogió una que lo había tomado desprevenido, ya que él no había contemplado el hecho de que ese tema se fuese a mencionar en alguna ocasión.

–Estuvimos en una relación hace un tiempo.–se rascó la nuca debido al nerviosismo.

–¿Qué tipo de relación?–levantó la mirada para verlo fijamente a los ojos.

–Éramos novios, Rachel.–hizo una mueca de preocupación al revelarle uno de sus secretos laborales.

Mientras Rachel se limitaba a guardar silencio dado que estaba procesando la información revelada, el rubio observaba atentamente sus facciones en busca de algo que le demostrase lo que la castaña se encontraba sintiendo.

–Lo que hubo entre ella y yo no fue la gran cosa, ni siquiera duró nuestro noviazgo.–trató de agilizar la tensión que se había comenzado a sentir entre ellos.

Peter sentía la necesidad de hacerle entender que aquella relación no había sido significativa para él, sin embargo, Rachel se encontraba dudando de sus palabras.

–¿Cuál fue la razón por la que terminaron?–se interesó en obtener más información.

–¿Es necesario hablar sobre ello?–bufó antes de rodar los ojos.

Peter detestaba tener que conversar sobre la relación laboral que había tenido alguna vez porque consideraba que era una perdida de tiempo para quien quería conocer sobre ella.

–Yo te conté sobre mi relación–se señaló a ella misma con el pulgar izquierdo–no veo el porqué tú no me puedas hablarme de la tuya.–colocó una mano sobre su cadera en espera de una respuesta.

–¡Bien!–levantó las manos en señal de rendición–en el trabajo no pueden haber relaciones amorosas porque se viene a trabajar, no a socializar. Entonces, no sé como, pero los rumores le llegaron a Brenner.

–¿Los obligaron a finalizarla?–Rachel interrumpió con el rostro lleno de intriga.

–Teóricamente, sí. Aunque, para ser sincero, no la hecho de menos.–se encogió de hombros para restarle importancia.

Rachel asintió con la cabeza antes de que las puertas del elevador fueran abiertas logrando exponer un pasillo larguísimo con paredes blancas las cuales eran acompañadas de azulejos del mismo color. Definitivamente, el ambiente se percibía algo distinto al que ella se había comenzado a acostumbrar.

Justo cuando Rachel dio un paso para salir del cubículo, fue detenida por la mano de Peter.

–Eres la doctora Williams ¿De acuerdo?–la sostuvo de la muñeca para que esta no saliese antes de tiempo.

–De acuerdo.–lo miró a los ojos para luego pasar la mirada a los dedos que estaban enroscados en su muñeca. Tras esto, el rubio optó por soltarla.

–Vamos.–Peter fue el primero en salir del ascensor con la intención de atravesar el corredor.

Debido a que Rachel era muy observadora, mientras avanzaban, se había percatado de un par de cosas que quería aclarar. A pesar de esto, ella optó por suprimir las ganas de soltar una de sus tantas cuestiones para no saturar a Peter.

Us | Peter BallardDonde viven las historias. Descúbrelo ahora