Capítulo 8

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SAM

Despierto temprano, casi no pude dormir con la emoción de ver de nuevo a Mon, busco entre mi guardarropa qué ponerme. No quiero parecer vieja de nuevo y tampoco presumida, debe ser algo sencillo y casual.

Encuentro el ouffit perfecto, jeans de mezclilla y una blusa de seda negra, algo informal, adecuado para la universidad. Espero que a Mon le guste.
Subo a Miss Duapen y me dirijo a casa de Mon.

—Hola Mon —no, así no —Buenos días, Mon —no, así tampoco —¿Cómo dormiste Mon? —No, así tampoco… ¡Ayyyyy! ¿Por qué es tan difícil? ¡Solo tengo que decir hola!
Respira, Sam, respira. Todo va a estar bien, es Mon, la chica que te gusta desde hace cuatro meses ¿Cuál es el problema? Te odia y piensa que eres una chica superficial, pero ¿qué importa? Le demostraras la clase de persona que eres, pero ¿qué clase de persona soy? ¿Y si no le agrado? ¿Y si ya es muy tarde para disculparme? ¡Deja de pensar Sam! Solo llega, saluda y sé tu misma.

Estaciono frente a la casa de dos pisos y bajo del auto, el timbre esta frente a mi ¿Qué hago? ¿Lo toco o espero a que Mon venga? ¿Y si le envío un mensaje? No, lo mejor es tocar, lo hago y siento que mis manos sudan, muero de nervios.

Y ahí viene ella, se ve hermosa con sus jeans ajustados y su blusa rosa. Concéntrate Sam, recuerda. Solo di hola. ¡Tú puedes!

—Buenos días, Mon —no sé qué me impulsa a hacerlo, pero la saludo con un beso en la mejilla en cuanto sale.  Siento esa descarga eléctrica que recorre mi cuerpo como la primera vez que lo hice en el hospital.
De reojo veo que su hermano está observandonos y le pregunto por él. Se ve triste, se nota que no lo está pasando bien y me doy cuenta que se emociona al ver mi auto así que lo invito a que lo vea más de cerca. Richie parece un niño pequeño con un juguete que le gusta.

Mon, comienza a regañarnos por estar jugando y le pido que no sea aburrida, Richie se está divirtiendo. Veo que mi ojos bonitos esta haciendo pucheros y decido ir a dejar al chico a la escuela.

Richie entra por sus cosas y verlo me recuerda a mi cuando perdí a mamá, nunca es fácil perder a tu madre y menos en la edad que más la necesitas para que te aconseje, entiendo por lo que pasa y si puedo hacer algo por animarlo, lo haré.

—Eres impredecible Sam.

—Soy insoportable, extraña y ahora impredecible ¿Qué más soy para ti Mon? —siento la necesidad de acercarme a ella y decirle todo lo que siento. Quiero probar sus labios ¿Qué se sentirá besarte, Mon?

—Estoy… listo —¡otra vez!

—Vamos, se nos hará tarde —ella se separa demasiado rápido para mi gusto —¿quieres que conduzca?
 
—Mhm si

¿Qué demonios fue eso? ¿En qué pensabas Sam? Tomo aire y subo al auto, Mon y Richie ya están arriba. Me coloco el cinturón de seguridad y Mon, arranca el auto. ¿Por qué todo es tan difícil cuando estoy cerca de ella? ¿Por qué no puedo simplemente decirle lo que siento?

Mon, baja del auto y entra a hablar con un maestro de su hermano. Mientras la espero, salgo del auto y aprovecho para enviar un mensaje a mi hermana Neung.

Sam 8:10 am

<Soy un desastre>
<¡Ayuda! >

Neung 8:10 am
<¿Se trata de Mon? >

Sam
<Si>
<No logro pensar cuando estoy cerca de ella y ¡me estoy volviendo loca!>
<No digas lo mismo que todos, por favor>

Neung
<No sé qué te habrán dicho los demás, lo que yo te puedo decir es que si realmente sientes algo por ella no necesitas pensar mucho, solo actúa. Sé la amable y tierna Sam que yo conozco y adora a mi hija>

Golpe de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora