Mr. Bridgerton, que tenga una excelente tarde.

Capítulo 20

Colín Bridgerton se despertó sudando, su pecho subía y bajaba su respiración estaba agitada. Respiro profundo para calmarse. Cerro los ojos y vio el rostro de la culpable de que le ocurriera eso - Penélope - soltó en un hilo de respiración. Después de calmarse, se puso de pie, se vistio y pudo escuchar como su familia estaba desayunando en el comedor.

Sería un día de esos, dónde no pasaría nada extraordinario. Pues la adrenalina de la noche anterior era más que suficiente.

- Pero es que es sorprendente. - Kate no paraba de repetir la misma frase.

- Ella es magnífica. - Benedic. - ¿me han escuchado? Esa mujer es magnífica. Colín entro al comedor, miro a todos y tomó asiento.

- Su desayuno señor. - la asentaron un plato con comida y se dispuso a devorar en silencio.

Una charola de plata entro cargada por las manos de una de las sirvientas de la mansión.

- Señora Violet a llegado esto. - Violet miro la bandeja y tomo lo que le ofrecían.

- Veamos una invitación, otra invitación y - Violet no pudo evitar sonreír - un panfleto de lady Wishtledow... - El comedor quedó en silencio. Era obvio que querían saber que decía la revista de cotilleos de su ya famosa y bien conocida amiga Penélope Featherington.

- ¡Familia quiero saber todo! - Daphne entro y tomo asiento. - Me enterado de todo, ¡Pero que cosa tan descabellada! Y divertida he de admitir. - mostró una sonrisa pícara.

- Daphne, los puntos de vista se darán después de que madre lea el panfleto, mientras tanto, guarda silencio. - Anthony se moría por saber lo que había ocurrido en el baile.

- ¿Cómo? ¿No han leído el Wishtledow? Estoy

- ¡Daphne! Quieres cerrar la boca y dejar leer el panfleto a madre. - Anthony, Daphne cerro la boca y miro a su madre.

- ¡Por favor! Ya empieza a leer madre. Necesito saber que ocurrió. - Hayacinth. Eloise se aparecío en el comedor. Todos los miraron y ella miro a Daphne.

- ¿Tu qué haces aquí?

- He venido a

- ¡Pueden guardar silencio! - Gregory.

- Gregory, en la mesa no se grita. - lo reprendió su madre.

- Madre, puedes por favor leer la hoja y sacar de dudas a todos. - Francesca.

- ¿Qué hoja? - pregunto Eloise tomando asiento.

- ¡Ay ya por favor! ¡Siéntense, cállense y dejen escuchar a madre! - Grito Benedic. Anthony asíntio.

- Hola mis queridos lectores, ¿Me extrañaron? El baile de los Harrison a sido toda una fiesta glamorosa ¿No les parece? Pero vayamos por partes para que se enteren de todo lo ocurrido.
No me dejaran mentir que al entrar al salón una nube de olor a fresa los envolvía a todos ¿Lo pudieron sentir? Era una esencia de fresa traída desde América, especialmente para deleite de todos los invitados incluida está lady.

La orquesta, los bocadillos, el champagne y la limonada con un toque de toronja causaban una acidez deliciosa en el paladar. ¿La sintieron?

El salón estaba adornado con flores de muchos colores por que la condesa Harris es una dama colorida y en su manera tan espléndida de tratar a sus invitados nos pudimos dar cuenta que tan amable, bondadosa y dulce es, condesa Romina Harrison, a sido un gusto y un placer haber asistido a tan inolvidable baile y no, no lo digo por lo que voy a escribir a continuación porque simple y sencillamente los Harrison se esforzaron por dar un magnífico baile y vaya que lo han logrado.