Capítulo 22

15 2 0
                                        


¿Han escuchado eso de que antes de dormir es cuando mas vueltas le damos a los acontecimientos de nuestra vida?

Pues lo he confirmado y he llegado a la conclusión de que todo es tan complicado, que no sé cómo no he colapsado aun.

Pero ¿Todo es a raíz del plan? –me pregunto–, ¿O es en relación a algo mas?

Y por mas que lo pensé y pensé, no conjeture ninguna respuesta, solo conseguí agotarme mentalmente y terminar durmiendo pasadas las doce.

- Algo callada hoy –comenta Selena mientras bajamos del auto.

- Pensativa diría yo –aludo.

Nos despedimos de papá y nos adentramos en el edificio, ella se aparta de mí y saluda a algunas personas de las cuales solo reconozco a Lila, Mathias, los otros dos chicos que no me presentó, el hermano de Marilyn, la otra chica nueva y sus dos amigas.

- Hola, Selene –añade una voz femenina detrás de mí.

- Hola –me vuelvo para en dirección a esa voz femenina–, ¡Marilyn! –le sonrío.

- ¿Vamos al salón? –inquiere.

- Sí, claro –asiento.

- Tenemos hermanos que van en el mismo año –añade señalando al grupo de chicos.

- Si –sonrío al ver a su hermano–. Tu hermano practica baloncesto ¿Verdad?

- Si –se ruboriza–. No imagine que lo sabias

- Pues claro que lo sé –toco su hombro–. ¿Cómo no iba a saberlo? Él chico es bueno –ni idea de si lo es–, y es tu hermanito. Su nombre es... –dejo la oración a medias.

- Marcus –añade.

- Marcus –repito en voz baja y le hecho una última mirada al grupo antes de entrar al aula de clases.

Me sorprende ver a Irinna y a Harry sin resaca, parece que han pasado una noche relajada y que han descansado. Bueno parece que ellos no se quedaron despiertos hasta tarde.

Marilyn se sienta y yo me dedico a dar una mirada rápida a mis compañeros presentes donde solo distingo a Klay, Jefferson, Irinna, Harry, Marilyn, Sofia o Sophia la chica de lentes y su amiga con cabello chocolate malva, Tammy si no me equivoco. Una vez terminado ello, me dejo caer en mi asiento.

- Así que si lo tomaste en serio –agrega Harry al notar que divise a mis compañeros.

Irinna se ríe y me toca el hombro.

- Tienes trabajo –sonríe–, aún queda año para eso.

Me encojo de hombros y Katherine entra al aula, sin saludar se sienta en su lugar, sube la capucha de su suéter y se apoya en el asiento.

Harry, Irinna y yo intercambiamos miradas.

- Parece que fue muy serio –susurra Harry.

- ¿Sabes que sucedió? –inquiero.

- ¿Kat no te dijo? –Irinna se sorprende. ¿Qué saben ustedes que yo no? Me pregunto.

- No quiso hablar y parece que hoy tampoco... –vuelvo a mirar a mi amiga.

- Será mejor que ella misma te lo cuente –añade Harry

El profesor llega y nuestra clase inicia.

InfalibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora