"Grace"

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Armando en ese tiempo había recuperado algo de peso y estaba más tranquilo, aunque muy seguido sus ojos volvían a reflejar la tristeza de su corazón, el cual aún añoraba a su Betty, principalmente cuando a su mente regresaban los momentos pasados con ella...

Como esta noche que volvio a soñar con ella y su segunda noche juntos... Esa noche donde terminó por rendirse por completo al deseo que ella le despertaba y donde maravillado la descubrió tan apasionada, era sin duda una digna “Tigresa para el tigre de Bogotá...”

Recuerdo de la noche anterior...

Estaba en su cuarto y como cada noche miraba el techo mientras le llegaban los recuerdos de los momentos vividos con “Su Betty”... No lo podía evitar, cada día la extrañaba más y más, ella era su propia cruz, la que cargaba con mucho gusto...

Los recuerdos que más predominaban en él eran los compartidos íntimamente en aquellas dos noches donde la hizo su mujer... El primer encuentro amoroso donde él se negó tanto a hacerla suya... “Que tonto”, y fue donde comenzó a entregarle su corazón sin siquiera ser consciente de ello...

Esa primera vez había reinado la ternura, el hacerla sentir segura, porque él notó que ella no estaba cómoda... ¿Quizás con su cuerpo?... ¿Quizás el que no supiera amar? ¿Qué no le fuera a gustar?... Pero ella no calibro el impacto que produjo en él sus caricias suaves, el descubrirlo con el tacto, sus besos completamente inocentes, aquellos que lo llevaron casi a la locura... Pero cuando al fin la tomó, en ese momento un caleidoscopio de sensaciones se apoderaron de él y de nuevo quiso huir...

Sintió su entrega confiada a él, el amor que le trasmitió fue tan fuerte que él no supo que sentir exactamente, solo sintió que ese era el lugar que siempre busco inconscientemente...

Después de esa noche las cosas cambiaron para él, ya no fue capaz de estar con otra mujer, simplesmente no deseaba otra que no fuera ella y de nuevo el comenzar a luchar con aquellos sentimientos que estaban creciendo dentro de él...

Comenzó a sentir la necesidad imperiosa de besarla, tocarla, sentirla nuevamente entre sus brazos, hasta que lo consiguió aquella noche en el apartamento de Mario...

En ese instante tuvo primero que luchar contra sus inseguridades y el miedo de lo que tenían se les fuera a esfumar en el aire y él aunque no lo expreso con palabras sintió el mismo miedo... Le aseguro que ella era una mujer especial y a la única que amaba, sin saber que esas palabras eran las más sinceras que había dicho en su vida...

En este primer encuentro de esta noche fue la necesidad, el ansia de días se conteniendo que dominaron ese momento sublime, el tenerla entres sus brazos y que disfrutara el llevarla al cielo...

Ella nuevamente se entrego confiada a él y se sintió el dueño de su amor y su pasión... Siii, la pasión porque aunque ella creyera que no le gustaba su manera de amar, a él lo volvio loco e irremediablemente lo llevo a tocar el cielo, algo que jamás había sentido antes...

Pero luego recibió un golpe mortal, ella ya había vivido una experiencia similar con aquel desgraciado que la utilizo por ganarse un par de pesos y él… él hacía lo mismo solo por conservar su empresa... “Ambos eran de la misma calaña”...

Y algo se removió dentro de él... ¿Ella aun lo recordaba? ¿Aun lo amaría?... No, eso no podía ser, ella lo amaba a él se lo había demostrado hace unos instantes, pero... ¿Porque esa inquietud que lo embargaba? ¿Por qué este deseo latente dentro de él de que ella ni siquiera recordara su rostro?

A pesar de que él quiso explicarle, contarle que eran iguales y querer detenerse para no lastimarla más, ella en su infinita ternura le dijo un montón de cualidades que sabía que no poseía...

✨UN MILAGRO NAVIDEÑO PARA BEA Y ROBER Donde viven las historias. Descúbrelo ahora