El lado oscuro del amor [TERMINADO✅]

CAP 32| Fragmentos Rotos

El sol se filtraba por las cortinas de mi habitación, invitándome a enfrentar un nuevo día. Con un suspiro, me levanté de la cama, pero mi mente seguía atormentada por las palabras de Uriel la noche anterior. ¿Realmente quería ser como mi padre? ¿Un hombre millonario que se corrompía en el poder y el dinero?

A lo largo de mi vida, siempre había admirado a mi padre. A pesar de nuestras recientes discusiones sobre mi sexualidad, sabía que él me quería y se preocupaba por mí. Siempre lo vi como un ejemplo a seguir, alguien exitoso y respetado en el mundo de los negocios. Pero ahora, esa imagen empezaba a tambalearse.

Me dirigí al baño y me observé en el espejo. A través de mi reflejo, traté de encontrar respuestas a las preguntas que me acosaban. ¿Cómo podría reconciliar la idea de que mi padre, a quien tanto admiraba, pudiera estar involucrado en prácticas corruptas? ¿Era posible separar el amor que sentía por él de la decepción y la desconfianza que ahora empezaba a brotar en mi interior?

Mientras me lavaba la cara, traté de ordenar mis pensamientos. La relación con mi padre siempre había sido complicada, y esta nueva revelación solo la complicaba aún más. A pesar de nuestras diferencias, había momentos en los que podía ver el amor en sus ojos y la preocupación genuina por mi bienestar.

Salir del baño y enfrentar el día se volvía cada vez más difícil. La duda y la confusión se entrelazaban en mi mente, impidiéndome tomar una postura clara sobre mi padre y su comportamiento. ¿Hasta qué punto estaba dispuesto a creer en su inocencia? ¿O debía enfrentar la posibilidad de que su éxito estuviera manchado por actos corruptos?.

Caminé por los pasillos de mi casa, perdido en mis pensamientos. A medida que el tiempo pasaba, mi corazón se llenaba de una mezcla de amor, dolor y desconfianza. A pesar de todo, mi padre seguía siendo mi padre, y la idea de enfrentar la posibilidad de que fuera culpable de algo tan grave me aterraba.

Mientras estaba en la cocina, preparando mi almuerzo, escuché el sonido de la puerta principal abrirse. Levanté la mirada y vi a mi padre entrar en la casa. Nuestros ojos se encontraron por un instante, pero noté que algo en su expresión cambió rápidamente. Parecía sorprendido o incluso sospechoso. No dijo una palabra y se dirigió directamente a su estudio.

Me quedé perplejo ante su extraño comportamiento. ¿Qué podría haberlo llevado a actuar de esa manera? Intenté no dejar que la incertidumbre se apoderara de mí y continué con mi tarea en la cocina, pero no pude evitar sentir una sensación de intriga y preocupación.

Mientras cortaba algunos vegetales, escuché el timbre del teléfono en el estudio de mi padre. Se acercó rápidamente y contestó la llamada en voz baja. Aunque estaba a cierta distancia, pude notar una tensión en su rostro y en su tono de voz. Aquella llamada parecía haberlo perturbado aún más.

Mis sospechas se intensificaron. ¿Qué estaba sucediendo realmente? La combinación de su reacción inicial al verme y su posterior llamada telefónica despertaron mi curiosidad y desconfianza. Empecé a considerar la posibilidad de que hubiera algo más en juego, algo que mi padre no quería que supiera.

Decidí darle espacio y tiempo para que se calmara, y yo también necesitaba procesar mis propios sentimientos y pensamientos. Terminé de preparar mi almuerzo y me senté en la mesa, perdido en mis reflexiones. 

Mi relación con mi padre se volvía cada vez más compleja, y me enfrentaba a una difícil encrucijada: ¿seguir confiando en él ciegamente o indagar más en la verdad que parecía ocultarse?.

Mientras estaba absorto en mis pensamientos, mi madre entró en la cocina y se acercó a la mesa donde estaba sentado. Su expresión reflejaba una mezcla de determinación y preocupación. Sabía muy bien a qué se refería. Era otro intento de ella por abordar mi orientación sexual y tratar de convencerme de que estaba equivocado.