Capítulo 15

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SAM

Encerrada en mi habitación mirando el inmenso vacío a mi alrededor. Neung vino hace un momento y me dejo una bandeja con el desayuno ¿o es el almuerzo? No lo sé, no tengo noción del tiempo, solo quiero dormir, quiero olvidarme de este dolor que siento, de este terrible vacío que siento en mi corazón.

¿Por qué? ¿Por qué me dejaste? Prometiste que estarías siempre conmigo y sin embargo, te has ido, me has dejado llorando y sufriendo tu ausencia, vuelve, por favor vuelve. Te necesito.

—Sam, tienes que comer algo, cariño. Vas a enfermar si sigues así —escucho la voz de mi abuela en mi espalda —Sam, por favor.

—¿Sigue sin responder?

—Si, no ha querido hablar desde que Zury murió. Me preocupa que enferme.

—Mi hermana estará bien abuela, Sam es fuerte.

—Lo sé, pero me preocupa que no quiera comer, ni hablar con nadie. Song, no podemos dejarla sola.

–Papá dijo que el doctor vendrá mañana a revisarla de nuevo.

—Su enfermedad no es del cuerpo, es del corazón. Sufre la partida de su madre.

—No debí irme, yo…

—Song, no te culpes. No sabíamos que Sam, estaría aquí. En todo caso, todos somos culpables por no estar con ella. —
Una lagrima corre por mi mejilla al recordar ese horrible día. Había salido temprano de la escuela y vine directo a ver a mi mamá como todos los días.

.....

Hoy se veía tranquila, en calma. Sonrió al verme entrar a su habitación y acaricio  mi rostro después de dejar un beso en su frente.

—Llegas temprano ¿no habrás saltado clases por venir, verdad?

—No mamá, nos dieron la salida y quise venir directo a verte y seguir con nuestra historia. ¿Dónde nos quedamos? Ah, si, justo aquí. —seguí leyendo mientras mamá cerraba sus ojos para dormir, estaba cansada. Llevaba dos años luchando contra el cáncer y ya no había más que hacer. Los doctores dijeron que solo podíamos tenerla cómoda y darle mucho amor.

—Sam

—¿Si? ¿Necesitas algo?

—Quiero que me prometas una cosa, por favor.

—Debo terminar el libro hablaremos después —no quería oírlo, no quería. Sabia lo que me pediría.

—Sam, por favor. No me queda tiempo.

—Aun hay tiempo mami tienes todo el tiempo y yo me quedaré contigo —le sonrió y ella toma mi mano.

—Mi niña pequeña, debes prometerme que serás fuerte, que no dejaras de sonreír porque tu sonrisa es lo más hermoso y sincero que existe. Siempre estaré cuidándote mi pequeña, siempre estaré contigo. Te amo, mi pequeña Sam, se fuerte mi niña.

—Te amo, mami —mis lágrimas comenzaron a fluir sin parar al ver sus ojos cerrar —mamá… mami debo terminar la historia… mami, despierta… mamá, por favor, no estoy lista, no estoy lista, por favor mamita. Abre los ojos, por favor, te necesito, mamá, te necesito, no soy fuerte, no soy fuerte. —mi vista se nubla. Todo se pone en blanco, solo siento un vacío, un dolor que inunda mi pecho. No soy fuerte, no puedo serlo no sin mi madre.

Jim y Tee vienen todos los días a dejar mis deberes de la escuela, no hablo con ellas, no hablo con nadie , no quiero saber de nada.

—Anda Fuzzy, hoy habrá fiesta en casa de mi primo Jay, tienes que ir.

Golpe de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora