El Regreso de la Secta del Monte Hua (Novela)

🌸027🌸

– El Monte Hua gana una fortuna (2)

— Jumm —.

Hyun Jong suspiró suavemente mientras observaba la luz del sol asomando por la ventana.

Para algunos, esa luz solar puede ser el comienzo de un día agradable. Pero para aquellos que viven en tiempo prestado, no había nada más resentido que la luz del sol que da comienzo a otro día.

«Es de mañana otra vez.»

Una vez más, un nuevo día ha comenzado.

Ya han pasado dos días. Y quedaban cinco días más para pagar la enorme deuda.

Cinco. Sólo cinco días más.

Hyun Jong cerró los ojos en silencio.

«Cinco días.»

Si no podía preparar 100.000 nyang en este corto período, entonces el Monte Hua caería en sus manos.

Hay tres cosas esenciales en la vida: comida, ropa y, finalmente, refugio.

Aunque podrían vivir aún si perdieran su residencia, los que se quedaran en el Monte Hua tendrían que intentar encontrar una forma diferente de llevar sus vidas. La Secta del Monte Hua ya no podría llamarse Monte Hua.

Puede haber algunos que deseen llevar su nombre y suceder a la voluntad del Monte Hua. Durante muchos años, el Monte Hua fue considerado una secta prestigiosa; seguramente, algunos desearían mantenerlo.

Si una secta imponente con miles de discípulos se desmorona un día y sólo puede albergar a unas pocas docenas de estudiantes, y si luego pierde su hogar y es exiliada, ¿no podemos decir que ha sido completamente destruida?

Los que no puedan quedarse aquí no tendrán más remedio que dispersarse. Habrá gente que lo siga durante un tiempo, pero a medida que su vida se vuelva más difícil, ¿no encontrarán simplemente otro trabajo?

Y gradualmente...

«No.»

Hyun Jong sacudió la cabeza violentamente.

«Este no es el momento de pensar tan débilmente.»

Todavía le quedaban cinco días. Podía proteger el Monte Hua si encontraba alguna manera de reunir la cantidad necesaria.

Él es el líder de la secta. Y no se rendirá hasta el día en que el Monte Hua desaparezca. Todos los demás pueden darse el lujo de renunciar, pero él no puede vacilar.

Hyun Jong levantó la mano y se frotó la cara.

Tal vez podría llegar a todos los que tuvieran una relación tan estrecha con el Monte Hua. Las historias sobre el declive del Monte Hua han circulado por todo el mundo. Sólo necesitaba encontrar una persona capaz que estuviera dispuesta a ayudarles.

Sólo una persona...

Hyun Jong se rió suavemente con burla.

«¿Ayudarnos?»

Si alguien quisiera ayudar, ya lo habría hecho. Incluso cuando el Monte Hua tenía mayores esperanzas que ahora, ni una sola persona les ayudó.

Y ahora, ¿quién vendría a prestar una gran suma de 100.000 nyang a una secta arruinada?

«Es tan agobiante.»

No se podía evitar o ignorar. Pero Hyun Jong tenía que sentir el peso cada día mientras crecía en él.

El miedo siempre presente de que la vida del Monte Hua sería cortada con su generación. Rezaba y rezaba para que el sol no saliera cada mañana mientras luchaba por otra noche de insomnio.