Professional Killer - Winrina/Jiminjeong

Call me pretty or nasty

(Antes que nada me gustaría aclarar que Jimin es francesa, solo eso, sigan leyendo <3)

Aquella esbelta figura miraba por el gran ventanal del ático con una copa en la mano. Minjeong nunca se había dado al alcohol, pero aquella madrugada de finales de invierno agradeció profundamente la existencia del minibar de su sala de estar. La cabeza le daba vueltas por terrenos que no le gustaba explorar, y había pensado que beber sería una buena forma de relajarse, de no pensar en que podrían haberlas pillado, de no convencerse a sí misma de que hubiera sido así de no ser por Yu. Aquella mujer... La desconcertaba, la ponía nerviosa y le daban ganas de matarla todo al mismo tiempo y con la misma sonrisa brillante. Le había echado la bronca en cuanto habían vuelto al edificio, después de llamar al médico para Ning. La había llamado temeraria, irresponsable e insensata a gritos por el salón, y aquella estúpida... sólo se había encogido de hombros y le había contestado que eran cosas que ya sabía. No era de su agrado.

                     

Y a pesar de ello había vuelto. Minjeong aún se preguntaba qué clase de impulso la había hecho reandar sus pasos para ir a buscar a Yu, caminando directa hacia zona con peligro de explosión, hacia guardias de seguridad armados y lejos de Giselle y Ningning. Su corazón se saltó un par de latidos por su abrazo cuando quiso protegerla del C4, pero... sólo fue porque no se lo esperó, nada más. Era cierto que Yu era atractiva, y eso era algo que sólo un ciego podía negar. Tenía un rostro perfectamente proporcionado y unas facciones de locos, sumadas a un cuerpo atlético y trabajado, pero... lo contrarrestaba a base de arrogancia y estupidez.

                     

Minjeong sacudió la cabeza para alejar esos pensamientos y apuró su copa al ver a Giselle entrar en la sala, cansada. Observó en silencio cómo su amiga se servía un vaso de la botella más cercana y le echaba dos cubitos de hielo para beber de inmediato. Parecía mayor. Y cansada. Como si hubiera envejecido diez años en unas horas.

                     

- ¿Cómo está?

                     

- Se pondrá bien - afirmó Giselle para la tranquilidad de la otra -. Su cuerpo no ha reaccionado bien al cambio de temperatura. Le dio un golpe de calor en la caldera y al salir a la calle fue una bajada demasiado brusca. Tiene que descansar y se recuperará.

                     

- Menos mal - suspiró Minjeong poniéndole una mano en el hombro a su mejor amiga. Giselle no estaba bien, y era algo que se podía notar visiblemente -. Tú también deberías descansar, Gigi.

                     

Giselle rió amargamente.

                     

- Como si pudiera... - Hizo una pausa -. Cuando dijiste que no estaba bien a través del altavoz casi me muero, Jeong. Hubiera matado a esos tíos a puñetazos si hubiera sido necesario para sacarla de ahí. Me... entré en pánico. Mientras corría hacia el sótano no podía pensar en otra cosa que en lo imbécil que había sido con ella. Sé que soy una dramática, pero pensé que si Ningning no... no podría vivir sabiendo que estaba enfadada conmigo. Que me odiaba.

                     

- Ningning no es capaz de odiarte - negó Minjeong, y de verdad lo creía, y sabía que ella tampoco -. Aunque te lo merezcas, idiota.

                     

- Lo sé y... me siento mal por ello. Debería mandarme a la mierda y ya está.