I'll protect you

XV

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Capítulo 15: La decisión final
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La vida en Ciudad Azulona no era algo que se podía catalogar como difícil bajo ningún aspecto, el ser el mayor centro turístico de la región le daba al lugar un Status muy elevado lo que le hacía ganar inversionistas provocando un aumento estratosférico en el empleo y por lo tanto en el nivel de vida de las personas. Sin embargo las cosas no eran tan sencillas como se ve detrás de la pantalla de un televisor, en los anuncios turísticos en internet o como lo pintan los turistas.

Al ser una gran urbe, Ciudad Azulona también tenía presente los problemas de toda gran ciudad. Los niveles de contaminación eran preocupantes, la gentrificación empezaba a ser un problema serio y había una alta tasa de criminalidad, sobre todo en las partes más pobres de la población. Definitivamente, vivir en Ciudad Azulona no era tan bonito como lo pintaban. Erika se dio cuenta de eso a las malas.

No había pasado ni una semana del incidente con el Team Rocket y las cosas ya no podían ir a peor. Desde ese día la seguridad aumentó drásticamente por órdenes directas de Lance por lo que las personas que se encontraban dentro de la ciudad en el momento del ataque no habían podido salir todavía de Ciudad Azulona puesto que se iba a llevar a cabo una revisión exhaustiva a cada persona del lugar para descubrir nexos con el equipo criminal.

Estas medidas no fueron del todo bien recibidas por parte de la población, menos en las zonas más marginales, las cuales eran el principal foco de alerta para las autoridades. Las personas estaban cada vez más inconformes con el régimen de Lance, no porque tuviera malos resultados, sino porque no podían permitir una violación así a su libertad, sin embargo no fue el único, ni el más criticado.

Erika fue la persona que salió en todas las portadas el periódico, encabezó artículos en internet e incluso la radio cuestionó su papel como líder de gimnasio. Nadie podía creer que una ciudad como Azulona tuviera un puesto de operaciones del Team Rocket en su atracción principal. Por supuesto que las conspiraciones de una supuesta alianza entre Erika y la banda no se hicieron esperar.

Erika no había salido de su habitación durante los tres días que pasaron entre el incidente y hoy. Su problema iba más allá de simples dudas sobre la calidad de su trabajo, tristemente era algo a lo que estaba acostumbrada en tan solo un año de haber asumido el cargo. El verdadero conflicto era el que provocó el entrenador conocido como Ash Ketchum, el cual era una especie de viajero del futuro que hizo el viaje para evitar una catástrofe mundial.

La historia era ya de por si fantasiosa en su concepto, y ella misma no la hubiera creído de no haber sido porque recuperó todos los recuerdos de su yo del futuro. Ese era el verdadero problema. No tenía ningún conflicto en guardar el secreto a Ash pero tenía una pregunta revoloteando su mente.

Erika: '¿Por qué a mi?'

De hecho la respuesta era bastante sencilla, ella misma lo sabía, si le fueron devueltos sus recuerdos no era más que para solicitar su ayuda. Pero nuevamente la misma pregunta llegaba a su cabeza.

Erika: '¿Por qué tuvo que suceder esto?'

La pelinegra, aunque no lo parecía, tenía bastantes inseguridades. Su madre falleció cuando ella era solo una bebé, dejándola sola al cuidado de su padre, quien no podía faltar al trabajo para seguir llevando un plato a su mesa, por lo que desde muy temprana edad tuvo que aprender a hacer las cosas por ella misma. Aprendió a cocinar, a hacer los deberes del hogar, a aprender de medicina, defensa personal y estudiar por su propia cuenta.